Manu Viale: “Soy muy perfil bajo, no me gusta llamar la atención”

En una entrevista con Teleshow, la actriz y conductora habla de su presente laboral en el teatro y de la adrenalina que sienta al subirse al escenario. Explica que tiene una personalidad cambiante y todo el tiempo busca nuevos desafíos para no aburrirse. Admite que prefiere resguardar su intimidad aunque provenga de una familia pública

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Manu Viale tiene 32 años
Manu Viale tiene 32 años y se ha desempeñado como actriz, modelo y conductora (Crédito: Instagram)

“No me gusta estancarme en nada, voy probando cosas diferentes”, asegura Manu Viale, quien trabaja como modelo, actriz y conductora. A los 32 años, disfruta de su presente laboral como protagonista de Wasabi: ¡Se puso picante!, la comedia dramática que realiza los martes en el Paseo La Plaza con Dan Brietman, Mechi Bove, Nacho Di Marco, Jimena Grandinetti, Daniel Pacheco y Gastón Vietto.

En el plano personal, se acaba de mudar a una nueva casa en la Provincia de Buenos Aires con sus dos perritas y su pareja, el futbolista Federico Freire. Ellos fueron amigos en la adolescencia, más tarde se enamoraron y se casaron en diciembre de 2022. Por los compromisos laborales, recién un año más tarde se fueron de luna de miel a México y los Estados Unidos.

Dueña de un perfil bajísimo, Manu explica que siempre intenta resguardar su vida privada. “No hay que mostrarlo todo y hay cosas que se pueden mantener en la intimidad”, señala la actriz y admite que no le gustan los escándalos, las peleas, ni ser mediática. Pero entiende cómo son las reglas del juego al tener una familia pública y ser la hermana de Juanita y Nacho Viale, por parte de su padre, Ignacio Viale del Carril.

Manu Viale protagoniza "Wasabi: ¡Se
Manu Viale protagoniza "Wasabi: ¡Se puso picante!", una comedia dramática dirigida por Diego Ramos que se presenta los martes a las 21 en el Paseo La Plaza (Crédito: Agencia AB)

—¿Qué es lo más interesante de la obra Wasabi y de tu personaje?

—La historia es sobre un grupo de amigos, son problemáticas que pasan a diario entre ellos cuando se reúnen en el cumpleaños de Willy. Interpreto a Carolina, un personaje muy estructurado, correcto. A medida que van realizando un juego, se van sacando las capas. Suele haber microviolencias en los grupos de amigos que uno permite y no se da cuenta, que también pasan en la obra. Pero con estas preguntas y respuestas que suceden, los personajes empiezan a mostrar el detrás o las capas, como les digo yo, y empiezan a explotar de a poquito.

—¿El público cómo reacciona?

—Es una comida dramática, entonces el público pasa por todos los estados, de la risa a la emoción, de la emoción a la risa. Eso está buenísimo, porque las personas reaccionan y escucho que dicen: “¡No!, ¡uh!”. Si les genera eso es porque les llegó el mensaje que estamos tratando de transmitir.

—¿Cómo te sentís cada vez que te subís al escenario?

—A mí me encanta, me genera adrenalina, creo que el día que no sienta nervios debería replantearme si quiero seguir actuando. Siempre que me subo al escenario siento los mismos nervios, la misma adrenalina, la misma incertidumbre. Quiero que funcione, que salga bien, más allá de cualquier problema que puede suceder en el escenario, como tener un furcio. Alguna cosita siempre pasa en el teatro.

Manu Viale descubrió la actuación
Manu Viale descubrió la actuación casi de casualidad, cuando hizo un casting porque estaba aburrida (Crédito: Instagram)

—En tu carrera trabajaste como modelo, actriz y conductora. También leí en varias notas que estudiaste para ser maestra jardinera.

—A los 18 años, trabajé en el jardín de infantes al que había ido, pero nunca arranqué la carrera de maestra jardinera. No sé quién lo puso, lo implantaron... Iba a estudiar para ser ayudante de maestra jardinera hasta que me salió un casting y decidí pegar un volantazo en mi vida.

—¿Sentías curiosidad de ser actriz, tenías ganas de trabajar en este oficio?

—No, la verdad que no. Hice el casting porque estaba aburrida y quería ver de qué se trataba. Tuve que pegar un volantazo ahí y replantearme qué quería, pero no, las ganas de actuar no estuvieron siempre.

—Que loco cómo se dieron las cosas. ¿Ahora sentís que la actuación es tu principal actividad?

—Sí, pero no me estanco nunca en una sola cosa, encima soy muy cambiante. Me aburro y voy siempre de un lado para el otro. Por eso me gusta también haber encontrado la faceta de conductora, que me gusta y me atrae. No me gusta estancarme en nada, voy probando cosas diferentes, voy mechando conducir, actuar, cambio todo el tiempo para no aburrirme.

—Conducir también es parecido a actuar.

—Sí, obvio, pero es otra faceta, sos vos. En la actuación, hacés un personaje, no sos vos. Sí implica todo lo que sería ser artista, es una mezcla de cosas. La conducción está muy relacionada al mundo del arte.

—¿Cómo viviste la experiencia de conducir en streaming el ciclo Red Flag en Luzu TV?

—La verdad que re bien, pero ya venía de hacer Fans en vivo con Lizardo (Ponce) durante cuatro años. En ese momento no estaba tan de moda el streaming. Entonces, cuando arranqué como conductora en Luzu TV estuvo buenísimo y lo disfruté.

—¿Qué otras cosas te gustaría hacer?

—Me gustaría hacer cine, hacer alguna película o serie para una plataforma e ir cambiando, hacer diferentes cosas. A mí el teatro me encanta porque tiene una vivencia de la adrenalina del momento que no tiene otra cosa. Estás con el público, si te equivocás, tenés que resolver porque no se puede cortar y volver a arrancar. Si te olvidaste la letra, él otro te cubre. Y así jugás con la adrenalina y es un poco adictivo.

Manu Viale y el futbolista
Manu Viale y el futbolista Federico Freire se casaron el diciembre de 2022

—¿Tenés otros proyectos para este año?

—A fines de febrero se termina la temporada de Wasabi, que ya la veníamos haciendo durante el año pasado en octubre, noviembre. Por ahora estoy tranqui. Tengo un par de cositas ahí, pero todavía no puedo decir absolutamente nada en concreto. Recién arrancamos el año y no hay que desesperarse tampoco. El año pasado fue caótico, no paré un segundo, no tuve un minuto de descanso. Hice dos obras al mismo tiempo, más Luzu TV. Uno no sabe parar la pelota y descansar. Nunca hay tiempo para descansar. Entonces también hay que aprovechar y entender que los momentos de estancamiento, como nosotros lo llamamos, es tiempo de descansar un poco, porque después volvés a no parar de nuevo.

—Estuviste de vacaciones en Miramar hace poquito, subiste imágenes en Instagram.

—Sí, me fui a Miramar, donde voy todos los años porque con mi familia veraneamos ahí siempre. Me pude desconectar, estuvo re lindo, lo disfrutamos. En diciembre, me fui de luna de miel un año después (de la boda), antes no había podido por laburo. Nos fuimos 15 días a México y a los Estados Unidos. Fue un viaje divino y la pasamos bomba.

—¿Fue lindo tu casamiento con Federico Freire? En las fotos vi que tu hermana Juanita Viale ofició la ceremonia. Parecía todo como sacado de una película romántica.

—Totalmente, fue una ceremonia súper emotiva, era lo que yo quería.

Manuela Viale disfrutó de unas
Manuela Viale disfrutó de unas vacaciones en Miramar durante el verano. En diciembre, viajó de luna de miel con su esposo a México y los Estados Unidos (Crédito: Instagram)

—Siempre tuviste un perfil bajo, ¿cómo manejás la fama y la exposición?

—Re tranquilo, soy muy perfil bajo, no me gusta llamar la atención. Lo que sale, sale. Lo que puedo mantener en privacidad, lo mantengo. Trato de cuidarme, de cuidar a mi marido, a todos. Somos una familia pública, pero trato de mantener las cosas en privado que quiero. No hay que mostrarlo todo y hay cosas que se pueden mantener en la intimidad.

—¿Cómo hacés para marcar los límites?

—No tengo que hacer nada, no me persiguen ni nada por el estilo, no tengo que poner ningún límite. Soy re tranquila y lo manejo con mucha calma. Soy cero mediática. Mis hermanos (Nacho y Juanita) no son mediáticos y sin embargo los buscan. Yo no tengo nada divertido para mostrarles, algo que llame la atención. Entonces no me vienen a buscar, porque no hay nada divertido ni que les pueda servir.

—Claro, no estás en la mira.

—No estoy metida en ningún quilombo. No me gustan los quilombos, hablar mal de la gente, no me gusta que hablen mal de mí. Eso no llama la atención y no garpa. En cambio, mis hermanos nacieron en una familia muy mediática y muy conocida, entonces solo por ser quienes son, los vuelven locos. Pero nacieron con eso, pobrecitos.

—En las redes vi que compartías muchas imágenes de tus dos perritas.

—Sí, ellos son parte de mi vida, de mi familia. Son una extensión de mi cuerpo.

—¿Sos proteccionista, te gusta ayudar a los animales?

—Si, todo el tiempo. Desde hace mucho trato de ayudar a quienes no tienen voz, en este caso, los animales. Me gusta cuidarlos y luchar por sus derechos, hacer que se los escuche, que su vida valga, que no sean tratados como un objeto.

—Creo que ahora hay más conciencia sobre el tema, como cuando hacen campañas para que no tiren pirotecnia.

—Más o menos, este año la pasé muy mal con mis perros. Hay más conciencia que antes, pero falta un montón. Deberían dejar de vender pirotecnia, ahí empezarían a cambiar las cosas. Cuando la gente deje de comprar y entienda que no solo los animales la pasan mal, también los chicos con autismo les hace pésimo. La gente no termina de entender del todo el sufrimiento que les causa. Los animales escuchan mucho más que nosotros. Sufren mucho, tengo dos perritos, uno la pasa muy mal. También cuido a los perros de mi hermana y la pasaron mal. En las fiestas te terminás quedando encerrado con ellos en la cocina, poniéndole música cuando son las doce y deberías estar festejando. Así termino siempre.

Manu Viale posa con una
Manu Viale posa con una de sus perritas. Es amante de los animales y siempre busca la manera de ayudarlos (Crédito: Instagram)

—¿Cómo ves al país en este momento?

—No, políticamente no voy a hablar, no me interesa, en algún momento vamos a salir adelante, estamos acostumbrados a vivir con crisis. Vamos a salir adelante.

—¿Tenes algún hobby o actividad que hacés en tus tiempos libres?

—Me gusta hacer rompecabezas, hacer cerámica, cosas que calmen mi ansiedad. Salir a entrenar, arranque Pilates hace un mes y estoy re contenta por ahora, vamos a ver cuánto me dura. Siempre entrené funcional y ahora encontré algo diferente, me llama la atención, así que por ahora estoy entusiasmada. Pilates es poner la conciencia sobre tu cuerpo, en cada ejercicio, tenér más cuidado del cuerpo. En un entrenamiento normal, por ahí te podés lastimar. A veces salgo a correr, porque estoy re loca, cruzada y necesito salir a despejar mi mente. Pero otras veces tengo ganas de quedarme en mi casa, sin hacer nada.

—A los 32 años, ¿te queda algún sueño o meta para cumplir?

—Voy creando, investigando, voy probando y después no me gusta más. Soy muy inquieta, entonces los sueños los voy construyendo a medida que pasa el tiempo. Ahora quiero disfrutar que me mudé, que tengo más espacio, que tengo un jardín y que las perras están bien. Iré construyendo mi camino y mis sueños a medida que pasa el tiempo y voy creciendo. Creo que vamos cambiando, nuestros 32 años no son los mismos que los de nuestros padres y vamos cambiando cosas. Un día querés una cosa y al otro día no lo querés más, eso está bien. Hoy nos gusta esto, hay que vivir el presente, capaz que mañana no nos guste más y no por eso estamos locos, o hay que replantearse la vida. Hay que vivir el presente que querés hoy, mañana vemos.

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