Tras meses de lucha, cruces y alianzas en cada una de las tribus, Survivor Expedición Robinson (Telefe) entró en una nueva etapa. Los jugadores de cada grupo tuvieron que dejar las internas atrás y planear nuevas estrategias y acuerdos para adaptarse a la unificación. En ese contexto, el juego cambió y un participante se convirtió en el 12° eliminado del reality.
En el inicio de la nueva etapa, los supervivientes enfrentaron el primer desafío de inmunidad de la unificación. Divididos en dos grupos, los participantes debían caminar hacia atrás una especie de tronco mientras mantenían el equilibrio. Con el correr de los minutos, la prueba se ponía cada vez más exigente, al punto que incluso debían llevar objetos de un área a la otra. Así la cosa, los ganadores de la prueba fueron Iván e Inés, quienes ganaron los collares que los mantendrían protegidos en el concejo tribal.
De esta manera, los jugadores comenzaron a tramar estrategias y alianzas para decidir a quién votar. De momento, las líneas divisorias no se cruzaron y los participantes se guiaron por sus respectivos grupos. Los exintegrantes de la tribu amarilla buscaban eliminar a un participante del equipo rojo, mientras que los supervivientes de este grupo apuntaron contra Colli, quien había sido el último eliminado. Una vez que cayó el sol, y la tribu unificada se dirigió al concejo, Marley reveló el trascendental cambio de Survivor: “Hoy solamente tenemos 12 posibles víctimas. Empezamos esta nueva etapa, que tiene muchos cambios. Uno es muy importante, ustedes van a votar y van a decidir quién va a ser el primer eliminado de esta etapa, pero también van a estar eligiendo al primer jurado de Survivor Expedición Robinson”.
Acto seguido, el conductor explicó cuál iba a ser el rol de los jurados de ahora en más: “A partir del próximo concejo, la persona que quede eliminada hoy va a estar acá sentada. Se van a ir acumulando los jurados hasta que en la gran final va a haber dos jugadores que van a tener que convencer al resto, al jurado. Y ese jurado va a votar en positivo por uno u otro y le van a dar el premio”.
Con el panorama claro, los jugadores se dirigieron a la urna para emitir su voto. Una vez que terminó el proceso, Marley contó los votos y anunció que el 12° eliminado del programa era Fiorela. Con ocho votos, contra los cinco de Martín (Colli) y un único voto de Goldi, la joven se vio obligada a tomar sus pertenencias y dejar el programa. “Me veía siendo la primera eliminada de la unificación, más que nada por lo malos que fuimos como estrategas como equipo. Siento que era el perfil indicado para que el sur corte una cabeza. Como competencia para las mujeres que quedaban en el sur yo era un peligro. En comparación entre Ine, Male y yo, la primera que iban a fletar era yo por una cuestión lógica”, comentó la joven de 32 años que se desempeña como personal trainer. En su presentación se había referido a ella misma como una de las candidatas a ganar ya que no esquivaba los desafíos ni la competencia. Sin embargo, esa personalidad la llevó a ser apuntada por sus rivales.
Una vez que estuvo frente a Marley, la joven de la tribu roja reveló que no estaba sorprendida por el resultado: “Me lo esperaba, siento que era una muerte anunciada, me parece que hicimos varias cosas mal como equipo en nuestra primera instancia, por más confiada que hubiera llegado hasta ese momento. Me parece que soy una competidora súper fuerte para ellos y era obvio que la primera cabeza que iba a rodar era la mía. Era confirmado, se lo dije a mis compañeros que sí tenían que elegir a alguien para eliminar iba a ser yo”.
Aún así, la personal trainer apuntó contra los integrantes del equipo amarillo: “Primero porque es un grupo súper machista el del sur y fueron cortando cabezas a las mujeres. Me parece que las mujeres que quedan en el sur sienten una competencia enfrente mío. Es parte del juego”. Luego, al girar y ver a sus excompañeros a los ojos, la participante comentó: “Me esperaba esto, es una muerte anunciada, creo que estábamos muy débiles nosotros en el norte y que si tenía que rodar una cabeza iba a ser la mía. Los entiendo a todos los que me votaron, no les tengo rencor. Espero que gane el mejor, y ojalá sea del norte”.
Horas después de que Fiorela abandonara el juego, Malena habló con sus compañeros más cercanos –los que integraban la tribu norte– y expresó cómo se sentía: “Me dolió, no contaba con que echaran a Fiorela. Pensé que cualquiera de nosotros se podía ir, pero me tomó por sorpresa y fue una trompada. Ella era como mi hermana acá adentro”. En una misma línea se pronunció Juan Pablo: “Pensé que me iba a ir yo, porque si yo estuviera en el equipo sur y fuera mayoría eliminaría a Fiorela o a mí, éramos los más fuertes, los que teníamos más influencia en el grupo”.