“Yo nunca me quedo quieta”, asegura Carolina Papaleo antes de relatar sus idas y vueltas del último mes. En esta entrevista con Teleshow, la actriz habla de sus vacaciones truncadas a Nueva York y cómo obtuvo un plan b en un abrir y cerrar de ojos.
Luego de un intenso 2023 en el que tuvo muchos proyectos laborales y durante el cual también se recibió de Licenciada en Ciencias Políticas, la conductora planeó pasar las Fiestas junto a su hijo Matías en la Gran Manzana. Pero un olvido pospuso dicho viaje: es que tanto su visa como la del joven de 25 años se vencieron y cuando hicieron el trámite, los tiempos ya no daban. Así las cosas, debió dejar los pasajes abiertos -tiene tiempo hasta octubre- y esperar a que le salgan los papeles para poder ingresar a los Estados Unidos.
Mientras tanto, debió buscar otro destino para disfrutar de sus vacaciones. Sin embargo, sabía que serían sin su hijo, quien al haberse truncado el viaje a Nueva York decidió quedarse en Buenos Aires para adelantar sus proyectos musicales -es compositor y está por estrenar sus temas-. “Además, no es un pibe de playa, a él le gusta la ciudad”, explica Carolina, quien le había propuesto ir Brasil o Uruguay. “No había sustitución porque no es fácil, él quería pasarlo allá, como en las películas”.
De esta manera, la conductora pasó Nochebuena con su hijo y amigos en Buenos Aires, e hizo las valijas para recibir el 2024 en Punta del Este junto a su padre Osvaldo, su tía Lidia y su sobrino Franco. Estuvo allí durante casi 20 días y regresó el pasado 19 de enero, cuando cumplió 55 años. “Pasé la mitad de mi cumple allá y la otra mitad acá”, dice ya desde su casa.
Sobre sus días en Punta del Este, Carolina los recuerda con mucha emoción y adrenalina. Hubo tiempo para disfrutar de largas conversaciones en familia. Es que si bien no estaban hospedados en el mismo lugar, hacían todo juntos: tanto las comidas, como las visitas a la playa y hasta los deportes acuáticos.
“El día que íbamos a ir a andar en moto de agua el mar estaba picado, ¡pero yo me quería sacar las ganas! así que fuimos cuando se pudo”, cuenta quien lo hizo acompañada por Franco, quien al principio se había mostrado reticente pero luego se animó y disfrutó en el mar junto a su tía. Por caso, fue él quien terminó manejando el jet ski.
Entre tantos días de playa, mar y sol, a Carolina le cambió el color de pelo. Tanto que sus seguidores en sus redes sociales pensaron que había renovado su look durante sus vacaciones. “Me hice un progresivo”, explicó al respecto quien compartió una tarde de peluquería con su tía.
Su intención era regresar el jueves 18 para descansar y desempacar durante el viernes 19 y el sábado 20 de enero retomar la conducción de Vivo para vos, junto a Julián Weich por la pantalla de El Nueve. “Pero en el medio de las vacaciones me enteré que el programa no seguía. Se podía remontar, vine ilusionada, pero se cerró la posibilidad”, dijo sobre el ciclo que comenzó durante la pandemia del coronavirus y se convirtió en un clásico de las noches de fin de semana.
¿Como sigue entonces su 2024? La actriz comenzó los ensayos para el reestreno de Yo adivino el parpadeo, junto a Rubén Stella: la obra comienza el próximo 7 de febrero y levantará el telón los miércoles y jueves a las 22 horas en el Teatro Buenos Aires. También regresó a la televisión acompañando a su padre todas las noches en Extra TV. “Estoy entretenida con eso”, asegura la conductora.
“Todavía no pude decidir qué hacer. Tenía planificado el año de una manera y con todo esto que pasó ahora me estoy acomodando”, se sincera quien también se tomó unos días para analizar frente al mar sobre la proyección que le daría a la licenciatura en Ciencias Políticas. “Me quemé seis años las pestañas para algo. No pude pensar mucho allá porque cambió todo el panorama, pero quería ver para dónde iba a capitalizar mi carrera”, explica.
“Ya estoy viendo. Y de acá nomás vamos a arrancar. Yo arranco seguro”, se muestra confiada y repite Carolina Papaleo sobre los proyectos que la mantendrán ocupada durante el 2024 tanto en lo profesional como en lo personal, esperando que le salgan los papeles necesarios para poder viajar a Nueva York junto a su hijo antes de perder los pasajes en octubre. “Eso fue un poco una frustración, estaba más ilusionada por él que por mí”, remarca sobre las vacaciones pendientes con el joven de 25 años y que espera concretar antes de la fecha mencionada.