La crisis entre Carolina Pampita Ardohain y Roberto García Moritán escaló a niveles acelerados y de a poco se acerca a la categoría de escándalo. Ayer se lo vio al economista retirando algunas de sus pertenencias de la casa que compartían en Barrio Parque y trascendió que estaría viviendo en el departamento de un amigo en Saavedra. Y esta mañana habló por primera vez la modelo, quien desde que estallaron los rumores se había mantenido al margen y solo había comunicado a través de gestos y señales sutiles pero elocuentes, un arte que maneja como pocas en el mundo del espectáculo.
Poco después de las 11 del viernes, Pampita salió del mencionado domicilio, donde lo aguardaba la prensa, entre los que estaba el movilero de Desayuno Americano. “¿Te vas de viaje’”, le preguntó, haciendo mención a los rumores que indican que se tomaría unos días junto a Ana, la niña de tres años que tuvo durante su relación con Moritán.
La conductora ingresó al asiento del acompañante del vehículo que la esperaba. Y desde allí enfrentó a los cronistas. “No vengan más a la puerta de mi casa. Hay chicos acá, están mostrando mi dirección. No hagan esto”, señaló con tono firme.
“Solo queremos saber si estás bien”, indagó el cronista de América, pero la modelo se mantuvo en su postura. “No vengan más, es una falta de respeto. Muestran el frente de mi casa. Mis hijos tienen que salir todos los días al colegio, es re inseguro lo que están haciendo”. Fue todo lo que dijo. Cerró la puerta, subió la ventanilla y partió sin decir adonde. Un misterio, como todo lo que ocurre con su vida por estos días.
Es la primera vez que la jurado de Los 8 escalones hace algún tipo de referencia a la crisis. Días atrás, cuando una guardia la esperaba antes de ir a grabar a su programa, solamente sonrió aunque dejó ver un detalle que no pasó desapercibido: en el dedo anular de su mano izquierda ya no porta su alianza de casamiento.
Durante esta semana en la que se viene hablando de separación, sus redes solo mostraron cuestiones profesionales o momentos distendidos, como el cumpleaños de su gran amiga Luciana Pizzolorusso, la madrina de su hija menor. Allí se la vio sonriente, animada y rodeada de su círculo más íntimo. Otra imagen con una fuerte dosis de simbolismo.
Sus próximos pasos son un misterio. Las versiones más sólidas apuntan a un posible viaje con Ana con destino Asia, pero ni ella ni nadie de su entorno dio precisiones al respecto. También corrió con fuerza el rumor de que visitaría a Susana Giménez para romper el silencio, pero fuentes de Telefe le aseguraron a Teleshow que no visitará a la diva, al menos este fin de semana. De cualquier manera, todo el mundo espera la palabra de Pampita, por lo que no hay que descartar ninguna posibilidad.
Mientras tanto, Moritán puso sus cosas en un flete y dejó el domicilio de Barrio Parque. Según informó Santiago Sposato en DDM (América TV), el político se dirigió al barrio de Saavedra, donde sus pertenencias fueron llevadas a un PH de cuatro departamentos, uno de los cuales está libre y otro ocupado por la novia de su amigo Jerónimo. Según se pudo ver a través de las imágenes de la cámara de América, la vivienda consta de dos pisos, un frente de paredes blancas con la pintura un poco desgastada y un balcón.