Este lunes se conoció la noticia de que Eduardo de la Puente había sido hospitalizado a raíz de un ACV sufrido el fin de semana. El periodista de 60 años decidió compartir la noticia desde su internación para asegurar que, a pesar del incidente, su estado de salud no corría peligro. “La saqué bastante barata. Pero bueno, por unos días voy a estar fuera del juego”, manifestó y destacó tanto la atención médica, como el apoyo de familiares y amigos en este difícil momento.
Al final de esta semana, el comunicador recibió el alta médica, y tuvo una charla exclusiva con Teleshow, en la que reveló cómo se desencadenaron los hechos. “Yo me fui a hacer atender porque pensé que tenía dengue, porque estaba con un dolor muscular importante y tenía mucho dolor de cabeza”, comenzó su relato sobre lo vivido mientras se encontraba al aire en su programa radial.
Según De la Puente, el primer síntoma se manifestó con complicaciones en la visión. “Se me estaba jodiendo la vista. No podía leer, era como que me faltaban letras al comienzo de las de las frases y mirando títulos en la tele me pasaba lo mismo: era como que las primeras letras me desaparecían y me costaba mucho leer los textos del programa, por ejemplo, tenía que enfocarme mucho y aun así me costaba demasiado leerlos”, contó a este medio.
Alertado ante esto, el periodista decidió ir a una clínica para hacer una consulta médica. “Les expliqué todos mis síntomas, pintaba como un dengue, pero claro, en donde dije esto que me estaba ocurriendo con la visión, ahí fue que me mandaron a hacer una resonancia magnética y saltó que estaba teniendo un ACV”, destacó.
Sin embargo, no esperó allí los resultados, sino que regresó su domicilio. “Cuando saltó eso me llamaron por teléfono y me dijeron: ‘Tuviste un ACV, venite ya para acá'”, recapituló Eduardo, quien luego pasó tres días en terapia intensiva para hacerse estudios y controles.
Sobre esas 72 horas aseguró que notó su evolución: “Se me fue corrigiendo la vista. Miraba tele a propósito. Miraba el reloj del celular y veía los minutos, pero no la hora. Entonces me pasaba todo el tiempo mirando, para probar”.
“Por suerte ya estoy recuperado. Hace dos días me dieron el alta. Lo bueno de todo esto y lo principal es que no quedaron secuelas, cosa por la cual estoy agradecidísimo”, aseguró para después referirse a los pasos a seguir.
“Lo que se viene ahora, obviamente son una serie de estudios gigantes, algunos tienen nombres que parecen temas de Spinetta”, detalló sin perder el humor que lo caracteriza. El objetivo de estos estudios, que comenzarán dentro de un par de semanas, es “que el tratamiento sea exactamente el que necesito”, sostuvo.
Cada uno de los posteos que hizo Eduardo en sus redes sociales, vinculados a su salud, recibió muchos comentarios y feedback de sus seguidores, quienes le daban fuerzas para su pronta recuperación. A propósito de ello, el locutor se mostró agradecido y dijo: “La cantidad de gente que mandó deseos de recuperación es gigante. O sea, de golpe, en el WhatsApp encontré cerca de 500 mensajes, muchos de personas que ni conocía ni nada por el estilo. También en mi Instagram, todos con muy buena onda, deseando prontísima recuperación, unas muestras de cariño y afecto terribles”.
Otra cosa que lo conmovió fue que a partir de este episodio pudo recuperar relaciones que se encontraban quebradas y así lo detalló: “Lo mejor de todo esto es que he recuperado una relación fundamental que es la de mi familia. Tengo una familia muy numerosa, a la cual yo había abandonado realmente y esto me llevó a retomar los vínculos, cosa que necesitaba imperiosamente y es algo que me tiene muy feliz”.
Gracias a la rápida recuperación, el locutor confirmó que el sábado estará de nuevo comandando en su programa Clásico de Clásicos Volumen Uno (Rock & Pop). “Estoy deseoso de volver, porque el último programa que hice fue en pleno ACV y me costó un huevo y medio. Y ahora estoy con una ansiedad gigante. De hecho, ya estoy juntando los vinilos para el día de mañana. Son muchas las ganas que tengo de volver a la radio”, cerró.