Desde que nació su beba en diciembre, Barby Franco se ocupó con exclusividad del cuidado de Sarah. A pesar de que durante esta última semana la nena tuvo que ser internada producto de una infección urinaria, en el día viernes cumplió 3 meses con el certificado de alta para volver a su casa.
Fueron días intensos y agotadores los que tuvieron que sortear tanto la modelo como su pareja, Fernando Burlando cuando recibieron la noticia de parte del pediatra de su hija que ella debía ser hospitalizada para controlar y tratar la infección que hacía que tuviera una fiebre persistente, de 39,5°.
Preocupados, la pareja no se despegó de la beba y, en un principio, tampoco daban información acerca de lo que esta ocurriendo con su salud. Después, con el correr de los días y con la buena evolución del cuadro de la pequeña, ellos se distendieron un poco y Barby comenzó a subir a sus historias de Instagram cómo estaba atravesando el proceso desde la clínica IADT de la Ciudad de Buenos Aires.
Así fue como un día antes de que le dijeran que Sarah podía volver a su hogar, Barby se dispuso a tomar un poco de aire fresco junto a Burlando en el patio del sanatorio. Desde allí, registró en un video la situación que estaba viviendo. Graciosa, escribió: “Alta salida, ja ja, al patio del sanatorio”.
Durante el video, se podía apreciar una fuente de agua que hay en el lugar, con un gran chorro de agua. En ese instante, se podía observar una cascada de agua que caía sobre una fuente, ubicada en el centro del patio. Mientras ella hacía un movimiento con la cámara de su teléfono mostrando todo el lugar, se lo pudo ver a Burlando sonriendo con el celular en la mano. Y en ese momento, Barby exclamó, muy conmovida: “¡Dale!, ¿es joda? Me apareció la Virgen, ¿la ven?”.
Acto seguido, ella dejó retratada la imagen que estaba viendo, en donde desde adentro del chorro de agua se había formado la figura mística. Cabe recordar que Barby es muy devota de la Virgen Desatanudos y fue a ella a quien se encomendó cuando estuvieron buscando tener un hijo, hasta que llegó Sarah a sus vidas.
La mamá primeriza tuvo que afrontar estos duros momentos, con la incertidumbre y la valentía de ayudar a que su hija se recupere lo más pronto posible. Así fue y la nena, finalmente, pudo curarse y estar de nuevo con ellos en familia.
Ya más tranquila, Barby volvió a ocuparse de su propia salud. Durante la tarde del sábado, junto a Sarah y la niñera, fue a visitar a su dermatóloga y esteticista para mostrarle la cicatriz de la cirugía de cesárea que le quedó tras el nacimiento de su beba.
“Está evolucionando muy bien”, la tranquilizó la Dra. Agustina Buenader, mientras con la cámara del teléfono enfocaba algunas marquitas en la piel. “Podemos hacer un plasma para mejorar un poquito las estrías y de paso la cicatriz, son muy poquitas y están en una etapa en donde podemos estimular el colágeno con plasma y así mejorarlas”.
Barby contó que se está poniendo crema sobre las marcas y se mostró contenta con el procedimiento que le iba a realizar su doctora de confianza. Luego, la modelo dejó registrado todo el momento en el que Buenader le extrajo un poquito de sangre para continuar con el proceso. Finalmente, una vez concluido el trabajo, se fotografió junto a su doctora y a su beba, feliz de la vida.
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