La casa de Gran Hermano 2023, habituada a los conflictos y peleas, se enterneció hace 10 días con el ingreso de Arturo, un galgo mestizo que fue rescatado y consiguió con su historia ganarse al público como a los participantes del reality. Sin embargo, hubo reparos. Lucas Otero, un adiestrador canino que brinda sus conocimientos en redes como Instagram y TikTok, se volvió viral por un video donde criticaba el ingreso del perro, como el desconocimiento que veía en los concursantes sobre el comportamiento del animal.
Unos días después de la entrada del perro a la casa, preocupó en las redes cómohabía reaccionado cuando Darío, uno de los concursantes, quiso tocarlo y la conducta aprehensiva que comenzó a generar con Martín. Incluso se vio cómo les ladraba a Furia y Emmanuel cuando ellos se acercaron demasiado al Chino. Todo esto consiguió que desde la producción se decida que el can tenga salidas diarias fuera de la casa para liberar su exceso de energía.
El especialista, en dialogó con Teleshow, explicó por qué el animal viene actuando así. “Estuve indagando un poquito acerca de la historia de Arturo y es un perro que sufrió maltrato. Ellos pueden presentar muchos miedos e inseguridades. Se tiene que ver cómo puede gestionar ese miedo o inseguridad hacia personas desconocidas. Ahí ya me saltó una alarma de que no se estaba dando un mensaje del todo consciente. Si bien se trata de fomentar la adopción, no creo que se esté haciendo de una forma responsable”, analizó.
“El año pasado el programa había hecho lo mismo con dos cachorros y también tuve una posición muy crítica al respecto. Si bien los dos casos son distintos, yo siempre recomiendo que un perro no puede estar expuesto a este tipo de situaciones, sobre todo porque necesita estar en un ambiente tranquilo y la casa de Gran Hermano no lo es”, aseguró.
¿Arturo quiso morder a Darío y atacar a Furia? “En realidad, no es que lo quiso morder al participante, sino que pidió espacio mediante lo que nosotros llamamos señales de amenaza, como lo es una mordida al aire. Si lo hubiera querido morder, lo hubiera hecho. Esto se repitió en dos ocasiones con un participante y después con otra”, explicó el influencer que eligió llamar a su escuela Duan educación canina en honor a su amigo de cuatro patas que murió hace unos años.
“Arturo estaba descansando en dos lugares distintos, en una camita y en el sillón, en donde se le acerca ron para manipularlo. Yo siempre digo que el manipulado es algo muy íntimo y depende mucho de que haya un vínculo para aceptar que lo toqueteen. Depende también mucho del contexto. Creo que a nosotros tampoco nos gustaría que nos pase eso cuando estamos descansando tranquilos, sobre todo si también estamos con los niveles de estrés muy elevados. Eso puede provocar que se ponga más irritable”, detalló.
“Muchas veces cuando el perro está descansando no hay que molestarlo y en estas dos ocasiones sucedió eso. Arturo estaba descansando tranquilo, se le quiso tocar y pidió espacio mediante una mordida al aire, que no fue una agresión real. Después de eso, en otra ocasión, sí se le ha provocado propósito”, señaló, para puntualizar en cómo Juliana simulaba pegarle al Chino para generar una reacción en el can.
“Una de las participantes le daba almohadonazos a otro participante, que por lo que sé es con quien Arturo se afianzó más y donde generó un vínculo más fuerte con respecto al resto de los participantes. Entonces Arturo estaba viendo que se lo estaba agrediendo a él y se puso a la defensiva mediante ladridos. Eso genera más estrés en él porque, obviamente, el perro no comprende el concepto de actuación”, analizó el adiestrador.
No es la primera vez que el especialista, que se dedica desde 2009 a la educación canina respetuosa, pone bajo su lupa al programa de Telefe. El año pasado tampoco estuvo de acuerdo con la entrada de Mora y Caramelo, unos perritos de pocos días que se terminaron quedando Marcos Ginocchio, el ganador de la temporada anterior, y Romina Uhrig.
“Con el ingreso de los cachorros fui muy crítico. Si mal no recuerdo, tenían 60 días o un poquito más. En ese momento los cachorros pasan por lo que se llama un periodo crítico de socialización. En ese periodo hay que exponerlo a todo lo que se va a cruzar a lo largo de su vida. Obviamente en ese momento estaban aislados del mundo”, puntualizó.
“Ahí es donde el cachorro tiene que conocer otros perros, otras personas, niños y todo lo que se puede llegar a cruzar en la calle. Obviamente no tienen el vacunatorio al día, pero se le puede sacar a upa y presentarle toda esa estimulación para que en un futuro no le tengan miedo a esos factores. Es un periodo muy importante y donde también pueden aparecer en el futuro, si no se hacen las cosas bien, muchos problemas de comportamiento”, aseveró.
Al ser consultado sobre los programas de TV donde algunos juegos involucraban a perros, el adiestrador canino fue tajante. “En ese tipo de programas he visto de todo. Hay perros que expuestos a esas situaciones se los ve cómodos y otros que no querían ni moverse. Yo siempre digo que hay que exponer a los perros a situaciones que sean capaces de gestionar. Obviamente el perro no elige ir ahí. Es algo que está cubriendo nuestra propia necesidad y no la del perro. Lo mismo pasa con Gran Hermano. Yo siento que ahí se está satisfaciendo la necesidad o el ego humano por sobre las necesidades del perro que está en pantalla”, sentenció.
Los perros de los famosos bajo la lupa del adiestrador canino viral: “Viven a upa y pierden autonomía”
En tiempos donde los derechos de los animales y el proteccionismo tienen una gran difusión en los medios, Lucas Otero considera que todavía queda trabajo por hacer, sobre todo entre las celebrities y figuras reconocidas.
“He visto a varios famosos con perros de tamaño chico que quizás se la pasan mucho tiempo a upa y pierden autonomía. Estos suelen ser perros que viven más sobre la falda que con las cuatro patas en el piso y al no tener posibilidad para moverse, no tener autonomía y no poder tomar decisiones empiezan a generar inseguridades, miedos y frustraciones”, apuntó el adiestrador canino.
“Ahí empiezan a aparecer diferentes problemas de comportamiento, ladridos, mordidas y todo tipo de señales de amenaza”, explicó, sobre muchas de las mascotas que aparecen junto a los influencers y que, incluso, hasta suelen tener sus propias cuentas en las redes sociales.
Los consejos del adiestrador canino viral sobre la adopción responsable de un perro que fue maltratado
Lucas Otero, en sus 15 años como profesional en la educación canina, tomó el caso de Arturo en la casa de Gran Hermano 2023 para dar recomendaciones a la gente que se decide a recibir en su hogar un animal que viene de la calle.
“Si adoptamos un perro que ha sido víctima de maltrato, o uno que no, que puede llegar a casa con los niveles de estrés muy elevados y con miedos, lo primero que tenemos que ofrecerle es un espacio tranquilo. Esperar que el perro vaya ganando confianza, que vaya conociendo el lugar y generando un vínculo con nosotros”, aconsejó.
“Dejarlo en paz, mantener al comienzo los niveles de exigencia bajos, pero sí marcarle cuáles son las normas de convivencia de la casa, siempre de una forma amable y satisfaciendo al mismo tiempo las necesidades de ese individuo que llega al hogar. Cada perro es un mundo, cada perro vivió diferentes situaciones y hay que adaptarse a eso”, reflexionó.
“La adopción siempre es la mejor opción. Hay un montón de perros que están esperando encontrar una familia que le brinde todo lo que necesita, pero siempre hay que hacerlo de forma responsable y asesorarse. Hay un montón de profesionales que trabajan igual que yo. Siempre que una situación o un problema a una persona lo supere o no sepan cómo abordarlo, acudan a un profesional para que los guíe en todo el proceso, sobre todo al comienzo cuando pueden ser días muy críticos”, recomendó.
“Algo que se suele ver mucho es que ese perro vuelve a terminar abandonado, vuelve a la calle, a un refugio de donde fue adoptado o un lugar de tránsito. Terminan siendo perros que van rebotando de hogar en hogar hasta que, obviamente, llegan a una familia que sabe comprenderlos y le da todo para que tenga una buena calidad de vida”, manifestó.
¿Cómo lidiar con un perro que llega a una casa con nenes de corta edad? “Teniendo niños la situación puede verse un poquito complicada. Siempre digo que la interacción entre perros y niños, sobre todo, tienen que estar 100% supervisada”, expresó.
“No podemos permitir que el niño vaya a invadir el espacio del perro, que lo moleste. Los niños se suelen descontrolar con más facilidad, gritan, corren, saltan y hay que evitar que se haga todo eso en presencia del perro”, señaló.
“También es importante ofrecerle al perro un lugar de referencia donde pueda refugiarse dentro de casa cuando se sienta sobrepasado por una situación. Ubicar su lugar de descanso apartado de puertas y ventanas de donde provengan sonidos del exterior para que se pueda relajar y descansar con más facilidad para que los niveles de alerta no estén tan elevados”, concluyó.