Con su voz ronca, medio disfónica, y su personalidad extrovertida, Catalina Gorostidi dice lo que piensa. En un diálogo íntimo con Teleshow, habla de su vida y de sus sueños con la simpleza y la facilidad de alguien que se muestra auténtica. “Me quedé casi sin voz al segundo día de entrar a la casa”, explica la exparticipante de Gran Hermano, dando a entender que fue uno de los acontecimientos más importantes de su vida.
Cata tiene 33 años, es médica pediatra, oriunda de la provincia de Santa Fe y desde que era una nena supo que lo suyo serían las luces del espectáculo. “Esto es lo que siempre soñé desde chiquita. Mi mamá me cuenta que yo tenía cuatro años y le decía ‘mami, quiero ser como esa señora’. ¡Y esa señora era Moria Casán, en una marquesina de Mar del Plata!”, comenta risueña para explicar su pasión por la televisión. “Estuve solo cinco semanas adentro de la casa y nunca nos imaginamos esto. Encima yo vengo de un palo que nada que ver, trabajaba en el hospital, y de golpe que te conozca todo el mundo. Salí hace cuatro semanas y todavía no entiendo nada. ¿Qué está pasando? Es muy loco”, se pregunta sobre este presente que vive con la mayor intensidad posible.
—Si te gusta tanto el espectáculo, ¿por qué estudiaste Medicina?
-Yo terminé 5° año y quería estudiar periodismo, pero ahí en Santa Fe no había muchos lugares. Entonces, me pregunté qué podía estudiar para ayudar a las personas, y se me ocurrió Medicina. Y bueno, me encantó. Después me especialicé en Pediatría y trabajé de eso hasta días antes de entrar a la casa. Y la verdad es que a cualquier persona que no sabe qué estudiar le recomiendo que estudie Medicina, porque no hay mayor rédito que cuando vos ves la carita de un paciente que le dan el alta, eso me saca una sonrisa y me cambia el día. ¡Tiene tantas cosas hermosas la Medicina! Darle el alta a un paciente es una fiesta. Literalmente es una fiesta.
—También debe tener la parte dura la de dar malas noticias
-Yo siempre trabajé en internación, no hago consultorios, y eso es más duro aún, porque son nenes con problemas oncológicos, o con enfermedades muy duras. Pero para esa parte mala creo que tenés que tener una personalidad para poder afrontarlo y para permitirte también a veces llegar a tu casa y llorar lo que no podés llorar enfrente del paciente o de la familia. Yo soy jefa de guardia de internación, tengo a mi cargo a los residentes, entonces uno tiene que mostrar fortaleza y enseñarles a ellos cómo se tienen que manejar ante los momentos feos, ya sea con un fallecimiento o dar una mala noticia. Lo importante no es solamente curar, sino acompañar, porque nosotros tenemos muchos pacientes que son para acompañar, porque sabemos que algunos no se van a curar pero el acompañar y el estar en todo ese momento sirve muchísimo también para ellos. Más que nada para su familia, porque la mayoría son muy chiquititos. Es difícil de entender que tengas que ver fallecer a un paciente tuyo y acompañar a la mamá en ese momento y a su vez acompañar a tus residentes que están sufriendo al mismo tiempo que vos. Es todo un círculo para lo que tenés que ser muy fuerte, pero a la vez decir ‘bueno, hicimos todo lo que pudimos y ese paciente se fue en paz’, se fue con lo mejor de todos nosotros. Por eso yo viví tantas cosas de mi carrera que cuando alguien, por ejemplo un hate me putea o dice cosas feas de mí que yo sé que no son así no me influye, porque viví tantas cosas verdaderamente duras, importantes en mi vida que a mí, por lo menos, no me afecta.
—¿Cómo te llevás con tus excompañeros que también salieron del juego?
-Excepto con dos personas que la verdad que se aislaron solas porque son mala gente, con todos los demás estamos siempre juntos. En realidad, las que se apartaron son Florencia e Isabel, nosotros las invitamos a salir pero tienen todo un mambo de que por sus fans no se podían juntar con nosotros. El fin de semana pasado salimos todos juntos, la pasamos espectacular. Y todos afuera tenemos una relación hermosa, cada vez que alguno tiene un problema nos vamos calmando entre todos. Nos dimos cuenta que somos todos rebuena gente, que si nosotros mismos no nos ayudamos entre nosotros a vivir esta locura que es Gran Hermano, ¿quién más que nosotros nos podrá entender?.
—¿Por qué te peleaste con Alfa?
-De Alfa no quiero decir absolutamente nada. Yo creo que él tiene muchos fans afuera, y creo que verdaderamente los seguidores no nos conocen como personas. Pero no quiero hablar de él porque prefiero guardarme para mí lo que pienso de él. Yo no voy a salir a decir nada malo ni nada bueno. Si quiere hablar de mí, que diga lo que quiera. Yo sé muy bien quién soy. Mi familia sabe quién soy. Mis pacientes y mi familia saben quién soy. Y mis compañeros de Gran Hermano también saben quién soy. Entonces no le quiero dar entidad. De mi parte no va a salir nada de lo que yo pienso sobre él. Nada.
—¿Te gustaría volver a entrar en el repechaje?
-¡Obvio!. Quiero volver a entrar a la casa y también quiero volver a ver a mis amigas, a Agostina y a Furia. Si entro creo que el juego cambiaría muchísimo porque sé que mucha gente se desestabilizaría. Tengo una palabra para cada uno sin romper el aislamiento para desestabilizar o acomodar. Quiero traer hacia mí a gente que se separó un poco y creo que está haciendo un mal juego. Por ejemplo, Zoe, que es una mina súper divertida, que no criticaba nunca a nadie y la veo ahí un poco mal influenciada con el grupo en el que está. Si cruzo esa puerta el juego cambiaría al 100% . Tengo estrategias súper pensadas. Voy a estar leal 100% a mis amigas, que son Furia y Agostina. Sé que ahora están peleadas, y también me gustaría entrar para que se den cuenta que no sirve pelearse, ni tampoco creo que Agos piense que Furia es mala persona. Creo que se enojó en el momento, pero yo voy a estar leal a Furia porque ella no es mala persona. Es una mina excelente. Y yo creo que si entro, voy a tratar de unir ese grupo de nuevo y que “Las furiosas” realmente sean las furiosas del principio. Y me gustaría también que el Chino esté incluido. Creo que podríamos llegar muy lejos y desestabilizar completamente a la gente que es “planta” o falsa. El Imperio Furioso me encanta y ahora está medio como en ningún grupo.
—¿Estás sola o en pareja?
- Estoy súper sola. Entré a la casa sola, eh. Con mi último novio terminé en abril del 2023 y estoy 100% soltera.
—¿Cómo te llevás con Alan afuera de la casa? ¿Te gusta él?
-¡No, para nada! (risas). Afuera somos todos muy amigos. Y Alan es de Chivilcoy, y como yo soy de Santa Fe y no está mi familia acá, entonces lo entiendo y lo integré un poco, porque la verdad es que no está bueno estar solo acá y con tanta exposición y con tanta locura mediática. Es como un hermano más, me cae súper bien, en la casa ni hablaba con él y afuera nos hicimos muy amigos. Y no, no me gusta para nada.
—¿Tenés relación con Sabrina?
-Con Sabri hablamos y está todo más que bien afuera. Es más, ella vive en San Miguel, donde yo estoy parando, así que la busco, vamos a la gala juntas, no es mi amiga pero nos llevamos bien. Es una piba que afuera me mostró que no es lo que yo pensaba de ella adentro. Y está bueno porque afuera todos me demostraron cosas lindas, salvo estas dos personas. A Denise, por ejemplo, la considero literalmente una amiga de fierro. Yo cuando estoy mal la llamo y hablamos por horas. Lo mismo al revés. Creo que Denise es todo lo que está bien en una persona. Era aburrida adentro pero afuera es una piba de oro.
—¿Es verdad que saliste con el Cuti Romero?
-Sí, pero fue literalmente hace más de siete años, éramos los dos chicos, los dos solteros, fueron un par de meses y quedó ahí. Quedó como que yo lo conté para entrar, pero la verdad que no, me lo preguntaron en un momento y lo dije porque no tengo nada que ocultar, fue hace dos millones de años atrás y después no lo vi nunca más, nunca más hablé con él, él tiene su familia. Los futbolistas a mí siempre me gustaron, viste cuando te gusta un estereotipo de persona, por ejemplo mi exnovio, del que yo estuve muy enamorada, era rugbier, de Santa Fe. Más allá de lo que sea, futbolista, rugbier, médico, yo me enamoro de la persona sea lo que sea, no me importa la profesión que tenga. Lo que siempre dije es que si algún día me pongo de novia con un futbolista no me molestaría acompañarlo como hizo mi mamá, y está bueno acompañar a tu pareja que amás a hacer lo que a ella le guste. Yo vi que mi mamá siempre lo acompañó a mi papá (el exfutbolista Adrián El Loco Gorostidi) y creo que eso es una demostración de amor buenísima y si tengo que acompañar a un amor, sea el trabajo que sea, por amor lo haría siempre.
—¿Te gustaría seguir en el mundo del espectáculo?
- Obvio. En el hospital de Santa Fe yo era monotributista, no estaba en planta permanente así que cuando iba a entrar a Gran Hermano dije ‘me voy’, e inventé que me iba a Europa porque no sabía qué decir. Ahora están todos enloquecidos en el hospital, la sala donde yo trabajaba dice “sala de médicos”, “el nombre de la sala” y abajo ¡el logo de Gran Hermano! Me encantaría seguir trabajando en esto, me gusta mucho el panel, lo disfruto un montón. Me siento muy cómoda trabajando en la tele, voy a los programas y tengo cero nervios, me encanta la dinámica, la verdad que la paso muy bien. La otra vez una persona me tiró ‘pero hay que estudiar para eso’ y yo respondo ‘chicos, yo estudié nueve años, ¿les parece que a mí me molestaría estudiar o me daría alergia un libro?’, no, al contrario, a mí me encanta estudiar y leer de todo. Cuando me recibí de médica, en el 2015, mi cartel decía “Felicitaciones Doctora Vedette Gorostidi”, me encantaría trabajar en el teatro de revistas y ser vedette, me gusta la actuación, estudié teatro también.
—¿A quién ves ganador o ganadora de esta edición?
-Me gustaría, y veo como finalistas a Furia, a mí - si entro al repechaje- a Martín y a Agostina. A ver, eso es lo que me gustaría, por ahí lo que veo es a Furia, a mí, a Martín y quiero ver a Emma cómo se comporta esta semana porque noto que tiene mucho aguante. Si bien sigo pensando que es muy difícil convivir con Emma porque es muy falso y mentiroso, es un mentiroso gracioso, o sea, miente pero lo hace con tanta gracia que afuera parece divertido. Ahora con la salida de Joel dudo que Emma pueda llegar a ser finalista. Yo creo que la gran ganadora de este Gran Hermano - y eso que yo quiero volver y ganar - pero la gran ganadora en contenido, en personalidad, en ángel, en todo, es Furia. Ella le da la vida a la casa de Gran Hermano y la gente que dice ‘¡ay es re agresiva!’, no, Furia no es agresiva, no es violenta, es una mina que te chanta las cosas en la cara y creo que acá nadie es Heidi, ella es una mina que te dice las cosas en la cara. Por ahí se zarpa con los modos y muchas veces yo se lo dije y ella me ha dicho a mí lo mismo, pero más allá de los modos es una mina que da show todo el tiempo.