Florencia Díaz, la actual novia de Federico Bal, le dio este miércoles una entrevista a Carmen Barbieri y reveló en público intimidades de su historia de amor con el actor, a la vez en que dio muchos detalles de su vida sexual.
La bailarina habló largo y tendido en el aire de Mañanísima (El Trece) a través de videollamada y contó que, si bien vive en la Ciudad de México y viaja permanentemente por su trabajo, ahora está de visita en Buenos Aires y se va a Mar del Plata para visitar a Fede, quien está haciendo temporada de teatro.
En diálogo con su suegra, Díaz recordó que su primer contacto con su novio fue a través de mensajes de WhatsApp y videollamadas pese a que lo conocía del Bailando. Pero un buen día y tras dos meses de coqueteo intenso, decidieron coincidir y el flechazo entre los dos fue inmediato. “He viajado mucho y he pasado por relaciones anteriores pero esta es la primera que nace a distancia. Es un desafío, un cambio, y quizás otra manera de plantear la relación, de acompañarnos desde otro lugar”, caracterizó Flor. “Cuando uno está lejos extraña un montón y lo que quiere lo hace con otra convicción, eso es fortalecer vínculos desde otros lugares”, agregó a continuación acerca de la dinámica del romance.
Sin embargo, contó que el reencuentro con Fede suele ser intenso. “Cada vez que nos vemos estamos como garrapatas. Dormimos juntos, obvio”, dijo la también actriz y figura en distintas obras como Cabaret y Siddharta. “Cuando se arranca una relación hay muchas ganas de contacto físico, de oler a la otra persona, de estar juntos… ¿Cómo hacen para estar a la distancia? Sabemos que Fede es tremendo y me contaron que vos también. ¿Cómo hacen para calmar esas ganas?”, le planteó por su parte la panelista Majo Martino. En ese punto, intervino Estefi Berardi, quien además de trabajar con Carmen fue vinculada sentimentalmente a Bal el verano pasado, cuando estalló el “chatgate”. “¿Vos lo que querés saber es si tienen sexo virtual?”, preguntó Berardi.
“Sí, sí, sí, obviamente hay mucho sexo virtual. Mucha foto, video, mucho mensajito de ‘te extraño’, videollamada… Cosas así”, detalló Flor. “Un poco de todo”, la interrumpió Martino. “A mí me gusta el sexo virtual. Ya soy grande, así que no me gusta el contacto físico ni que me anden tocando mucho”, acotó Carmen Barbieri.
Así las cosas, Díaz también opinó de la fama de mujeriego que tiene su novio y aseguró que ella no es una persona “prejuiciosa”. “Pueden decir tantas cosas pero prefiero vivirlo por mi propia cuenta...”, cerró Flor.
A fines de diciembre pasado, el propio Fede había hablado de su relación con Díaz en el programa de Mirtha Legrand. “¿Ahora tenés novia, estas en pareja?”, le preguntó la conductora. Ante la pregunta, el mediático respondió: “Es muy talentosa, un amor de mujer”. Mientras Bal empezaba a presentar a su pareja, Fernando Dente, otro de los invitados, lo interrumpió: “Contale dónde vive”. Es que la pregunta, incisiva, era la clave de la relación.
Ante este detalle, el invitado a la mesa continuó: “Vive lejos, Mirtha, es una relación a distancia, está en México en este momento. Tal vez la gente piensa ‘cómo hago con esta relación’, pero el amor me sale naturalmente. Ella es argentina, vive en México por mucho de lo que nos pasa a nosotros los argentinos, busca una vida mejor, conecta con la política. No hay nada que más quiera que ella pueda vivir acá y ganar lo que merece y que pueda tener su trabajo como bailarina, sus clases que da poder hacerlo acá pero muchas veces es bastante imposible y se complica”.
“La admiro mucho, la conocí viajando por Resto del Mundo, ella vive en México, empezamos a habar a mitad de año mas o menos, estaba cerca yo, yendo a Panamá. Al principio me parecía que iba a ser difícil y hoy es como lo mas fácil del mundo. Porque mucha gente dice ‘pero bueno tienen una relación abierta’, no, la verdad no tenemos una relación abierta, yo no dije eso ni ella tampoco. Estamos viviendo una relación súper cerrada, yo estoy solo con ella y me sale orgánicamente, ojalá que la vida nos junte siempre. Yo estoy muy feliz con ella”, agregó Bal.