Si bien estuvo un tiempo alejada de las cámaras, Susana Giménez hizo su regreso a la pantalla de Telefe y causó un vaivén de emociones con sus primeros invitados. En medio de charlas íntimas, juegos y hasta bloopers, la conductora dio todo de sí misma para captar la atención de sus televidentes. Sin embargo, en esta tercera entrega, la animadora se vio afectada por un problema de salud y sintió la necesidad de comunicárselo a su público este domingo por la noche.
Luego de que se escucharan las últimas estrofas de su apertura “Detrás de todo solo hay una mujer” mientras entraba al estudio, la anfitriona borró su sonrisa y explicó lo que le ocurría. “Esperen, les cuento mi drama. Estoy súper afónica, pero yo no falto a ningún programa”, aseguró mientras el tono de su voz parecía estar a punto de fallarle. En esa misma línea, continuó: “Menos a este porque los dejaría a todos ustedes sin poder a ver a sus ídolos”.
Mientras los presentes en la tribuna no paraban de aplaudir, ella, con un tono jocoso, expresó: “Vieron que me encanta jugar y decirles: ‘¡Cállense!’. Bueno, hoy no voy a poder porque estoy hecha puré”. En un intento de llevar tranquilidad a su público, Susana les dio una frase humorística para referirse a su estado de salud, por lo que recibió como respuesta una catarata de risas, restándole así la seriedad del estado de Giménez.
Si bien su voz se encontraba afectada, esto no fue impedimento para que la presentadora recibiera a su primera invitada en la emisión. Esta fue Lali Espósito, quien tuvo la oportunidad no solo de hablar de su música sino también sobre política tras el lanzamiento de su nueva canción “Fanático”, que hacía referencia al presidente Javier Milei. La artista contó con el espacio no solo para charlarlo en el diván de la animadora, sino también para entonar las estrofas del tema que causó revuelo en el mundo del espectáculo y en el ámbito de la política en las últimas semanas.
“Yo tengo amigos con los que no coincido. A mí me parece bien. Yo disfruto de discutir de política con amigos. Discutir de política no es querer que piensen como yo. Ni obligarte a hacerte sentir que lo tuyo está mal y lo mío está bien”, expresó la cantante de 33 años, quien venía de referirse a su pareja, Pedro Rosemblat y a su madre, la exmodelo Marcela Amado. Sosteniendo su mirada, la compositora reflexionó ante sus palabras y agregó: “Es una época jodida para hablar de política. Creen que, porque decís esto, pensás aquello, pero yo pienso que hay que hablar igual”. Por su parte, Susana, quien se manifestó a favor del mandatario argentino, estuvo de acuerdo con la mirada de su invitada. “Por supuesto. Con educación”.
“Lo que no se soporta es la violencia que hay. Yo no soporto que expliquen las cosas con violencia”, aseguró la diva de los teléfonos. Por su parte, Lali continuó con su explicación y le confió: “Cuando no está en la naturaleza de uno, te sentís un poco fuera de época. Creo que lo interesante de los seres humanos es avanzar, crecer y que todo eso que era tan cruel en otras épocas, empiece a dejar de serlo. Yo creo que lo que no hay que hacer, es naturalizar la violencia. El ‘bardeo’ porque sí”. Una vez más, la conductora se mostró de acuerdo con ella, a lo que la cantautora destacó: “Yo creo que nosotras, las artistas, tenemos un canal muy importante para decir lo que pensamos con altura y con amor. En mi caso, es a través de la música”.