Guido Kaczka recibe cada día nuevos participantes que se animan a competir en Los 8 Escalones, el ciclo que conduce por El Trece. Y aunque el programa busca entretener y divertir a la audiencia con un juego de preguntas y respuestas sobre cultura general, muchas veces los concursantes sorprenden y emocionan a los jurados tras revelar su historia de vida o incluso, por qué necesitan el dinero.
Este jueves se vivió un divertido e inusual momento al aire del programa cuando un participante apuró a la reciente ganadora de la noche anterior en pleno vivo y dejó a todos sin palabras. En primera instancia, el conductor presenta a los nuevos concursantes y fue ahí cuando Joana y Facundo se llevaron todas las miradas.
“Arranca el juego”, dijo Kaczka. “Empieza esta noche tres millones de pesos o seis millones para Joana”, comentó, remarcando que la última participante fue la vencedora del día anterior y ahora podía duplicar su premio. En ese momento otro participante murmuró a lo que el conductor llegó a escuchar y repitió sus palabras: “‘No, no, no’, ¿dice Federico?”. A lo que el joven respaldó sus declaraciones y reafirmó: “No. Hoy no llega”, comentó firme en su postura.
“¡Oh, Federico!”, dijo Kaczka sin echar leña al fuego a lo que Joana indignada puso una cara de sorprendida y exclamó: “¡Atrevido!”. En ese momento comenzó el juego con normalidad y los participantes hicieron como si nada hubiera pasado aunque el nerviosismo empezó a pesar a medida que iban avanzando de ronda.
Facundo, de 36 años, reveló que estaba desempleado tras haber trabajado en una empresa de correo y quedar “nominado” en ella. Joana es técnica superior en Recursos Humanos y se desempeña en esa área de la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo del Ministerio de Economía.
La participante, que ya tenía en su poder tres millones de pesos, reveló por qué se anotó en la competencia: ”Para probarle a mi mamá que no soy tan inteligente como ella cree”. Finalmente Joana quedó detenida en el escalón número ocho y no pudo aumentar su premio, efectivamente lo que había dicho Facundo, aunque él tampoco obtuvo la recompensa mayor y quedó a un paso de la final, perdiendo en el escalón anterior.
Hace unos días otro concursante emocionó a Guido y se quebró en llanto en pleno vivo. La semana pasada se vivió un momento muy emotivo al aire tras ver como Eduardo, uno de los participantes rompió en llanto por llegar a la final de la competencia cuando Luna, la otra finalista, lo eligió para disputar el último escalón por el premio máximo.
Este hombre oriundo de Rafael Castillo, partido de La Matanza, habló de su historia de vida y no pudo evitar emocionarse. Contó que alquila autos a batería para chicos en la Plaza de Atalaya de Isidro Casanova y reveló cuál era su objetivo si ganaba los tres millones: “En un año aumenté de golpe entre 60 y 70 kilos”, comenzó diciendo y en ese momento no pudo evitar las lágrimas.
“Perdón es que falleció mi mamá y eso me mató”, agregó Rafael. En ese momento, Kaczka no emitió palabras y sorprendido por sus declaraciones, se acercó y le dio un fuerte abrazo. “Me quedé solo en la vida, con mi hermano nomás y bueno, eso me mató. Tuve mucha depresión y me dejé llevar, me quise ir con ella. Si estoy acá es por mi hermano”, confesó Eduardo. Tras sus fuertes declaraciones, todos los que estaban en el estudio quedaron sorprendidos y emocionados por su historia. Incluso las jurados Carmen Barbieri y Marina Calabró no pudieron evitar las lágrimas junto a él.
Seguir leyendo: