Sabrina Cortez entró al confesionario de Gran Hermano a hablar sobre su relación con Alan Simone, luego de haber dado el consentimiento y de pasar la noche juntos. Lo hizo el día en que cumplió ocho años de novia con Brian Fernández, quien la espera afuera de la casa más famosa del país y quien los últimos días fue señalado justamente por la actitud de la participante en el reality.
Si bien ella describe como una amistad la relación con su compañero de certamen, entiende que su accionar puede afectarle a su novio, que ve todo a través de las cámaras y, lógicamente, no tiene la posibilidad de hablar con ella. “Hoy cumplo ocho años con mi novio. Brian es una persona que tiene ansiedad y un poco de depresión. Entonces, realmente no sé cómo le puede estar afectando esto”, se sinceró la contadora mendocina que se dedica al modelaje y a generar contenido en sus redes sociales.
Además, reflexionó sobre su relación con Alan Simone. “A veces hay cosas que son inmanejables acá y que calculo que afuera se deben ver mal porque decís ‘¿con qué necesidad tenés que estar todo el día pegada a Alan? ¿Qué necesidad tenés de abrazarte? ¿De jugar a los que juegos que jugás?’. Pero real que acá adentro la vida se vive distinta. No te pasa lo que te pasa afuera”, consideró la joven buscando hacerle llegar el mensaje a su novio, quien desde que emitieron las imágenes de su novia debajo de las sábanas con el oriundo de Chivilcoy decidió llamarse a silencio y dejó de expresarse en sus redes sociales.
“Quiero pasarla bien y quiero disfrutarlo”, agregó sobre su estadía. “Ayer nos propusieron lo del baile y dije ‘no, pobre Brian. Hoy cumplimos ocho años y yo bailando el vals con Alan, que todos nos shippean, que todos nos joden’. ¿Está bueno o no está bueno para Brian? La verdad no lo sé, pero también es parte de lo que yo vine a hacer acá”, continuó Sabrina con la intención también de dejar en claro cuál es su juego en el reality cuyo ganador obtendrá la suma de 50 millones de pesos.
Por su parte, contó que piensa mucho en Brian Fernández, en cómo estará atravesando la situación desde afuera. “Sí, obviamente cuando me voy a acostar y me pongo a pensar que obviamente la puede estar pasando mal, me pone mal. Pero bueno...”.
Y aprovechó las cámaras del confesionario para enviarle un saludo por su octavo aniversario. “Bra, te mando un saludo enorme. Te amo, espero que estés bien. Es lo que más me importa. Te amo y gracias por estos ocho años”.
La historia de Sabrina y Alan dentro de Gran Hermano
El lunes por la noche, en la gala del programa que conduce Santiago del Moro por la pantalla de Telefe, emitieron un video que titularon: “Amigos con derechos: noche movidita en Gran Hermano”. Allí, se los vio a Alan y Sabrina acostados en la misma cama cuando comenzaron a notarse movimientos debajo de las sábanas, lo que motivó a Gran Hermano a pedirles que dieran su aval: “Sabrina, Alan. Atención, por favor: recuerden dar el consentimiento a cámara”.
Si bien en una primera instancia, Sabrina se mostró indiferente e hizo un gesto de pregunta ante tal comentario, luego ambos levantaron sus pulgares. Al día siguiente, se mostraron arrepentidos por lo que habían hecho. “Me siento mal. No por mí. ¿Vos? ¿Por qué?”, le dijo Alan a la participante. “Sí, por lo mismo que vos”, respondió ella.
“¿Y ahora?”, preguntó él. “Ya está...”, enfatizó Cortez. “¿Te sentís mal?”, quiso saber el joven oriundo de Chivilcoy, que buscó calmarla: “Bueno, quedate tranquila que no pasa nada”. “No es por mí”, remarcó ella y dio por finalizada la charla.
Previamente, Sabrina había hablado en el confesionario del vínculo con Alan ratificando su relación con su pareja. “Es una amistad donde nos entendemos con la mirada, con todo. No va a pasar más de eso. Yo tengo novio. En unos días cumplo ocho años y estoy segura de lo que tengo afuera y de lo que quiero también”, aclaró por ese entonces.