La tensión está al máximo en la casa de Gran Hermano (Telefe) y, a pocas horas de que se dé una nueva gala de eliminación, Juliana Scaglione y Martín El Chino Ku volvieron a cruzarse en una violenta escena verbal ocurrida en el jardín de la casa. Mientras él estaba a cargo de la preparación de un asado, la siempre exaltada concursante le lanzó una serie de duras acusaciones.
Todo comenzó con Furia increpando al Chino, con quien comparte placa de nominación esta semana. “¿Por qué no le explicás a la gente por qué Martín amenaza a Emma en vez de hacerle creer a la gente lo que vos querés que crea, manipulador?”, le preguntó a Nico, a grito pelado, fiel a su estilo exacerbado. Pero los hombres decidieron ignorarla y seguir con la energía puesta en el asado. Lejos de tranquilizarse, Scaglione salió con una botella de vinagre en la mano y comenzó a verterlo por la pasarela que da a la puerta de salida.
“Tengo la fe y la esperanza de que algún día las cosas van a cambiar: las chicas van a dejar de ser vistas como unas locas y unas emergencias, como decís vos”, gritaba Furia, fuera de sí. “Nadie te hace ver como una loca, simplemente inventás cosas. Entiendo que lo hagas por juego, pero ya está, basta”, le opuso El Chino.
“Quiero saber por qué este tontito que no entiende lo que pasa. No puede ganar el liderazgo y lo mandás a la basura”, insistió Furia, aunque sin especificar de quién hablaba. Después se dirigió directamente a Ku. “¿Sabés quién defendió a tus amiguitos? Yo. Vos deberías estar afuera hace mucho tiempo, codicioso”, le disparó. “Qué buena compañera que sos”, contestó él, cargado de ironía.
“No te sacan de acá porque tenés un perro, oportunista. Ni te merecés ese cachorro porque lo cuido yo”, le dijo gritó ella a él (quien continuaba impasible) haciendo referencia a Arturo, el perro de la casa, quien ladraba al escuchar los gritos de la mujer que lleva un particular look rapado y teñido de rosa. “Te lo regaló Dios para que seas más bueno porque ellos curan tu maldad”, agregó Furia.
Ante el silencio de Martín y Nicolás, quiénes seguían concentrados mirando la parrilla, ella los advirtió: “Se las voy a pelear hasta las 9 de la noche. Seguí riéndote de las mujeres porque eso es lo que hiciste, ¿tanto las odiás?”. “Vos sos la que maltrata mujeres, la que habla mal de todas las mujeres”, dijo Ku, finalmente. “Me hacen ver a mí como la loquita, ¿sabés lo que significa que una mina pegue gritos porque no aguanta más?”, se justificó la polémica jugadora, subiendo todavía más los decibeles de sus insoportables gritos.
“Simplemente que cuando decís mentiras de Mari no me gusta”, dijo el Chino en referencia a su novia María del Rosario, quien la semana pasada entró de visita a la casa. “Le pateó la valija a mi hermana y mi hermana a ella, entre las dos se la patearon”, respondió Furia. “Nunca le pateó la valija a tu hermana y vos decís eso intentando ensuciarla”, le replicó Martín, muy sorprendido por la acusación.
Luego Furia decidió cambiar de tema y le pidió a su competidor que esta noche abandone el juego. “Si ella se está gastando toda la guita afuera, no es mi culpa. Ya tenés una casa, tenés un perro, tomate el palo”, le dijo. “Hablá sola, seguí con tu monólogo de mentiras. Yo soy un espejo: todo lo que me decís, sos vos, vas a tener que laburarlo”, le dijo Martín, muy sereno en oposición al brote que estaba experimentando Juliana.
A continuación, ella decidió volver a cambiar el foco de su casi monólogo para acusar al Chino de otra cosa. “Soy entrenadora y levanto más kilos que vos, envidioso, te vivo motivando. Envidioso vos que no sos mujer, gil”, le espetó Furia. “¿Qué tiene que ver la mujer en esto?”, le preguntó Martín, absolutamente desconcertado por el insólito viraje que experimentó de la discusión.