Oscar Di Biase, Osky para los amigos, es empleado administrativo del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires desde el año 1992. Pero también es portador de una veta artística que lo llevó a homenajear a algunos de los íconos del rock argentino. Primero, como productor de radio, oficio que lo llevó a trabajar en distintos espacios y siempre con esa música como eje. Pero desde hace unos años se convirtió en el “muralista del rock en mosaico” desde que empezó a retratar ídolos de nuestra música en las paredes de la ciudad.
El Instituto Social Militar Dr. Dámaso Centeno está ubicado en el barrio porteño de Caballito y fue el colegio en el que Charly García y Nito Mestre se conocieron allá por los años 60, lo que derivó en la formación de Sui Generis. Allí mismo se inauguró este lunes un mural en homenaje al histórico dúo, dueño de álbumes clásicos como Vida, Confesiones de invierno y Pequeñas anécdotas sobre las instituciones que alumbraron los primeros años del rock en Argentina.
“Allá por el 2017 se me ocurrió la idea de hacer el mural en el colegio, que depende del ejército. En su momento le había presentado el proyecto al director del colegio, que es un coronel. Y le había gustado, pero no había presupuesto y yo tampoco tenía materiales para hacerlo. En 2021 cambiaron las autoridades y nunca me atendieron. En el interín, hice un mural de Rodolfo García, baterista de Almendra, para el cual necesité donaciones de materiales. Me escribió Jorge, un muchacho de Mar del Plata, para ofrecerme la donación de la pintura. Pero por otro lado me contó que era uno de los presidentes del fans club oficial de Sui Generis. Entonces le comenté toda esta idea del mural y se cargaron el proyecto al hombro: ellos mismos donaron plata, juntaron para comprar los materiales y yo no cobré por mi trabajo. Hablamos con el nuevo director y le encantó la propuesta. Por suerte lo pudimos llevar a cabo y acabamos de inaugurarlo”, le comenta Di Biase, de un tirón, a Teleshow.
Nito Mestre estuvo en el acto en el que se mostró por primera vez “Quizás por Sui”, tal es el título del mural, un juego de palabras entre el nombre de la banda y la canción “Quizás, porqué”, una de las más conocidas de su repertorio. “Ya me lo había agradecido de antemano, a través de las redes, antes de que se inaugurara el mural. Está muy contento, le encantan estos homenajes. Y ahora cuando lo vio, nos conocimos y me lo agradeció personalmente. La verdad que es un tipazo”, cuenta Di Biase. ¿Y Charly? “Nito habló con él y nos manda saludos. Me dijo que le encantó, que está muy agradecido y contento con el homenaje”.
“La foto es emblemática, hecha por una gran fotógrafa como es Ada Moreno. Ella los retrató en el año 1975 para el Adiós Sui Generis. Estuvo acá presente y me agradeció el trabajo que había hecho. Trabajé sobre la foto de ella porque es icónica, de su despedida. Y la técnica que yo uso, la que aplico a todos mis murales, es mosaiquismo y trabajo con azulejos. El mural tiene 3 metros por 2. Lo empecé en una placa de fibrocemento, proyecté la imagen de la foto, la calqué sobre la placa y luego la corté como si fuera un rompecabezas para ir trabajándola parte por parte. Después trajimos cada pedazo acá al colegio y lo instalamos en la pared para que queden pegados directamente. Eso ya queda fijo, no se saca más. Para sacarlo hay que romper la pared”, explica Osky el proceso de su obra.
“Me gusta el rock argentino, tengo 51 años. Cuando tenía 8, en el año 1982, escuhé por primera vez el tema ‘Yo no quiero volverme tan loco’, de Charly, que es mi ídolo absoluto, y a partir de ese momento a mí me pasó algo. No sé qué pasó pero me sentí identificado mucho con esa música. A partir de ahí, empecé a indagar en el rock”, cuenta sobre cómo la música influyó en su vida.
El muralismo llegó a su camino luego de sentirse atraído por los vitraux de las iglesias y decidió inscribirse en un curso que se impartía en el Centro Cultural San Martín, donde aprendió la técnica del mosaiquismo de la mano de su profesor y mentor llamado Andrés Jacob. “Lo primero que hice fue en el año 2011, un cuadro de Gustavo Cerati que se lo quise regalar a Lilian Clark, su mamá. En ese momento él estaba internado en la clínica luego de haber sufrido un acv. Al año siguiente, inauguramos el mural de Gustavo en el Colegio San Roque, al que él asistía”, recuerda el muralista.
“Yo no soy fanático ni de Soda ni de Cerati. Me encanta su obra, pero en ese momento lo sentí porque quería hacer algo para homenajear a Gustavo, que estaba internado, y quería que existiera un lugar en el que la gente le pueda tirar la mejor energía para su recuperación. Ese fue el objetivo, por eso buscamos un lugar emblemático para hacerlo”, cuenta.
Además de los mencionados, Osky ya homenajeó a Pappo y al baterista Martín Carrizo. Y en este 2024, como se cumplen 40 años del álbum debut de Soda Stereo, el plan es homenajear al trío en una esquina emblemática de la ciudad. “La idea es poder conseguir un lugar enfrente a la esquina donde hicieron la tapa del disco Doble Vida, enfrente al Cabildo”, revela el muralista, quien también está trabajando en una pieza en tributo a Leonardo Favio. “Es otro gran referente de la cultura y la idea es hacerlo en un centro cultural que está en Lanús y que lleva su nombre”, cuenta.
“Cuantos más murales pueda hacer, es un placer. Lo primero y principal a la hora de encarar un nuevo proyecto es conseguir una pared, que alguien done una pared para poder dejarlo plasmado para toda la vida. Porque si no se tira la pared, eso queda ahí”, cierra Di Biase.