En su visita al programa Entre Nos (Net TV), la actriz Patricia Viggiano hizo un recorrido exhaustivo por su carrera en la pantalla chica. Entre la felicidad por recordar sus papeles más destacados, intercambió una revelación impactante acerca de una experiencia traumática que le tocó enfrentar.
Durante la entrevista, conducida por Tomás Dente, la actriz relató que fue víctima de abusos en múltiples producciones televisivas: “Yo no soy una feminazi ni nada que se le parezca, pero era un ambiente sumamente machista”, advirtió antes de dar más detalles.
En ese punto, reconoció que como actriz debió pasar por momentos que no dudó en reconocer como “espantosos”, entre los que incluyó abusos de poder y sexuales. “Esto se empezó a hablar a partir de lo que pasó con Calu Rivero”, rememoró al respecto. La referencia es a la acusación de la actriz a su colega Juan Darthés por supuestos abusos ocurridos en la grabación de Dulce Amor en el 2012.
“Yo nunca lo hablé antes porque no era algo que a mí me interesaba abrir, porque no era el momento para hacerlo, todo te jugaba en contra”, reflexionó. “No es que las mujeres hablan tarde, no hablábamos porque no se podía, porque no había posibilidad. Y porque si hablabas, perdías, no era que nos callábamos porque nos gustaba la situación”, agregó.
Patricia ratificó que todo cambió desde el momento que Calu contó su experiencia. “Yo ahí empecé a hablar porque estaba trabajando en una tira en Telefe, a la noche, y ella hacía de mi hija, y lo primero que me preguntaron es lo que yo pensaba de lo que había pasado con ella”, contó, refiriendo a la serie Campanas en la noche. “Ahí me vi en la necesidad de decir que esto no es nuevo, es de hace mucho tiempo, lo que pasa es que antes no podíamos decirlo y ahora las chicas gracias a Dios viven con otra cabeza y están más preparadas”, aseguró.
Viggiano reconoció también que los abusos que se vivían en el medio no solo eran físicos, sino psicológicos, y que había que estar muy bien preparada para poder enfrentarlos, porque se tiene que luchar también contra la mirada del afuera: “Es muy difícil porque en general ese tipo de sujetos tienen poder, se manejan con poder, y aparte son personas que no parecerían por lo que es su perfil, pero todo lo contrario. Muestran que defienden los derechos humanos y etcétera, y con ese perfil es muy difícil que te crean”.
De acuerdo a su testimonio, la actriz se sentía en una encrucijada. “Cuando me sucedió, me tuve que bancar un año hasta que tuviera pruebas como para poder decir ‘basta’. En ese tiempo no negociás, padecés; tenés que elegir entre el pan de tus hijos en ese momento y paralizar tu proyección profesional y abrirte porque tenés un enfermo del otro lado, y no es justo”, reveló.
Sobre el fuerte incidente del que fue víctima, la actriz insistió en su postura: “No se podía hablar, y es muy importante que eso se tenga en claro, porque quizás herías a una familia que estaba atrás de ese personaje. Cuando se me pidió perdón, fue porque amenacé, porque tenía pruebas. Y cuando lo hice, fui muy bien escuchada por el directivo del canal, gracias a Dios, una persona encantadora”, recordó con gratitud.
En ese momento, Patricia contó la parte más contundente de su relato. “A mí me tiraron contra una escalera por no querer acostarme con un actor. Me tiró y me golpeó”, expresó la actriz, que con las pruebas en la mano encaró a su colega. “Le aseguré que, si lo volvía a hacer, lo escrachaba en todos los medios”, dijo, y se encontró con un pedido de disculpas. “Si hice lo que vos decís que yo hice, te pido perdón’. Le contesté que si lo volvía a hacer le aniquilaba la carrera. No se la aniquilé, y sigue estando”, cerró.