Luego de generar preocupación entre sus seguidores y el público en general al hablar a viva voz de problemas de salud mental, expresando a corazón abierto cada cambio de estado de ánimo, desde diciembre hasta la actualidad, llegó el momento de relajación y paz para Karina, la Princesita, quien se encuentra distendida en medio de sus vacaciones tras haber hecho una seguidilla de shows en todos los puntos del país.
Recientemente, tras un show show en Chaco, Karina dejó un mensaje muy fuerte a través de sus redes sociales: “Me sentí bastante mal, sentí que me faltaba el aire, que no podía respirar, pero me estoy ocupando y está todo bien, esto es parte del proceso, pero bueno para que sepan lo agradecida que estoy, la música me hace bien”.
En tanto, la última semana, su mamá Mónica Cuello concedió una entrevista a Intrusos (América) y habló de la realidad que está atravesando su hija. “La entiendo cuando la veo, porque está pasando por momentos de ataques de pánico, todo esto lleva a una depresión. Yo más que nadie la entiendo porque yo lo sufro hace muchos años y también estoy medicada. Lo venía notando porque ella se ocupa de muchas cosas, de su hija que está presente absolutamente en todo, de su banda, se ocupa de todos los temas, es mucha presión”, comenzó relatando .
Más adelante, la mujer se explayó acerca los motivos que ella cree que pudieron desencadenar los ataques de pánico de Karina. “Es un conjunto de todo, desde lo económico, cuando empezó a perder algunos juicios. incluso a varios músicos de los que le hicieron demandas judiciales ella los ayudó muchísimo en épocas en las que no podían trabajar. Y siguen llegando juicios. Es una persona que se ocupa de tantas cosas, tendría que delegar un poco, descansar y disfrutar”, reveló.
Y por lo visto, la intérprete siguió las palabras de su madre, ya que en la actualidad se la puede ver descansando unos días, con la playa de fondo, como la imagen de eligió para compartir. Además, dejó una sentida reflexión donde da cuenta de cómo se encuentra: “Gracias tía por regalarme este viaje, tenía miedo de irme pero tengo la mente menos desordenada. Te quiero mucho”.
Tras ello, en otro tramo del texto, expresó: “En tu vida siempre hiciste lo que podías con las herramientas que tenías en ese momento. Fuera la culpa, fuera el castigo”. También advirtió a quienes la leyeran: “No dejes que te digan ‘vos sos así y no vas a cambiar’. Los que trabajamos en nosotros mismos podemos cambiar, mejorar, aprender y evolucionar”.
Para el cierre, y con el emoji de un beso acompañando el texto, aclaró: “Es más, en los momentos más de mierda, si te ocupás y trabajas en eso, floreces”.
En esta última participación en televisión, su madre se largó a llorar cuando habló de la fuerte presión que carga su hija sobre sus hombros. “Yo pienso que ella lleva una mochila de cosas que no le pertenecen, leo mucho que le dicen: ‘Negra villera’. Pero mi nena no vivió en una villa, vivió en Munro, en Olivos. Porque yo siempre trabajé de lo que pude y alquilé. Mi nena me ha dicho: ‘Me acuerdo cuando trabajabas mucho y no estabas y por ahí me comía una tortilla del día anterior’. Todo ese dolor que ella lleva es muy grande”, reveló Mónica visiblemente emocionada.
Luego, continuó entre lágrimas: “¿Sabés qué pasa con Kari? Hoy en día, lo que más me duele es que ella es la mamá de todos, ya estoy grande, no tengo 20 años y quisiera poder solventar a mis hijos. Ella se ocupa de mí, de su hermanita, de su hermano, y no tendría que hacerlo. Es mucho. Pero la gente te dice: ‘Tu hija canta y gana plata’. Pero es muy sacrificado su trabajo. A veces le escribo y le escribo, puedo parecer densa pero para mí eso es amor. Le digo: ‘¿Necesitás que vaya a cualquier hora?, ¿querés que vaya a hacerte unos mates o unos masajitos en los pies?’. Y a veces no tengo respuesta”.
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