Indudablemente, la esencia de Lía Crucet trasciende las barreras físicas que impone su salud. Desde finales de 2021, la reconocida artista de música tropical, de 71 años, se encuentra internada en un geriátrico en Mar del Plata. La intérprete que enfrentó una serie de desafíos de salud que agravaron su condición, a pesar de estos obstáculos se muestra esperanzada de regresar a los escenarios, una ilusión que nunca se desvaneció.
Aunque este anhelo de un retorno parece ser un sueño inalcanzable, su esposo, Tony Salatino, continúa brindándole apoyo y ánimo, incentivándola a mantener un propósito vital. En las últimas horas se publicó en su cuenta oficial de Instagram una fotografía actual de la cantante, conocida por éxitos como “La güera Salomé”. La imagen generó una ola de mensajes afectuosos y de apoyo de parte de sus seguidores.
En el perfil de la denominada “Reina de la bailanta”, que cuenta con más de 30 mil seguidores, se la puede ver sonriendo a la cámara, con el pelo recogido y un collar blanco, hecho que derivó en demostraciones de amor como: “La número ONE. La mejor de los tiempos, gracias por tu música”, “Lía, que te llegue todo el amor del mundo” o “Te amamos Lía. Sos la única e irremplazable”, además de otros usuarios que destacan que se la ve mucho mejor que en otras imágenes que circularon recientemente.
“Lía querida, se te ve mejor y me alegra mucho. ¡Fuerza reina!”, “Una gran bendición poder verte mejor”, “Siempre te seguía en los bailables, cuántas fotos tenemos juntos y qué alegría poder verte mejor”, dejaron los seguidores a modo de plegaria, con un mensaje que resume su sentimiento. “Ojalá Dios te diga bendiciendo con salud”.
Hace un mes, Tony Salatino había hablado con Teleshow luego que circulara otra imagen de la cantante que causó cierta preocupación: “Está bien ella, gracias a Dios. Por supuesto que está con la edad encima. Algunos se piensan que es la Lía Crucet de antes y ya no, como yo tampoco soy el que era antes. El tiempo pasa para todos”.
Y luego siguió: “La cuenta se la manejo yo. Y esa foto es de ahora. Está bien, pero está crecida. No estará diez puntos, pero está. Gracias a Dios conoce a todo el mundo, que según me dijo el médico es primordial. ‘Preocupate cuando deje de reconocerte’, me advierte. ¡Qué se yo! Él dice que en algún momento va a pasar. Pero, por ahora, yo la veo perfecta. Te digo más: me tiene podrido con que quiere ir a la televisión”.
En ese sentido, Salatino reveló que Lía le pidió ir a Pasión de sábado, el clásico programa de bailanta de América del que era habitué, pero eso es algo que ya no es factible dada su condición. “Ella me dice: ‘¡Llevame! ¿Cuál es el problema? ¿Qué soy una persona grande? ¡Qué hay con eso! ¿Qué tiene de malo que esté crecida? La gente que me quiere me va a seguir queriendo y la que no me quiere, que no me quiera’”, explicó el hombre.
Y fue más allá: “¡Hasta hacer shows quiere! Yo, para darle ánimo, le digo: ‘Cuando te pongas bien y el médico me autorice, no va a haber ningún problema. Así que vos ponete bien que, entonces sí, vamos a hacerlo’. Tampoco le puedo tirar el amor propio al piso y decirle que se olvide de eso, que nunca más va a cantar. Yo trato de darle fuerza para que no decaiga”.
A principios de año, Tony había contado resignado lo difícil que era para él no tener a Lía viviendo en su hogar. “Ojalá pudiera venir a casa, pero ya es imposible. ¡La vida es así! Yo la voy a ver día por medio. Pero, después de tantos años, para mí es duro. Obviamente, es más difícil para ella. Pero para mí también es complicado. Tuve que acostumbrarme a vivir solo. De todas formas, mientras ella esté estable, yo me siento dichoso. Hay que seguir adelante”, señaló.