Este domingo, Juana Viale vuelve a conducir los almuerzos en la pantalla de El Trece y de esta manera se conforma el tándem con su abuela. Con Mirtha Legrand al aire desde principios de octubre, el canal de Constitución adquiere la fisonomía habitual de los últimos años, en los que las dos conductoras se alternaron en los programas durante el fin de semana.
Detrás de cada uno de los ciclos, La noche de Mirtha y Almorzando con Juana, está Nacho Viale como productor general. Y en un mano a mano con Ángel de Brito para LAM, habló del regreso de su abuela con las mesas políticas, de la expectativa por el debut de su hermana y apuntó contra Charlotte Caniggia, quien se bajó a último momento y obligó a la producción a buscar de urgencia a otro invitado.
Según contó Viale, el desfasaje entre ambos regresos tiene que ver con la particularidad de los domingos de octubre, y que debido a la elecciones y al Día de la Madre, prefirieron esperar hasta el 29. “Nos vino bien separarlos un poquito porque la locura que se vivía era demasiada”, explicó. En este sentido, admitió que costó la vuelta “más que el año pasado”, en referencia a las negociaciones que pusieron en riesgo la permanencia en el canal.
Luego, de Brito quiso saber la ingeniería detrás de los sucesivos programas de Mirtha con los presidenciables Javier Milei, Patricia Bullrich y Sergio Massa. “Fue fácil, porque la demora del arranque hizo que nos quedáramos sin cantidad de programas para sentar a los tres con más chances de ser elegidos. Entonces hicimos algo salomónico: los trasladamos al programa como salieron en las PASO, en ese orden”, expresó el productor. A falta de sábados, solicitaron ocupar un domingo de la programación del canal. “Les pedimos si nos daban un día más para sentar a los tres, y si no, que ellos eligieran a quién no querían sentar”, reveló.
Esto no fue necesario y los tres presidenciables estuvieron sentados a la mesa con La Chiqui. Y cada programa tuvo su producción particular “El de Fátima y Milei nos gustaba por la pareja, el de Patricia fue más complicado temas de los canales y los periodistas y el de Massa fue super abierto”, enumeró.
Más complicada resultó la vuelta de Juana, que tuvo a último momento la baja de Charlotte Caniggia, lo que obligó a reprogramar la mesa: “Hubo varias cosas que no me gustaron. Primero, no se le falta el respeto a un grupo de trabajo. Segundo, la persona que la representa a Charlotte ninguneó a las productoras, y después, los llamados fueron demasiado alterado, con un tono fuera de lugar”, expresó.
“A mí no me gusta que me toquen el equipo de trabajo. Podemos hacerlo bien o mal, pero me parece que hay formas. La televisión de los gritos quedó en el pasado”, estimó. Luego contó que se enteró cuando salió de una reunión, con la rutina ya armada. “A las siete y media de la tarde empezó una debacle, con productoras llorando que no estaba dispuesto a bancarme, y lo llamé a este señor”, expresó en referencia al manager de la mediática, quien ya no iba a ser de la partida.
“A mí no me interesa si viene Charlotte Caniggia o no, me parece un personaje de la tele y obviamente los que hacemos tele queremos traer a alguien que esté rindiendo”, agregó. Y consultado sobre si pensaba que la ausencia tenía que ver con la reciente exposición de la modelo en el Bailando 2023, aseguró que ellos la habían invitado antes. “Ojalá que haya sido eso, porque si no habla de un grado de irresponsabilidad de ella para manejarse en los medios”, sentenció, en referencia a que ya estaba hecha la promoción del programa con la presencia de la mediática. En este sentido, aseguró que a su hermana le había afectado puntualmente por el maltrato a la producción. “En el fondo, estamos todos el mismo barco que es este medio”, concluyó.