Hace un tiempo ya que Minerva Casero brilla con luz propia. Su crecimiento profesional la fue despegando del siempre complicado rol de hija de, como lo demuestra trabajo en la serie Iosi, el espía arrepentido, que le valió un Cóndor de Plata y la flamante nominación a los Premios Platino, entre otros logros. Sin embargo, una figura tan fuerte como la de Alfredo Casero, tanto en su carrera como actor como en la vehemencia con la expresa sus ideas políticas, la llevan a una situación incómoda que aprendió a manejar con el tiempo.
En una entrevista para Agarrate Catalina, la actriz se mostró muy contenta con su presente profesional, al que su constante progreso como actriz le sumará un inminente desembarco en la música. Pero también se refirió a los malos tragos que cada tanto debe afrontar cuando la asocian a las opiniones políticas de su padre, amado por unos y odiados por otros, a un lado y al otro de la grieta.
“Mis conversaciones con mi padre tienen más que ver con lo personal, lo sentimental y de vida y no se centra tanto en lo que él opine o no en torno a la realidad social de nuestro país”, señaló la actriz en el programa de La Once Diez, y aseguró que la postura de política de su padre, y el hecho de hacerlo público no influye para nada en su relación. ”Charlamos un montón, tengo muchos espacios de conversación extensos con él”, aseguró.
En este sentido, enfatizó no tener inconvenientes con las decisiones de su padre, pero planteó un efecto de lo que ocurre cada vez que Alfredo habla. “A veces la gente no sabe distinguir que una puede ser otra persona, que es una chica joven, y me atacan de una manera brutal por cosas que no tienen que ver conmigo”, expresó en su diálogo con Catalina Dlugi.
Minerva contó que a menudo recibía comentarios “fuera de lugar”, pero no lo limitó al hecho de ser la hija de Alfredo Casero: “Siento que es algo a lo que nadie está exento, no es porque mi padre salga a opinar de política. A vos (por Dlugi) te debe pasar un montón y toda persona que tenga cierto grado de exposición recibe mensajes agresivos”. Pese a atravesar estas situaciones desagradables, Minerva dijo llevarse “bastante bien” con la situación. “Cuando la gente se pone más difícil consigo lograr una armonía alrededor. Pero sí, hay gente que tira a matar y a mí eso no me gusta nunca. No hay que ser así”, concluyó.
Por fuera de estos contratiempos, días atrás Alfredo visitó a Fer Dente en su programa de América y relató una divertida anécdota que involucra a su hija y a Tomás Kirzner, el hijo de Adrián Suar, quien fue su novio durante dos años. “¿Le hacías cortar el pasto de tu casa a Tomás?”, le preguntó Dente. Y Alfredo asintió entre risas, justificando que los actores tienen que saber hacer de todo.
“Si no, te puede pasar como le pasó a esos actores que una vez hicieron una novela que tenían que hacer que eran dos hermanos mecánicos. En una escena, estaban arreglando un tractor y tenían una llave así y decían: ‘¿Qué estás haciendo?’. ‘Estoy arreglando el carburador....’. ¡Y el tractor no tiene carburador! Entonces uno como actor tiene que saber hacer todo”, argumentó. Y cerró con palabras elogiosas para su exyerno. “Yo lo quiero muchísimo a Toto. Y tengo un cariño enorme por él. Lo conozco desde que nació, son amigos de toda la vida con Minerva, muy amigos”.