La organización del Festival Internacional de Viña del Mar confirmó el show de Peso Pluma agendado para el próximo 1 de marzo y dijo que “no incurrirá en ningún tipo de censura ni discriminación”, luego de que distintos sectores de la sociedad pidieran cancelar su concierto por ser un “promotor de la narcocultura”.
Todo comenzó luego de que el sociólogo Alberto Mayol publicara una columna en el diario Bio Bio oponiéndose a la presentación del ícono de los corridos tumbados. “Allí estará, el artista, el que hace apología del narcotráfico, el que (se asume en México) ha trabajado para narcotraficantes, que los nombra sin escrúpulos en sus canciones, que habla sistemáticamente de armas y del uso de ellas, el que habla de cuánto valen las mujeres con pequeñas cinturas, el reivindicador de los grandes nombres del narco histórico”, escribió Mayol en un tramo de la publicación y levantó polvareda, dado que no fueron pocos los que le dieron la razón y en las redes sociales le pidieron al festival que cancelara la presentación del creador de temas como “Lady Gaga” y “Bye”.
Sin embargo, la producción del festival emitió un comunicado en el que confirma la presentación de Peso Pluma tal como estaba programada. “Tras la polémica generada en referencia a la participación de Peso Pluma en la próxima edición del certamen, la organización del Festival Internacional de Viña del Mar, afirma que no incurrirá en ningún tipo de censura ni discriminación. El Festival Latino más grande del mundo celebra la diversidad de todos los artistas que pisan este destacado escenario. La música es universal y describe diferentes realidades”, dicen.
“Viña del Mar también reconoce el fenómeno de los nuevos géneros musicales y espera un exitoso cierre de seis noches donde la música y el talento de los diferentes artistas seguirán siendo el pilar del festival latino más grande del mundo”, cierra el comunicado en el que también se destacaron las cucardas de Peso Pluma, como fenómeno musical de la actualidad global.
En la opinión que levantó polvareda, el sociólogo Mayol cuestionó también a la Televisión Nacional de Chile (TVN), que organiza y retransmite el festival junto a Canal 13 y la Municipalidad de Viña del Mar, y dijo que el show “ocurrirá con el alto patrocinio de la República de Chile”.
Tras la columna, el concejal villamarino René Lues envió una carta a la alcaldesa de la localidad costera, Macarena Ripamonti, pidiendo la suspensión del show previsto para el cierre del certamen, uno de los principales y más longevos escenarios de la música latinoamericana y cuya primera edición tuvo lugar en 1960. Pese a esto, la producción no dio lugar a las quejas y reconfirmó lo que estaba previsto.
Tras la irrupción global del hit “Ella baila sola”, interpretado por Eslabón Armado y Peso Pluma, de la noche a la mañana, el mundo comenzó a hablar de eso que se llama “corridos tumbados”: una variante de la música folclórica mexicana que las nuevas generaciones de artistas del país del norte aggiornaron tomando elementos del storytelling y el fronteo del trap y el reggaetón. En poco tiempo, Hassan Emilio Kabande Laija, el nombre detrás de Peso Pluma, se convirtió en el ícono de esta avanzada. Nacido en Guadalajara y con sangre libanesa, sus letras generaron gran polémica en su país natal por inscribirse en la tradición de los narcocorridos por encargo y las supuestas conexiones con el Cártel de Sinaloa.
En ellas hay abundantes referencias al camelleo y la vida pandillera (“El belicón”), a la venta y al consumo de tusi (”Rosa pastel”), a la nostalgia de los amores tóxicos que quedaron en el camino (“Lagunas”, “Bye”), el recuerdo a su papá fallecido (“Nueva vida”), la vindicación al migrante chicano en Estados Unidos (algo propio de su biografía, ya que nació en México pero creció en San Antonio, Texas) y también a los líderes revolucionarios, como “Zapata”.