En Gran Hermano los bandos están muy marcados. Día a día se arman y se desarman estrategias entre los participantes y hay mucho de juego en cada relación entre los hermanitos. Sin embargo, se han formado vínculos entre ellos que a veces provocan alegrías y también tristezas. Tal es el caso de la relación entre Agostina y Catalina. La médica pediatra, quien había sido eliminada del juego, volvió a ingresar en el repechaje por decisión del público. En este caso lo hizo junto a otros dos exparticipantes: Isabel y Joel.
No bien la joven entró por la puerta de entrada al patio de la casa, Agostina corrió a su encuentro, con tanta mala suerte que en la corrida hacia ella se cayó en el trayecto, lastimándose la pierna. Sin embargo, Cata la saludó fríamente y abrazó a Furia, quien por estos días se convirtió en la enemiga de la expolicía. En ese contexto, durante este lunes en la edición de Gran Hermano, se pudo ver un compilado de imágenes en las que se apreciaba cómo Agostina se mostraba muy afectada por la indiferencia de quien había sido su amiga hasta el momento de abandonar el juego.
“Estoy devastada”, les dijo a sus compañeros en la habitación de los varones, tirada en la cama. “Me dolió, si bien podía esperarme esto no pensé que iba a pasar”, continuó la joven llorando. Luego, fue al confesionario y allí se explayó otra vez con esta situación que estaba viviendo. “Me duele mucho la reacción que tuvo Cata hacia mí”, comenzó diciendo mientras se tapaba los ojos por las lágrimas. “Me sentí que vino como directo a jugar con Furia, encontrarme con algo totalmente diferente como que me dolió”, expresó visiblemente emocionada. “Siempre habló de valores, siempre habló de ser uno mismo y yo creo que jamás le fallé como persona a ella. Y pienso a ver, en qué fallé, y no entiendo”, agregó.
“Parece que hay que ser como mala persona, o sea, que hay que jugar sucio para decir bueno, tenés el apoyo, no entiendo”, lloró frente a la cámara de Gran Hermano.
Más adelante, se puso a tomar mate con Licha, quien le dijo: “Primero permitite tener una charla con ella”. “No”, respondió la joven. “Ya está, yo esperaba algo totalmente diferente de ella. Además yo no le hice nada, porque si vos decís ‘bueno me la mandé', bancátela, pero no me la mandé. Es un puñal en el medio del corazón”, se sinceró la hermanita frente a Lisandro y Joel. “No esperaba que me eligiera a mí antes que a Furia, pero sí esperaba ese abrazo de ‘amiga te extrañé'”.
Sin embargo, pese a la tristeza que la embargaba, Agostina se puso fuerte y luego reflexionó. “Ya sé que se me va a pasar y que esto es un juego. Y si vos querés jugar, bueno, voy a jugar, ¿querés ponerte en puta?, bueno me voy a poner en puta, pero no lo esperaba”, continuó con su descargo. Mientras tanto, Licha le aconsejaba cómo actuar. “Vos no tenés que adoptar esa posición. Yo a modo de recomendación, si ella decide hacer ojos ciegos, mirar para otro lado y darte la espalda, que la gente la juzgue por eso”.
Antes de dormir, mientras se la veía a Agostina acostada junto a sus compañeros, agregó: “Esto me devastó. Yo sé lo que fui, si ella eligió eso, tema de ella, pero...” expresó entre lágrimas. Un rato después, cuando todos dormían, la hermanita no podía conciliar el sueño y la cámara enfocaba sus ojos que continuaban llorando.