Qué siente por Tinelli, sus amores díscolos, su curiosa manía con los números y otras 30 respuestas de Marcela Feudale

En Complete 33, la locutora y panelista de LAM comparte con los lectores definiciones, reflexiones y curiosidades

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Los sábados de 10 a
Los sábados de 10 a 13, Marcela Feudale conduce un programa por FM Cielo 103.5 de La Plata. Se escucha también en Estación Marina de Pinamar 101,9 y 98,5 FM cielo del partido de la Costa

Para muchos, Marcela Feudale es la compañera histórica de Marcelo Tinelli. Otros reconocen en ella la voz que lideró programas en Rock &Pop, Radio 10 y Radio del Plata entre otras emisoras o la panelista que no se limita a opinar o exponer prejuicios sino que argumenta e invita a pensar. Sus compañeros saben que además es la persona que los entusiasma contándoles historias de la Historia.

1. Cuando eras chica de grande querías ser…

—Cuando era muy chica tenía una visión bastante mezclada de lo que quería ser, porque en verdad quería ser grande. Con mi hermana jugábamos a las cajeras con papeles viejos que nos daban. Eso era -imaginariamente- atender gente que realizaba trámites o pagaba cosas… Jugábamos al kiosco en un armario donde poníamos un barquito y vendíamos lo que había adentro. Quería trabajar en una boutique (risas) quería y quería y a la vez pensaba como sería mi vida en el año 2000, sacaba cuentas de la edad que tendría y pensaba si estaría casada o con hijos. No pensaba en alguna profesión en particular desde pequeña. Si a los 13 años empecé a pensar en la radio cuando a mi hermana le regalaron un grabado y jugábamos a que hacíamos programas de radio.

2. En tu vida, Marcelo Tinelli…

—Es un gran compañero de aventuras y un querido amigo, porque además de ser mi jefe, siempre ambos estuvimos en momentos importantes de nuestras vidas. Es alguien a quien quiero y admiro mucho. Uno de los seres más solidarios que conocí en mi vida. VideoMatch y ShowMatch nos hizo compartir nuestras vidas, noviazgos, casamientos, viajes, muertes… éxitos y fracasos.

3. A todos los querés mucho, pero tu compañero favorito de Videomatch es…

—No, no…. es imposible. Todos tienen características especiales para mí. Tengo gratísimos recuerdos con todos. Y nombrar uno me haría ser injusta con los recuerdos que tengo de cada uno de ellos. Lo que se dio en el programa fue una química maravillosa y no sé si era por la edad que teníamos o porque realmente éramos un grupo de gente especial. Es raro que en un programa haya tan buena sinergia, pero lo cierto que allí la hubo. Es lindo evocar a cada uno.

4. Ser licenciada en Historia….

—Era una deuda pendiente cuando ya estaba trabajando. Me gustaba mucho la Historia y en casa se hablaba mucho porque había “Mitines” familiares cada semana donde se debatía fuerte sobre cuestiones políticas. Siempre fue una familia muy activa en el tema y estaban todos muy informados sobre Historia y Política. Mi papá y mi abuela eran geniales en el tema y me hicieron despertar una curiosidad particular que, a la luz del tiempo, no solo me ayudó para mi trabajo sino también para el análisis del presente nacional e internacional. Además siempre tuve una especial predilección por saber. Soy muy curiosa y quiero saber. No es raro verme leyendo o en silencio pensando… bicho raro la Feudale.

5. Aunque pocos lo saben trabajaste…

—Como docente Ayudante de Cátedra en la USAL de la materia Introducción a la Historia. Pero pude hacerlo por poco tiempo por falta de tiempo y en parte porque no me redituaba un salario que me permitiese dejar lo que hacía. Ser docente no es pavada, necesitás tiempo para preparar las clases, capacitarte, atender las necesidades de los alumnos, actualizarte en datos y bibliografía. Comprendí que hay que dedicarle mucho tiempo. Lamentablemente dejé cuando me ofrecían la cátedra de Historia del Mundo Contemporáneo que es lo que más me gusta. Pero, todo no se puede y para hacerlo mal, preferí dejarlo. La docencia es una gran deuda pendiente.

6. La cualidad que más apreciás en las personas es….

—La empatía, la solidaridad, la verdad y la honestidad real en todos los campos de la vida, porque algunos te la venden de honestos pero en ciertas ocasiones se pegan patinazos gloriosos. ¿Se entiende? Soy honesto pero cuando puedo me “cuelo” en la fila porque estoy apurado o “pago una cometa” para que el trámite sea mas rápido. Ser honesto implica mucho más que no robar.

7. Si alguien lanza una flatulencia ruidosa delante tuyo…

—Me da vergüenza ajena. Me paro y me voy.

8. La radio es amiga y la tele es tirana porque…

—Eso ya de modo profesional. La radio me permite explayarme más en los temas. La tele es como que todo es demasiado breve. Cortito y al pie lo que hace que a veces lo que uno dice pueda ser malinterpretado. En la radio sin maquillaje y con rodete y pantuflas la zafás, en la tele no podés ni empezar…

9. Una anécdota de Videomatch que te sigue haciendo reír...

Videomatch era un programa disparatado e improvisado. No recuerdo una anécdota en particular. Lo que recuerdo fuertemente son los viajes de estudiantina que hacíamos cuando ya teníamos 30 y pico de años. El mes que pasamos en Francia para el Mundial 98, los quince días en Nueva York en el 99 o las tres semanas en Madrid del 2000 fueron experiencias inolvidables. Recién empezaba a viajar y a conocer el mundo y hacerlo de este modo fue muy flashero.

10. Se tenía que decir y se dijo: los zapatos stiletto son…

—Insoportables…salvo para una noche de seducción.

11. Escuchar los versos tangueros “Yo anduve siempre en amores ¡qué me van hablar de amor!”....

—Fui de amores díscolos, algunos presentables otros impresentables pero en verdad que “el problema siempre fui yo” andaba queriendo gente distinta todo el tiempo. No terminaba de convencerme ninguna relación, tarde o temprano algo se desmoronaba, me desencantaba. En fin…así estamos.

12. Una manía que pocos te conocen…

—Sumo los números de las patentes que frenan adelante mío… al pedo pero sino me muero (risas). Cuento los azulejos o rayas en el techo, o sillas que hay en salas de espera o consultorios, si me llaman antes de que termine de contarlas me desespero. Siempre tengo miedo de olvidarme algo cuando me voy de algún lugar. Reviso todo varias veces. El tema es que si no lo hago, seguro me olvido algo.

13. Nunca te mirás ni te escuchás porque…

—No. No me gusta. Estoy aprendiendo a escucharme ahora porque como grabo en casa, tengo que chequear que salga bien (risas).

14. Tu placer culpable es…

—Las carteras… amo las carteras.

Como locutora y licenciada en
Como locutora y licenciada en Historia pronto podrán nuevos capítulos de Bonaherencia, donde Marcela Feudale cuenta la historia de la provincia de de Buenos Aires por el portal Infocielo.com

15. Un antiguo pasatiempo que se transformó en emprendimiento...

—Tejer, lo hago desde muy chiquita. Me enseñó mi abuela, claro que me enseño el punto jersey (un derecho y un revés o “uno para arriba y uno para abajo” como le sigo diciendo yo). Y en pandemia me puse a tejer para mí y me di cuenta que me descargaba la ansiedad y que al mismo tiempo se convertían en pequeños proyectos que podía terminar en pocos días, en un momento en que pensar en proyectos era confuso y difuso. Me di cuenta que abrir una página podía darme la posibilidad de tejer y vender y si bien no es algo que me llene de dinero, he vendido bastantes. Los hago con mucho cariño y me encanta hacer nuevos diseños. Todavía lo sigo.

16. En los momentos alegres la canción que te acompaña es…

—Varios temas. Me gusta mucho la música. Sobre todo la música de los 70s, 80s y 90s.

17. Si pudieras conocer a una figura histórica y hacerle solo una pregunta…

—A San Martin. Le preguntaría qué pasó con Bolívar en Guayaquil, de qué hablaron, por qué se fue del país después de tanto.

18. Un día que en la radio pensaste “la felicidad es esto”…

—Creo que mi mayor reacción con respecto a la felicidad la experimento cuando viajo…pero la radio me ha traído momentos inmensos de felicidad. El último que recuerdo es cuando los papás de Bautista consiguieron Zolgensma, el famoso medicamento de los 2 millones de dólares, ganándole el juicio a la Obra Social y el Estado que no querían hacerse cargo y sentaron una linda jurisprudencia. El dinero que habían recaudado lo donaron a otros niños que buscaban otras curas a través de campañas en nuestro programa. Ese fue un día re feliz. Porque solucionamos varios problemas en pocos minutos y problemas de los graves e importantes.

19. Tenés que pasar un año en una isla desierta con una persona que haya trabajado con vos en Videomatch elegís a…

—Pablo Granados (perdón a su pareja) pero no por una cuestión sexual. Me parece un tipo altamente creativo y creo que hasta inventaríamos juntos una barcaza atada con cocos u hojas de palmera para volver a la civilización desesperados de aguantarnos uno al otro.

20. Pasan los años y te sigue emocionando…

—Los niños con sus descubrimientos y los animales con sus miradas tan profundas. Las películas viejas.

21. Pasan los años y te sigue enojando…

—La Argentina. Y no pienso ser más específica para no herir susceptibilidades.

Marcela Feudale solía jugar a grabar
Marcela Feudale solía jugar a grabar sus propios programas de radio en su infancia, sin saber que la voz se convertirá en su principal herramienta de trabajo

22. Hacer el amor en la playa…

—Cuando sos adolescente te calienta la idea, cuando sos grande la concretás y te das cuentas que aun con una loneta, es lo más incomodo y poco romántico del mundo. Dame una cama…

23. La frase “No importa cuántas veces se demuestre una mentira, siempre quedará un porcentaje de personas que creerá que es verdad”….

—Es cierto. La mentira se instala poderosamente porque en general tiene rasgos que la hacen atractiva para la mente del público. La desmentida nunca llega o cuando llega solo la conocen algunos. Hay miles de casos… En verdad es una de las cosas que me enoja de cómo somos los humanos.

24. La cintita roja para abrir los paquetes de galletitas es…

—El peor invento de la humanidad. Dame un cuchillo que corto por donde está la cinta y listo.

25. Entre la capacidad de recordar o de olvidar…

—Siempre prefiero recordar y siempre recuerdo. No hay un por qué…es solo una cuestión de buena memoria.

26. En el arte de insultar una buena voz…

—Ayuda. No soy de decir muchos insultos…pero una linda voz te permite hacer gala de que cualquier cosa suena linda si sabes “usar el órgano de fonación” (risas).

27. Si fueras un producto, tu eslogan sería…

—Tocá, jugá y divertite…aunque a veces me la hacen difícil.

28. Cena a todo lujo con un millonario aburrido o chori en la Costanera con alguien divertido…

—Choripán en la Costanera con alguien que me hacer reír.

29. La probabilidad que una persona que recién te conoce te pregunte sobre Tinelli…

—Es muy alta. Estoy resignadísima. Juro que me aburre mucho.

30. En tu vida romper el mandato social de no casarte ni tener hijos…

—En muchas ocasiones causaba sorpresa y críticas que no quisiera casarme o ser madre y muchos se atrevían a especular con mi sexualidad o el problema que me acarreaba no casarme y sarasa. En verdad durante la década de los 90 y hasta la primera década de los 2000 fue pesado tener que explicarlo, pero luego fue aflojando y hoy es algo tan normal que a nadie se le ocurre ni piensa en especular nada. Juro que me enojaba bastante escuchar pelotudeces de todo tenor.

“No me miro ni me
“No me miro ni me escucho. No me gusta. La vez pasada Arnaldo André me decía que no se miraba porque no le gustaba. Es muy habitual, no es tan raro. No tiene que ver con la vergüenza, sino con decir: “¡Qué desastre!”. Pero después, todo el mundo te dice lo contrario”, aseguró Marcela Feudale en Infobae

31. Hay que volver a mirar a los Próceres de Mayo porque…

—Decime a quiénes deberíamos volver a mirar y te digo por qué sí y por qué no. Existían distintas visiones de lo que había que hacer, ya para entonces. Lo que rescato, es la firme determinación de trazar un camino que nos llevara a la Independencia.

32. Cumplir 40 años de democracia ininterrumpida te genera…

—A pesar de errores y aciertos, porque eso sería un estudio más minucioso y cuidadoso, me llena de orgullo ser parte de una generación que pudo conservar la vida democrática. Voté por primera vez con el retorno de la democracia y lo sigo haciendo desde entonces.

33. Cuando seas grande querés ser…

—Yo en total plenitud, sin inhibiciones ni deudas pendientes. En entera paz con mi vida y mis decisiones.

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