Con la casa de Gran Hermano cada vez más dividida, los participantes del reality vivieron una semana cargada de cruces, polémicas, cachetazos e insultos. Con ese clima, los hermanitos llegaron a una nueva noche de definición. Por primera vez, la placa estaba conformada por siete participantes, siendo esta la más extensa de toda la edición. Así Furia, Williams, Florencia, Carla, Sabrina, Lisandro y Catalina, esperaban con muchos nervios la etapa de definición.
Desde temprano, Santiago del Moro apareció en la televisión del living de la casa para calmar a los jugadores y comunicarles, uno a uno, quién sería el nuevo eliminado del certamen. Previo a conocer el resultado, cada uno de los chicos fue comunicando lo que sentía y lo que le generaba estar en esa situación. Y si bien muchos transmitieron tranquilidad, otros se mostraron muy nerviosos, como el caso de Williams.
El Paisa, quien se encontraba en placa por su altercado al comienzo de la semana con Juliana -tras un pequeño cachetazo de la doble de riesgo, el correntino reaccionó de una forma violenta y desmedida, lo que le causó una sanción- comentó su ansiedad y hasta pidió ser atendido por un grupo de médicos. Esto generó que se retirara de la casa, por lo que estuvo ausente en gran parte de la gala. En su primera nominación, cuando Sabrina lo había colocado en ese lugar, el joven también se mostró muy nervioso.
A lo largo de la noche, Santiago del Moro se puso en contacto con los participantes para comentarles la decisión del público. De esta manera, uno a uno, el aire y la sensación de alivio volvió al cuerpo de muchos hermanitos. La primera en ser salvada fue Carla, con el 2,6% de los votos. Después le siguió Florencia, con el 5,21% de los sufragios. La diseñadora y productora de moda había quedado en esta situación tras la sanción a Juliana, es que al no poder votar a Furia la mayoría de participantes puso el ojo en ella por no pertenecer a ninguno de los dos grupos, lo que se entendía como una persona falsa.
Actualmente, la casa se encuentra dividido en dos grupos. Por un lado, los que acompañan a Martín Ku, quien fue líder durante las últimas dos semanas, y los que se agrupan detrás de la figura de Furia. A lo largo de los días, el enfrentamiento entre estos dos equipos marcó el termómetro de la casa. Los integrantes de cada banda muchas veces se enfrentan, como por ejemplo la discusión que se viralizó entre Sabrina y Catalina, en la cual ambas chicas se dijeron de todo, hasta insultos.
Con menos jugadores en placa, el conductor de Gran Hermano volvió a aparecer en pantalla para comunicar al siguiente salvado. Con suspenso, la figura de la televisión tomó el sobre, vio el nombre y dijo: “Catalina”. La médica fue premiada por la gente, para continuar una semana más en el certamen, con el 5,8% de los votos.
Con la tensión en aumento, y sin la presencia de Williams que estaba siendo atendido, el juego siguió. El siguiente jugador salvado fue Sabrina, la influencer que ganó la primera prueba de líder y que en numerosas ocasiones confrontó con Furia. La joven salió de la placa con el 8,3% de los sufragios.
De esta manera, con solo tres participantes en placa, la noche entró en su etapa de definición. La tensión se sentía y se reflejaba en los nominados, quienes, por orden de Santiago del Moro, debían esperar el resultado de pie, con su valija en mano. A esta altura, Williams ya logró sentir mejor y se unió a sus compañeros para escuchar la voluntad del público. “Ahora mejor Santi, en el momento ese la pasé mal, me faltaba el aire, me dolía el pecho. Los doctores me dijeron que son ansiedad y nervios”, respondió ante la consulta del conductor.
Con la música en aumento, y con todos expectantes, Santiago del Moro tomó el sobre final y reveló que el nuevo jugador en abandonar la casa era Williams. Al conocer la noticia la casa se mantuvo en silencio y muchos participantes corrieron a consolar al joven, quien no paraba de llorar. El resultado final mostró que el Paisa fue el más votado con 41,3%, le siguieron Lisandro con el 21,4% y Furia con 37,3%.