- Paula Chaves relató cómo su esposo, Pedro Alfonso, entró accidentalmente al baño mientras su cuñada Delfina Chaves se duchaba.
- El incidente provocó una gran incomodidad entre Pedro y Delfina, quienes hasta hoy no han vuelto a hablar del tema.
- La anécdota se compartió en el programa Después te explico entre risas y la sorpresa de sus compañeros.
Lo esencial: durante una transmisión en vivo de Bondi Live, Paula Chaves compartió una anécdota en la que su esposo, Pedro Alfonso, accidentalmente vio a su cuñada Delfina Chaves en la ducha. Según Paula, la situación ocurrió cuando Delfina vivía con ellos durante un par de semanas. Pedro confundió los sonidos del baño y pensó que se trataba de su esposa. Tras la incomodidad del momento, Alfonso decidió no volver a mencionar el tema, generando una pequeña tensión familiar que se reveló en tono de humor en el programa Después te explico, de Bondi Live.
En una reciente emisión del programa Después te explico (Bondi Live), Paula Chaves sorprendió al público y a su esposo, Pedro Alfonso, al compartir una anécdota que involucró a su hermana menor, Delfina Chaves. La modelo relató cómo el actor, por error, entró al baño mientras Delfina se duchaba, y provocó una pequeña interna familiar, ya que hasta el día de hoy no habló nunca con su cuñada.
Según la conductora, la situación ocurrió cuando Delfina estaba viviendo con ellos, situación que duró alrededor de 15 días y que generó una dinámica complicada con respecto al tema del baño. “¿Vos contaste el día que abriste la puerta y la encontraste?”, fue la pregunta de la animadora a su marido que desató las carcajadas de sus compañeros de streaming, Rodrigo Noya e Imanol Rodríguez.
Ante las risas de Noya, quien ya estaba familiarizado con la historia, la modelo dio más detalles: “No contó acá el momento cuando abrió la puerta del baño y la vio a Delfina desnuda”. Ante este sencillo adelanto de la historia, su marido se mostró en desacuerdo con seguir adelante; sin embargo, la modelo lo ignoró y siguió adelante: “Abriste el baño y la viste a Delfina en vagina”. “¡Qué te pasa Paula, por Dios!”, fue la reacción que generó en el productor mientras sus compañeros estallaban de la risa ante la desconocida anécdota.
Pedro, visiblemente incómodo, intentó evadir la conversación mientras Paula continuaba bromeando: “¿Qué te quedaste unos segundos porque pensaste que era yo? ¿Por qué sentiste que era igual? Te agradezco un montón la comparación, pero ¿no te dio para cerrar la puerta rápido porque pensaste meterte en la ducha?”. La anécdota se tornó aún más cómica cuando el hijo de Miguel Ángel Rodríguez y el actor se levantaron de la mesa.
“Voy a contar lo mío porque me ensuciaste, dijiste que me iba a meter a la ducha y eso es mentira”, comenzó a explicar el actor y dio todo el contexto de la situación: “Delfina vino a vivir a casa por 15 días. Cuando entraba al baño a bañarse gritaba ‘Pedro, salí’ y yo me tenía que tapar o me iba, era todo un evento”.
“Una tarde llegó a mi cuarto, pensé que no estaba ya”, agregó Pedro. Y Paula acotó un detalle clave para entender la historia: “En un momento le dije ‘Delfi, vos mandate, si ves que Pedro no está, no me pidas permiso para bañarte en mi baño, entrá y hacelo’. Pedro llegó”. Al llegar a su casa comenzó a escuchar el ruido de agua proveniente del baño y decidió entrar sin pedir permiso, pensando que la que estaba dentro era su mujer: “Escuchó la ducha, y de milagro entró vestido. No somos ducheros, pero creo que entraba a decirle algo, no me acuerdo qué”.
Al parecer el baño no tiene cortina, sino tan solo una mampara de vidrio y la ducha se encuentra en el medio, por lo que cuando se abre la puerta se ve todo: “Entro, abro la puerta y hubo tres segundos que me quedé mirando sin entender la situación porque son parecidas. Ella me grita ‘Pelotudo’ y yo cierro la puerta y me quería morir”. El tiempo pasó y tomó la decisión de evitar a su cuñada y nunca hablaron acerca de lo que sucedió. “Fue una sensación horrible. Fue horrible”, cerró Alfonso.
Para solidarizarse con su esposo, Paula contó que también fue protagonista de algo similar, pero por videollamada: “Llamó a mi hermana, yo en bombacha y corpiño, me pongo a pasar el trapo por la cocina, me doy vuelta con la llamada sonando. Uno piensa que la videollamada la atiende la persona que es dueña del teléfono y se escucha ‘Hello Paula’. El novio le atendió la llamada y yo en traste pasando el trapo de piso, casi me muero”.