A lo lejos, un cisne blanco gigante navega entre la gente por todo el Luna Park. Encima suyo, Alejandro Sergi y Juliana Gattas saludan y cantan “Romix”, mientras un mar de manos se alza para grabarlos y tocarlos. Es el cierre de una noche a puro baile, artistas invitados y mucho pop, en la que Miranda! da inicio a una seguidilla de cuatro shows en el mítico estadio porteño.
Minutos antes de empezar, las gorras, remeras y posters de la banda ya invadían el campo y las plateas. Puertas adentro, la emoción estaba contenida. Las bailarinas hacían pequeños gritos y saltos en puntas de pie al costado del escenario para ahuyentar los nervios. Mientras, el dúo pop recorría los pasillos. “Miranda! rumbo al escenario”, le dice alguien del equipo a Juliana mientras ella, con un look que recordaba a Madonna, mira a cámara, se frena ante un cartel de Hugh Laurie –el protagonista de Dr. House– y le da tres besos.
Sobre el escenario, los botones del Hotel Miranda! salen a recibir al público. “Ale y Juli me dijeron que habían invitado un par de personas pero no me dijeron que eran ¡8348 personas! Me hicieron lo mismo en el Gran Rex. Que no cunda el pánico, yo soy Coqui, soy el botones y les voy a conseguir habitación a todos”, resalta el “empleado del lugar” mientras llama a un compañero y juntos van en búsqueda de los gerentes.
Así comienzan a sonar los primeros acordes de “Por amar al amor”, mientras Sergi y Gattas abren la puerta del frente de su hotel y salen, envueltos en una cortina de humo. Completamente de negro y con trajes brillosos pisan el escenario para iniciar la fiesta, que celebra el momento de mayor éxito en la carrera de la banda.
Una de las pruebas de ese resultado es la diversidad de público: desde chicos de siete años hasta parejas adultas, la música atraviesa a todo tipo de generaciones. Un espejo de los 22 años de trayectoria que tiene la banda.
Siguieron con canciones como “Hola’, “743″ y “Dice lo que siente”, hasta que llegó el primer cambio de look. Mientras las bailarinas se movían por el escenario con cestos de ropa en su cabeza, los cantantes salieron usando sobretodo azules y cantando uno de sus hits, “Prisionero”. Durante el estribillo, pelotas transparentes cayeron del cielo, mezclándose con una ola de burbujas, creando una puesta única.
Tras “Lo que siento por ti” y “Puro talento”, el dúo volvió a modificar la puesta en escena con cambio de vestuario incluido. Una torre de regalos y gorros rojos y blancos anticiparon “Navidad”, mientras Ale y Juli lucían tapados verdes brillantes con bolas pegadas. El show continuó con “Tu misterioso”, “Nadie como tú”, “Uno los dos”, “Perfecta” y “Extraño”.
De repente, las luces se apagaron y una sombría cortina de humo cubrió el suelo del escenario. En ese ambiente tenebroso, mientras los cantantes buscaban alumbrarse con linternas, empezó a sonar “Dos”. Así recibieron al invitado de la noche: Dillom.
A puro baile y pop, y con un set list que incluyó “Enamorada”, “Mentía”, “Traición”, “Fantasmas”, “Ya lo sabía” y “Yo te diré”, el Hotel Miranda! hizo que el niño interior de cada fan saliera a la luz con gritos, saltos y una explosión de emoción. Desde los recuerdos de la infancia y adolescencia, hasta casamientos y más, la mente de cada uno se trasladó a distintos momentos de su vida.
Así, después de casi dos horas de show, el dúo se preparaba para cerrar con “Don”. Envueltos en abrigos plateados y brillantes hicieron vibrar a toda la gente en un final que estalló con una lluvia de papeles blancos.
Pero faltaba lo mejor. Después de despedirse, y tras el clásico canto de “¡una más y no jodemos más!”, Ale Sergi y Juli Gattas sorprendieron a todos surgiendo desde una de las plateas. Subidos a un enorme cisne navegaron la marea de fans hasta llegar al escenario y así despedirse y dejar la puerta del hotel abierta para su máxima fecha en diciembre.
Con las luces apagándose, y el frío de la calle haciéndose sentir desde la puerta de salida, la gente se despidió del Luna Park cantando “Perfecta”, relamiéndose por lo vivido, pero pensando en la fiesta que vivirá el 7 de diciembre cuando Miranda! se presente en el Estadio Ferro.