Se lo dicen sus amigos, lo ve en las redes y lo escucha en el ambiente, hacer un show en Argentina es algo único. Con esas ansias, Myke Towers no puede esperar para verlo con sus propios ojos y saber qué se siente subirse a un escenario en el país. “No es lo mismo verlo por video que sentirlo de frente, tengo esa ansiedad por querer llegar ya”, cuenta el autor de “LALA”.
Así, en medio de su gira, “La Vida es Una”, prepara todo para la fecha elegida: el próximo 7 de septiembre en el Luna Park. Entre la historia del lugar y la lista de artistas que tocaron ahí, el puertorriqueño sueña con su primera visita a la Argentina. “He visto otros colegas que hacen los eventos en el Luna Park y la energía es increíble. Siempre quise ir a la Argentina pero no sabía que iba a llegar a hacer un Luna Park, una de las plazas más importantes que siempre he escuchado desde que empecé a cantar, algo bien importante para mí llegar allá”.
Poco a poco, la relación entre Argentina y Myke Towers empezó a hacerse más fuerte, no sólo por los artistas locales que escucha, su fanatismo por la escena nacional, sino también por la conexión con los argentinos en muchos de los festivales que da por el mundo: “Estoy loco de verlo con mis propios ojos. Hay muchos lugares en Latinoamérica que no he visitado, pero sé que Argentina va a ser de los más que se van a hacer sentir. Créeme que en todos los lugares que canto, todos los festivales, siempre los argentinos me hacen la seña como ‘Hey, estamos esperando allá’. Además me gusta cómo ustedes se apoyan entre ustedes: los argentinos son unidos, ante mis ojos se ve la unión”.
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El puertorriqueño es uno de los diez artistas latinos más escuchados en Spotify, en estos 10 años de carrera supo pasar de géneros como el rap y el trap a canciones melódicas, esa prueba se refleja en su último álbum, La Vida es Una, que tiene canciones como “LALA”, el éxito internacional que llevó a Myke Towers a liderar los principales rankings.
El impacto cultural y global no tiene nombre, el tema alcanzó el número 1 en la lista Top 50 Global de Spotify y en la lista Global Excl. U.S. de Billboard a principios de este mes. Con más de 138 millones de reproducciones en Spotify y 5 millones de creaciones en TikTok llegó al número 1 en Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, España, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela en sus respectivas listas de Spotify.
—¿Cómo viviste este fenómeno que explotó, la gente escuchando y usando tu canción millones de veces?
—Pues lo asimilo, sé que está ocurriendo pero trato de seguir centrado en lo que estaba haciendo, como “vamos a dejarlo llevar por esa ola”. Estoy agradecido con el público por todo el apoyo, pero no puedo dejar que eso me llegue a la cabeza, tengo que seguir enfocado en lo próximo. Esto es una carrera a largo plazo que, al igual que como “LALA” llegó a ese nivel, después vienen muchas más con el flow, lo mío es seguir haciendo música como siempre lo hago, con el corazón.
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—¿En algún momento esperabas que pasara algo así, sentías esa vibra con esta canción?
—Sentí algo distinto cuando escuchaba el ritmo porque cuando uno hace las canciones se mete tan adentro de ella que no vas a pensar en el resultado: tú lo que estás buscando es que la canción quede bien y ya. Cuando la canción sale me dejo llevar por la reacción de los fanáticos, cuando uno la está haciendo obviamente la ve como si fuera una creación de uno, con mucho amor.
—¿Qué recordás de ese proceso? ¿Alguna anécdota de cuando la trabajabas?
—Pues mira la historia más loca fue que cuando la escuché iba en el vehículo y le saqué como la idea del intro, de una como automático, pero solamente hasta que entraba el ‘lalala’. No tenía ni lo que iba por debajo, nada. “LALA” nació cuando estaba en España. Luego fui a Milán, Italia, que la elaboro bien, que terminamos todo el álbum. Y la canción vuelve a repuntar cuando vuelvo a España, eso fue algo como una conexión inexplicable.
—Una explosión que no fue instantánea, tuvo su proceso. ¿Le tenías fe en que era un crecimiento paulatino?
—Sí, tuvo su proceso, como tres meses exactos después que se sacó la canción, ahí fue que despuntó duro. No, no te voy a mentir brother, soy un tipo que si veo que era algo como que no resulta así al momento pues voy a lo otro y eso es lo que había pasado yo decía “pues si la gente no lo entendió, pues vamos, vamos a lo que la gente quiere”. Me tomó muy de sorpresa y ahí fue que dije “okey, vamos a llevar por lo que está ocurriendo con ella”.
—Veo un punto en común con tu carrera, la paciencia.
—Lo he tenido que desarrollar a terror, créeme, no soy nada paciente, pero con el tiempo he aprendido que hay que desarrollar esa virtud. Mi mamá siempre me decía: “Tú no tuviste que esperar para nacer”, porque yo salí antes de tiempo y todo eso no me gusta esperar brother, no. Hay cosas que pasan y hay cosas que hay que hacer que pasen, yo estoy en ambas. Espero que pasen ciertas cosas, pero también me gusta hacer que pasen. Hay muchos jóvenes que se identifican conmigo, que lo quieren todo rápido, le gusta tenerlo todo al momento, pero hay cosas que llevan un proceso, un tiempo, que madure y ahí se va a dar los frutos que uno quiera.
—Myke, llevas diez años de carrera. ¿Cómo hacés cuando mirás para atrás y ves todo ese camino?
—Sí, mis primeras canciones las tiré en octubre de 2013. Me río de muchas cosas del pasado, que en el momento las veía como un nudo, un problema, y hoy día me río porque he sobrepasado todo eso. Es un proceso, cuando hablo con los jóvenes nuevos que quieren hacer música se los digo, hay que dedicarse y no es tan fácil.
—Para cerrar, hoy, ¿qué es lo más importante en tu vida?
—Lo más importante obviamente las personas que si yo decido quitarme (de la música) van a estar conmigo. Mi familia, mis amigos, la gente que si yo digo ‘no quiero cantar’, mañana se quedan conmigo. Son lo que más me importa, lo otro viene por añadidura.
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