En Italia no dejan de hablar de ella. El poder de resiliencia de Wanda Nara sorprende más allá de las fronteras, y con este presente en el Ballando con le stelle demostró con creces todo lo que aún la empresaria tiene para demostrar. Así, gracias a su empeño y dedicación, y superando un difícil cuadro de salud, se encuentra en la final del reconocido concurso de baile que tendrá lugar este sábado.
“Ha sido un viaje maravilloso, apasionante desde el principio. Me estoy preparando con todo mi corazón para la final del sábado para no decepcionarlos”, escribió la empresaria en italiano en su cuenta de Instagram junto a un video que repasaba su andar en el certamen. Como siempre, la rubia se las ingenia para que se hable de ella. Sus logros, sus pesares, sus alegrías, sus escándalos, su familia. Por un motivo o por otro, Wanda siempre es tema de conversación.
Su caso llegó a la edición local de Vanity Fair “Wanda demostró gran dignidad al narrar lo que le pasó, sin romperse y sin perder la calma. Lo hizo porque tuvo la suerte de tener una familia cercana y, lo más importante, la fuerza para seguir adelante para volver al juego antes de que sus pensamientos le dejaran sin aliento”, analizaron en la prestigiosa revista. “El suyo es un ejemplo de elegancia de poder raro, y es por eso que esperamos que de vez en cuando los prejuicios se desvanezcan para dar espacio a la sustancia que se encuentra detrás del marco”.
Es que el año 2023 marcó un periodo de significativos y numerosos desafíos para la empresaria, una figura pública acostumbrada a enfrentar diversas situaciones. Y estos últimos meses en particular fueron cruciales en su vida. Durante la mitad del año, mientras se encontraba en la Argentina preparándose para volver a Europa con su familia, recibió la impactante noticia de que padecía leucemia. Este diagnóstico transformó su vida radicalmente, y aunque inicialmente optó por mantener en privado los detalles de su enfermedad y su estado de salud, con el tiempo y ya en proceso de tratamiento médico, la exconductora de Masterchef comenzó a compartir sus experiencias.
Posteriormente, se trasladó de Estambul a Roma, Italia, para participar en el programa Ballando con le stelle (Bailando con las Estrellas), el equivalente al Bailando que popularizó Marcelo Tinelli en la Argentina. “Les presento a mi nuevo compañero Pasquale La Rocca. Qué sorpresa y cuánta responsabilidad”, escribió la ahora morocha en italiano, sonriendo a cámara y posando con su partenaire. El hombre hizo lo propio en sus redes, con un mensaje similar en italiano e inglés: “Les presento a mi fantástica compañera de esta edición de Ballando con le stelle”.
Al repasar la trayectoria de Pasquale, las referencias de Wanda respecto a la responsabilidad cobran sentido, ya que se trata de un multicampeón de este tipo de concursos. El hombre nació en Nápoles, tiene 32 años y baila desde los 9. Desde los comienzos, se especializó en bailes de salón y latinoamericanos, disciplina en la que se consagró campeón a nivel nacional y representó a Italia en el Mundial de la especialidad, llegando a las semifinales.
Ya desde su primera aparición en el escenario del programa, la pareja sorprendió al público con una rumba sumamente seductora, obteniendo una impresionante puntuación de 43 puntos por su excepcional actuación.
En la segunda gala, su actuación fue aún más espectacular, cosechando elogios unánimes y alcanzando la extraordinaria cifra de 50 puntos. Este logro representó una puntuación perfecta otorgada por el jurado, quienes mostraron un consenso notable y no dudaron en otorgar la máxima calificación de 10 tanto a Wanda como a su compañero bailarín.
Así, paso a paso, su esfuerzo y dedicación fueron tales que logró avanzar hasta las semifinales, aunque no sin enfrentar algunos percances. Recientemente, compartió en sus redes sociales un video donde se le ve intentando levantar la pierna izquierda, perdiendo el equilibrio y cayendo al suelo, intentando agarrarse de una baranda. Este incidente, tras intensas jornadas de entrenamiento de entre 8 y 9 horas diarias, resultó en un moretón en su ojo. Con humor, publicó una foto de su rostro junto a su hija, acompañada de la frase: “Sorpresa en Roma, mamá en semifinales”.
En las imágenes compartidas, se puede ver a Wanda con sus hijos y su esposo, Mauro Icardi, en el estudio de baile. En su actuación en la pista italiana, junto a su bailarín, obtuvo 60 puntos del jurado. Emocionada, fue abrazada por toda su familia, incluyendo a su hijo Valentino -fruto de su relación anterior con Maxi López-, quien actualmente reside en la Argentina para jugar en las Inferiores de River, que viajó a Italia especialmente a abrazar a su madre.
La sorpresa de Wanda aumentó al escuchar las conmovedoras palabras de su esposo, quien expresó que su relación no cambió tras el descubrimiento de la enfermedad, enfatizando la importancia de la familia. “Comenzamos siendo nosotros dos con tres niños y ahora somos una familia con dos hijas más. Cuando ella contó lo que le pasaba, todos tuvimos mucho miedo”, dijo Icardi. Tras estas palabras, sus hijos corrieron a abrazarla.
“Soy la única argentina y latinoamericana y eso va a pesar mucho en la final porque todos los jueces y los que miran el programa son italianos, pero bueno, el voto cuenta mucho de Instagram, de Twitter y de Facebook y todo lo que me estuvieron votando me ayudó un montón a llegar hasta acá, así que seguramente estos dos programas también voy a necesitar el voto”, explicaba en ese instante.
A lo largo de las semanas y galas, Wanda superó cada obstáculo presentado. Antes de la semifinal, expresó en sus redes sociales la importancia del apoyo de sus seguidores para avanzar en la competencia, siendo la única argentina y latinoamericana en la final, y destacando el peso que tendría el voto del público en las redes sociales. Ahora, solo queda escuchar la señal de largada y salir a la pista por última vez. Quizás el sábado, en la noche romana, haya coronado con un simbólico trofeo una nueva historia de superación.