Muchas celebridades eligen Punta del Este para pasar sus vacaciones y relajarse. Verónica Lozano, su esposo Corcho Rodríguez y su hija Antonia eligieron pasar las fiestas en Uruguay y aprovecharon para recibir el año y descansar por unos días, lejos de Buenos Aires.
La conductora de Cortá por Lozano (Telefe) compartió con sus seguidores de Instagram algunas postales de su estadía en el país vecino. “Carretito”, escribió en el posteo en el que mostró los mejores recuerdos de esta escapada que llevó a cabo con sus seres queridos para recuperar energías y renovarse.
En esta oportunidad, Verónica aprovechó para leer libros, disfrutar de las playas y reunirse con amigos. Además, en todo momento estuvo acompañada por Copito, su perrito incondicional que está con ella siempre, ya sea en sus vacaciones o cuando está trabajando.
En las diferentes postales que compartió en su feed de Instagram se la puede ver tomando sol, posando junto a su marido y divirtiéndose con amigos. Además compartió de diferentes situaciones, objetos y momentos de placer, como flores, un vino o un plato con medialunas.
Pero las obligaciones y la rutina llama, así que tras disfrutar de unas hermosas vacaciones en Punta del Este, Lozano y su familia regresaron a la ciudad de Buenos Aires. De esta manera, la conductora regresó a la pantalla de Telefe para estar al frente de su clásico programa que se emite por las tardes. “De vuelta al trabajo cargada de energía y amor”, escribió en sus redes sociales.
Cabe recordar que Verónica había sufrido un terrible accidente mientras se encontraba de vacaciones en la ciudad de Aspen, en los Estados Unidos. La presentadora recordó este episodio en su visita a Soñé que volaba, el ciclo que Migue Granados conduce en Olga. En esta oportunidad, contó con lujo de detalles el momento que cayó desde una aerosilla en las montañas de Aspen, Colorado a principios de 2022, que la obligó a prácticamente, aprender a caminar otra vez.
“Yo estaba así, agarrada de la cosa y las patas colgando”, dijo Lozano, mientras mostraba con un silla en el estudio del programa cómo se aferraba a la aerosilla, con las piernas colgando en el aire, cuando intentaba ajustar su posición para mantenerse cómoda. Su relato trajo a la mente la angustiante escena, detallando cómo permaneció colgada durante un tiempo, sostenida únicamente por sus manos y aguantando el fuerte viento. “Estaba colgada, y el ruidito del viento que hacía...”, explicó.
En medio de la entrevista, recreó el angustiante momento. “La gente gritaba ‘Oh my god’”, rememoró mientras describía su posición en la silla antes del trágico incidente. “En un momento abrí la mano yo, no aguantaba más. Nadie podía agarrarme”, relató sobre el momento que decidió dejarse caer.
Luego de caer de siete metros de altura, Lozano sufrió la fractura de ambos tobillos, y a los pocos días fue operada en Colorado. De vuelta en Buenos Aires, empezó la rehabilitación, primero con las botas ortopédicas, luego con vendaje y finalmente después de que le sacaran los puntos pudo volver a usar zapatillas, aunque siempre sin hacer fuerza de apoyo. “Paciencia, alegría, gratitud, amor”, fueron las cuatro palabras con las que describió sus sentimientos al ver cómo estaban sanando sus pies a lo largo de este último tiempo. A los pocos días volvió a trabajar y de a poco fue recuperando la cotidianeidad.
El 15 de mayo del 20222, Vero recibió el segundo Martín Fierro de su colección y dio uno de los discursos más emotivos de la gala. “Estoy re contenta”, alcanzó a decir entre lágrimas. “Han sido mi cielo”, les agradeció a sus compañeros, con la respiración agitada por la emoción. Y se refirió al accidente que casi le cuesta la vida. “Cuando me caí vi el cielo. Y dije, ‘hay vida’”, señaló con gratitud.
“El laburo dignifica sobre todo en una situación compleja”, continuó conmovida antes de enumerar sus compañeros actuales y pasados a quienes hizo partícipe del premio. “Hacen que hagamos un programa hermoso todos los putos días de nuestras vidas. Gracias APTRA y gracias a todos por vernos todos los días desde casa”, cerró con el brazo en alto, el premio en la mano y la felicidad de estar viva.