El fin de semana había sido especial para Paula Varela, no solo porque celebró su cumpleaños, sino también por el Día de la Madre, una jornada de alegrías que contrastó con el accidente que sufrió al inicio de su lunes. Antes de salir de su casa para sumarse a Socios del espectáculo (El Trece), ciclo televisivo donde trabaja como panelista, y en medio del apuro, tomó un aparato de belleza al revés para hacerse ondas en el cabello y sintió un enorme dolor. “La agarré del otro lado y me quemé los cinco dedos. Estaba un poco dormida, todos los dedos me ardieron. No saben lo que fue”, comentó la periodista, aún asombrada por lo que sucedo cuando tomó la planchita para el pelo.
La quemadura resultó no ser de gravedad pero sí muy dolorosa, aunque pese a eso y decidida a cumplir con sus responsabilidades profesionales, optó por tratar la lesión rápidamente con vendas y cremas, se fue a trabajar como si nada e hizo el móvil que tenía pactado para ese día. Fue en ese ínterin, mientras sostenía el micrófono, que el resto del equipo se dio cuenta de que algo había pasado porque tenía su mano vendada.
El accidente, que podría haber sido mucho peor, no impidió que Paula continuara su jornada laboral de manera eficiente. Durante las transmisiones en vivo, Varela se desenvolvió con la misma soltura que la caracteriza. Su presencia en la pantalla fue muy profesional y, aunque llevaba los dedos vendados, esto no afectó en nada su desempeño. “Aparecí en el programa con los dedos vendados, pero no podía dejar que eso me complicara el día. Son cosas que pasan”, explicó la periodista, dejando entrever su compromiso con su trabajo. Sus compañeros, por su parte, aunque aliviados de que las lesiones no fueran serias, se aseguraron de brindarle apoyo, destacando la entereza con la que Varela se manejó.
A pesar de que el día había comenzado mal, con un incidente, la panelista continuó la jornada laboral como si nada y el resto del equipo le envió muchas fuerzas. “Fue un mal momento, pero ya pasó”, concluyó la periodista, en diálogo con Adrián Pallares y Rodrigo Lussich, los conductores del ciclo.
A raíz de este episodio, Teleshow se comunicó con la colega para saber cómo está. “Finalmente me vio el médico de Swiss Medical cuando fui al móvil. Y me vendó uno de los 5 dedos que estaba más comprometido”, comenzó diciendo la panelista, quien acto seguido reveló cómo se encuentra. “Hoy estoy mucho mejor, no fue de gravedad. En el momento fue tremendo el dolor, pero ya por suerte va pasando”.
“No tuve que ir a la guardia. Fue más anecdótico porque claramente fui una naba por apurada. Pero no fue dramático, fue más gracioso porque tenía que ir al móvil y con toda la mano así no podía ni maquillarme. Gracias a Dios ya va pasando”, concluyó la colega quien agradeció el mensaje de este medio.
El blooper de Paula en Socios
A mediados de mayo de este año, la panelista vivió otra situación al aire que se volvió viral pero esta vez fue más cómica que preocupante. Se paró de su silla para invitar a bailar a Toni Gelabert, quien no dudó y la tomó de la mano. Sin embargo, todo terminó en un blooper al desnudo.
Después de tirar unos pasos algo desfasados sobre el ritmo de “La Ley y la Trampa”, chacarera popularizada por El Chaqueño Palavecino, la panelista le propuso al español que recreen una coreografía algo más acrobática, la cual consistía en que ella, después de ir a velocidad, se lanzara sobre él para que la tome desde la cintura y la gire en el aire. Algo así como la escena cumbre de la inolvidable película Dirty Dancing, aunque en este caso con un tema de Ricky Martin de fondo.
Envalentonada, Paula tiró su saco al piso y tomó carrera para lograrlo. Pero al agarrarla en el aire, el español la tomó de su pollera y sin querer se la levantó, dejándola a la periodista con los glúteos desnudos frente a cámara. Así, lo que buscaba ser una coreografía de adagio se vio finalizada abruptamente, tras quedar ella en una situación que provocó las risas generalizadas en el estudio. A todo esto, el actor no podía ocultar la vergüenza y le pedía perdón reiteradamente a Paula por lo ocurrido.