La triple sanción de Gran Hermano a Nicolás: la regla que rompió y lo puso en riesgo

En la reciente gala de nominaciones de Gran Hermano se vivió un momento de tensión y seriedad cuando la autoritad del show, conocida como Big, inició el evento con una firme reprimenda que en una primera instancia dejó a todos los participantes absortos, sin tomar dimensión de lo que realmente estaba ocurriendo.

Es que no es la primera vez en esta edición del ciclo que se incumplen reglas. Este nuevo llamado ocurre apenas una semana después de una significativa penalización impuesta a otros participantes: Martín Ku -quien como líder, había hablado con sus compañeros en momento de las nominaciones-, Furia y Williams -por sus constantes peleas y agresiones-, este último resultando eliminado por el voto del público el último lunes.

En este panorama, al comienzo de la gala los 19 concursantes fueron convocados por Gran Hermano en el salón principal, donde se les recordó enfáticamente la prohibición de quitarse los micrófonos. Además, se les reiteró la regla que impide susurrar en secreto a otro participante, con el objetivo de que sus conversaciones no sean escuchadas ni por Big ni por sus compañeros. En este contexto, la producción del programa señaló específicamente a Nicolás como el infractor de ambas reglas.

“Quiero decirles que observé una gran y grave transgresión al reglamento. Como todos saben, hay tres instancias en la que tienen autorizado sacarse los micrófonos: a la hora del descanso, cuando se están duchando y en el interior de la pileta. En cualquier otra circunstancia el uso del micrófono es obligatorio. Así mismo, también está prohibido susurrar al oído de otra persona con el fin de que aquello que se pronuncie no pueda ser escuchado por otro compañero o por mí. Estas son normas estrictas del reglamento que recientemente un integrante de la casa ha incumplido. Me refiero a Nicolás”, destacó la voz, mientras todos en el sillón escuchaban atentos.

Así, Gran Hermano, dirigiéndose directamente al participante, le reprochó haber compartido secretos con un compañero en dos ocasiones distintas. Como consecuencia de esta desobediencia, se le anunció que recibiría una sanción: “En dos oportunidades, una sin micrófono y otra con el micrófono colgado, Nicolás le dijo algo en secreto a un compañero hablándole al oído”.

La voz de Gran Hermano, con autoridad, le comunicó que, a partir de ese momento, estaba oficialmente nominado para la eliminación. Las cámaras captaron la reacción del participante, quien, impasible, asintió con la cabeza al escuchar la noticia.

Además de la nominación, se le informó a Nicolás que perdería el derecho a votar en la gala de esa noche y que tampoco sería elegible para ser salvado por el líder del grupo. Esta decisión lo colocó en una posición vulnerable, ya que su permanencia en el programa dependerá de la decisión del público, que se revelará el próximo domingo.

Cabe destacar que Nicolás Grosman, quien se desempeña como coach en su vida cotidiana, había expresado anteriormente su disposición a emplear cualquier táctica, incluyendo la mentira y la actuación, para asegurar su victoria en el concurso. Estas declaraciones añaden un matiz interesante a la situación actual, en la que se ve enfrentado a una posible eliminación debido a su incumplimiento de las reglas del juego.

Tras el anuncio de la sanción los demás participantes comenzaron a hablarse entre ellos y advertirse de que no olviden colocar sus micrófonos, para evitar una situación similar. Así, mientras algunos comenzaron a bromear sobre el tema con supuestas faltas por parte de otros de los integrantes de la casa, un grupo prefirió mantener el silencio en una situación incómoda, sin terminar de procesar lo que estaba ocurriendo.