El 16 de octubre del año 2024 se convirtió en una fecha devastadora para los fanáticos de One Direction, luego de que Liam Payne muriera en Argentina tras caer del balcón de su hotel. El grupo estaba conformado por Harry Styles, Louis Tomlinson, Zayn Malik, Niall Horan y Liam. Este hecho conmocionó al mundo entero y, en particular, a los millones de seguidores que habían acompañado al grupo desde sus inicios. Para muchos, la partida del artista no solo representaba la pérdida de un ídolo, sino también el fin de una era de música, recuerdos y emociones compartidas.
La cercanía con sus fanáticos fue uno de los pilares de su éxito, y su visita a Argentina no fue la excepción. Desde su llegada al aeropuerto de Ezeiza, donde miles de jóvenes se congregaron para recibirlos, los miembros de la banda no dejaron de mostrar gratitud por el cálido recibimiento. A pesar del cansancio de los vuelos y las exigencias de la gira, la banda se tomó el tiempo para firmar autógrafos y sacarse fotos con algunos afortunados. Y además de dar dos históricos conciertos, se dieron el gusto de divertirse como chicos en la Bombonera.
Con una carrera en la industria de la música marcada por el amor de millones de fanáticos, la banda realizó una gira mundial que hizo que desembarcaran por primera y única vez en el territorio nacional, ya que a los pocos meses anunciaron la separación definitiva del grupo. El 3 y 4 de mayo del año 2014, el escenario del Estadio José Amalfitani de Vélez Sarsfield fue el epicentro del inolvidable concierto de One Direction en Buenos Aires, parte de su gira mundial Where We Are Tour. Con entradas agotadas y más de 45.000 personas presentes cada noche, el ambiente se llenó de emoción desde el primer momento. Los fans comenzaron a llegar al estadio desde los días previos, acampando en las inmediaciones y esperando ansiosos el espectáculo.
El grupo que nació en el programa británico The X Factor logró reunir a adolescentes de todos los puntos del país y, a causa de la gran cantidad de entradas falsificadas, muchas personas no lograron ingresar al estadio y la organización tomó la decisión de poner parlantes en puntos estratégicos del exterior. De esta manera, todas las directioners pudieron disfrutar de un show único, que estuvo plagado de carteles, ofrendas en ropa interior, coreografías para cada canción, el clásico “Olé Olé Olé” y las emociones a flor de piel.
El concierto
Cuando las luces se apagaron, el primer acorde de “Midnight Memories” retumbó en el lugar, seguido por una explosión de gritos y aplausos. Los cinco jóvenes británicos aparecieron en el escenario para desatar la euforia del público, que había esperado años para verlos en vivo. El setlist incluyó sus mayores éxitos, entre ellos “Story of My Life”, ”What Makes You Beautiful”, “Kiss You”, “Moments” y “Little Things”, durante la cual se generó uno de los momentos más simbólicos cuando todo el estadio iluminó con las luces de sus celulares. Todas y cada una de las canciones que se presentaron esa noche fueron coreadas por una multitud que no dejó de cantar y bailar ni un segundo. A cada momento, los integrantes de la banda se turnaban para agradecer a sus fanáticos argentinos por el increíble recibimiento.
Uno de los momentos más conmovedores ocurrió cuando los chicos, sabiendo lo especial que era para sus fans el hecho de estar en su país, agradecieron de manera emotiva. Styles, con su característico carisma, expresó: “Argentina, ¡ustedes son increíbles! Gracias por hacernos sentir tan bienvenidos. No podríamos pedir un público mejor”. Los miembros de la banda también hicieron esfuerzos por hablar en español, lo que generó aún más cariño entre el público.
La energía en el estadio era electrizante; los gritos de los fans resonaban cada vez que uno de los músicos interactuaba con el público. El concierto no solo destacó por la impecable performance de la banda, sino también por el profundo vínculo que se formó entre los chicos de One Direction y sus seguidores argentinos. La conexión era palpable, y cada gesto, cada palabra en español, cada paso de baile y cada respiración de los artistas fortalecía aún más ese lazo especial.
Niall se mostró particularmente emocionado al observar la reacción del público y comentó: “No puedo creer lo increíble que es este lugar, Argentina es realmente especial”. A su turno, Payne, expresó: “Nos han hecho sentir como en casa, muchas gracias por esto”, unas palabras que después de la tragedia resuenan con una carga emocional más profunda entre sus seguidores. La noche cerró con “Best Song Ever”, dejando a todos los presentes con una sensación de alegría inmensa, pero también con la nostalgia de que la magia de esa noche no duraría para siempre.
La banda no solo dejó huella sobre el escenario, sino también fuera de él. Durante su estadía en Buenos Aires, los integrantes de One Direction aprovecharon el tiempo para hacer turismo y uno de los puntos destacados de su visita fue el recorrido por La Bombonera, el mítico estadio de Boca Juniors. Acompañados por guías locales, los cinco jóvenes británicos exploraron el campo de juego y se tomaron fotos que rápidamente se viralizaron en redes sociales.
En uno de los videos, Tomlinson, fanático del fútbol, mostró un especial interés por el estadio y la historia del club. En las imágenes se lo puede ver pateando un balón y, en tono de broma, intentando anotar un gol, mientras exclamaba: “¡Este lugar es increíble!”. Harry, por su parte, comentó: “No puedo creer lo apasionados que son los argentinos por el fútbol. Es una locura estar aquí”.
El paso por la Bombonera fue un gesto que consolidó aún más el cariño de los fans argentinos, sobre todo el de los simpatizantes xeneizes. En las redes sociales, tanto los seguidores de la banda como los hinchas del club celebraron la visita, creando memes y compartiendo videos que mezclaban la cultura futbolística con el fenómeno de One Direction.
La visita de One Direction a Argentina fue mucho más que un simple concierto. Para miles de jóvenes, fue la realización de un sueño, el encuentro con aquellos ídolos que habían seguido durante años a través de pantallas y redes sociales. La tragedia de la muerte de Liam es un hecho que quedará marcado en la memoria de quienes solían seguir al conjunto musical, y su recuerdo será una constante cicatriz en el mundo de la música.
Muchos de los fans estaban esperando que luego de 10 años de la separación pudieran reunirse nuevamente en los escenarios; sin embargo, esto dejó de ser una posibilidad. Los recuerdos de esa noche seguirán vivos en la memoria de los Directioners de todo el mundo, y el legado de esa visita se mantendrá como un momento único en la historia del pop internacional en el país.