Si bien el paso de Damián Moya por la casa de Gran Hermano (Telefe) fue bastante breve, esta experiencia marcó un antes y un después en su vida. Orgulloso de su participación en el ciclo, el joven bailarín decidió que debía recordarlo por el resto de su vida. Por ello, se puso en manos de un profesional y se realizó un tatuaje que sorprendió a más de uno en las redes sociales.
A través de sus historias de Instagram, el muchacho de 28 años compartió el proceso creativo para la confección del diseño que realizó en su piel. Enseñando su antebrazo con el modelo, el exjugador fue capturando el proceso que le llevó tatuarse. Pero no era cualquier símbolo, sino que se trataba del logo del reality, cuyos colores azules y violeta neón resaltaron en contraste con esa parte de su cuerpo.
El resultado final lo compartió el profesional que lo tatuó, quien le sacó fotos al diseño que plasmó en Moya, que estuvo 41 días en la casa más famosa del país. Sin embargo, su cariño por el certamen que le abrió paso a la televisión era demasiado grande y no dudó en dejar constancia de ellos de una forma visible y llamativa, la cual causó un gran revuelo entre los fanáticos, quienes pronto se dividieron entre el apoyo y el asombro.
Cabe mencionar que el joven de Villa Carlos Gardel no fue el primero en dejar constancia en su piel de su paso por la casa, sino que Rosina Beltrán se le adelantó.
“Hice una promesa conmigo misma y me dije que si entraba a la casa lo iba a mostrar”, explicó apenas comenzó el reality, luego de que Santiago del Moro, el conductor del ciclo, la presente. “31-3-23, es el día que hice el casting de Gran Hermano”, reveló mientras mostraba sus diseños con la boca abierta. En el labio superior, la fecha del casting. En el inferior, la palabra éxito
Otros antecedentes en GH
El diseño de Damián hizo recordar al “tridente” de la anterior edición del reality, conformado por Romina Uhrig, Julieta Poggio y Daniela Celis. Tras salir de la casa, las exparticipantes decidieron un tatuaje con un significado profundo, el cual dejaría constancia de su amistad. En ese sentido, sellaron con tinta un símbolo que las acompañará por el resto de sus vidas. “Juntas para siempre”, escribió la modelo al referirse a la decisión que tomaron entre las tres luego de su paso por el programa.
“Llegó el gran día, el tridente presente. Nos vamos a tatuar el ojo del Gran Hermano, lo que nos marcó y nos cambió la vida para siempre y nos hizo conocer a estas hermosuras de personas”, explicó la joven conocida como “Pestañela”, quien luego formó pareja con otro de sus excompañeros del certamen y hasta tuvo con él dos hijas.
En el comienzo de la espalda, las exjugadoras del certamen le pidieron a un tatuador que les haga un diseño delicado, pero con un motivo profundo. Unas cuantas líneas hechas con mucha precisión fueron lo que necesitaron para constancia de su experiencia en la casa de Gran Hermano, que las unió como mejores amigas. Tomándose de las manos ante la cámara, las mujeres expresaron su felicidad por tatuaje y comentaron que “es algo que nos va a quedar para toda la vida, para siempre”.