Xuxa Meneghel fue un ícono y una de las representantes estelares del público infantojuvenil a fines de los 80 y principios de los 90. En 1984 debutó en la televisión brasileña con Xou da Xuxa. Años más tarde, en mayo de 1991, llegó a la Argentina y rápidamente se convirtió en referente de multitudes. Alcanzó la cima en un abrir y cerrar de ojos.
Recientemente, se viralizó en las redes sociales un llamativo momento que ocurrió en uno de los programas de Xuxa en Brasil. En el video, que ocurrió en de la década del 90, la conductora tiene una charla con un robot que supuestamente viene del futuro y le consulta sobre cómo es el 2023.
“Somos muy diferentes, la naturaleza está en orden, estamos todos bien, no hay guerras, los seres humanos se concientizaron sobre la paz”, asegura la robot a modo de predicción. Además, Xuxa aprovecha para preguntarle cómo es la vida de los “bajitos”, en referencia a los niños.
“¿Y los niños pudieron vivir en un mundo mejor, sin violencia, sin drogas?”, le consulta la presentadora infantil. “Sin drogas, sin violencia, el futuro es bello, bienvenidos al futuro”, le responde el robot. Lamentablemente sus predicciones no fueron muy acertadas.
Cabe recordar que Xuxa ha logrado dejar una huella en la televisión argentina con su clásico programa infantil. Recientemente, la diva hizo un documental para celebrar los 30 años del ciclo que conquistó el corazón de millones de niños. En dicha producción, la conductora homenajea a un grupo de adolescentes que las acompañaba, conocidas como Las Paquitas. Se trataba de un selecto a las que Xuxa les daba un gran lugar para que se pudieran lucir como bailarinas, y también de manera lúdica.
En el grupo había brasileñas y dos jóvenes argentinas, Julieta Cardinali y Karina Rivero. Al poco tiempo se realizó un concurso masivo en el que se eligió lo que se denominó la Súper Paquita. El premio fue un contrato con Xuxa Producciones y un auto 0 km. La ganadora fue Natalia Oreiro. Con el tiempo, la mayoría de los países latinoamericanos contaron con una representante en el staff. Muchas de ellas utilizaron esa exposición como un gran trampolín a la fama; otras, por cuenta propia, decidieron buscar el anonimato y alejarse del medio artístico. Aunque cada tanto, unas y otras vuelven a estar en el centro de la escena.
Xuxa, el documental indaga en la vida de la Reina de los Bajitos. El día del anuncio, ella se reunió con algunas de sus históricas bailarinas, quienes posaron sonrientes frente a las cámaras, en un instantáneo viaje en el tiempo. Aunque las revelaciones que se conocieron en el último capítulo dejan entrever que había zonas oscuras una vez que se apagaba la cámara.
El diálogo de Xuxa con su asistente Marlene Mattos estremece desde las palabras, las miradas y los silencios. En un momento, la animadora insinúa una denuncia que ya tuvo repercusiones en las redes: “Yo tuve un encuentro con las paquitas y ellas me contaron cosas. ¿Tenés noción de lo que hiciste en la cabeza de esas chiquitas? Conmigo está todo bien, porque yo ya era una mujer”, le dice la rubia. Mattos la interrumpe sin una gota visible de arrepentimiento: “Ellas viven hasta hoy de ser paquitas. Yo las castigaba porque quería que sacaran buenas notas. No aceptaba que se sacaran menos de siete”. Xuxa la increpa: “Ellas dicen que si engordaban les decías barbaridades”. Mattos asiente, otra vez sin remordimientos. “Dicen que las obligabas a teñirse el pelo”, sigue Xuxa, como si buscara algo que pudiera quebrar de una vez a su verduga. “Claro, si eran una continuación tuya, ¡se teñían porque querían!”, dice Mattos.
Es muy fuerte ver a la Reina de los Bajitos sometida ante el poder que Mattos se las arregla para volver a tener mientras dura la charla. Y ver cómo, derrotada, le pregunta otra vez: “¿Vos sabés lo que nos hiciste en la cabeza?”. “¿A las paquitas?”, se ríe de nuevo la productora. “A mí y a las personas que trabajaban conmigo”, dice Xuxa. “Si las paquitas no hubieran sido paquitas nadie sabría siquiera que existen”, responde Mattos, y Xuxa sólo atina a suspirar y agarrarse la cabeza.