Eugenia “China” Suárez , desde hace unos años, tiene la constancia de sostener el entrenamiento físico en el tiempo. En su momento, y después de la separación de Benjamín Vicuña , había adoptado un plan de entrenamiento físico que buscaba mejorar su fuerza y resistencia. Según este programa, diseñado por la instructora Romina Traetta, que consiste en un régimen de siete semanas con cuatro clases semanales de 25 minutos cada una.
Este plan lo sigue adoptando porque se caracteriza por su accesibilidad, ya que utiliza elementos simples como colchonetas y mancuernas, y pelotas, algunos de esos elementos pueden ser sustituidos por botellones de agua. Las sesiones incluyen cinco rondas de ejercicios, cada una con cinco movimientos que se realizan durante 40 segundos con un descanso de cinco segundos entre ellos. Ahora ella misma arma sus propias rutinas en un gimnasio privado, no escatima esfuerzos y entrena hasta los días domingos, por supuesto adaptándose a las rutinas de sus hijos y también por sus compromisos laborales.
Siempre bien lookeada con calzas negras y top combinando, se calza las zapatillas adecuadas para este tipo de movimientos. De todos modos, Suárez , también ha incorporado yoga y pilates a su rutina. El bienestar general es fundamental, y aunque la China siempre tiene sus permitidos.
Pero no solo es movimiento, el programa incluye un plan de alimentación diseñado por una nutricionista, que ofrece cinco opciones de desayunos, almuerzos y cenas. Este enfoque integral busca no solo mejorar la condición física de los sino también su bienestar general.
Siempre presente con su madre
Eugenia “China” Suárez ha sorprendido a sus seguidores al compartir imágenes junto a su madre, Marcela Riveiro, en las que el parecido físico entre ambas es notable. La actriz publicó estas fotografías en sus redes sociales para celebrar el cumpleaños de su madre, lo que generó una avalancha de comentarios destacando la similitud entre madre e hija, según informó un medio digital.
La publicación de Suárez, por el cumpleaños de su mamá, incluyó un mensaje emotivo: “Feliz nacimiento a la reina amada. Te amamos y te agradecemos siempre mami”. Las imágenes mostraban a Marcela Riveiro con una amplia sonrisa y una camisa roja, mientras que en otra foto se veía a ambas en una selfie que resaltaba su parecido, a pesar de que Eugenia actualmente luce el cabello oscuro por motivos laborales.
El evento fue una celebración íntima, donde no estuvieron presentes los hijos de Eugenia: Rufina, Magnolia y Amancio. Sin embargo, Rufina dedicó unas palabras tiernas a su abuela en redes sociales, llamándola “la mejor abuela del mundo”. Entre los asistentes se encontraba Agustina Uslenhi , mejor amiga de Suárez y madrina de su hija mayor.
Los comentarios en Instagram no tardaron en resaltar el parecido entre madre e hija, con seguidores afirmando que “la belleza es genética” y que “de tal palo tal astilla”. Este tipo de interacciones refleja el interés del público en la vida personal de la actriz, quien suele mantener su vida privada separada de su carrera pública.
Además de las fotos actuales, Suárez compartió una imagen de su infancia en sus historias de Instagram. En esta foto vintage, se ve a su hermano mayor, Agustín Suárez , junto a Marcela Riveiro, quien sostiene a una pequeña Eugenia en sus rodillas. Esta imagen también destaca la conexión familiar y las raíces japonesas de Suárez, ya que su abuela materna, Marta Mitzumori , era descendiente de inmigrantes japoneses.