Por una u otra razón, Fede Bal es noticia cada verano. Si no es porque los vecinos lo denuncian por ruidos molestos, es cuando encabeza algún éxito teatral o protagoniza algún escándalo mediático con su pareja. En este 2023 esperó hasta los primeros días de febrero, cuando explotó la bomba de sus infidelidades hacia su novia Sofía Aldrey, con quien mantenía una relación estable desde hacía 3 años. Y que lejos de terminar allí, eso fue apenas la punta de un ovillo del que todavía faltan desentrañar unas cuantas historias.
La historia de amor entre ellos comenzó a fines del 2019. Y un mes antes de arrancar la pandemia, en febrero del 2020, al hijo de Carmen Barbieri y Santiago Bal se le diagnosticó cáncer de colon que tuvo que afrontar con solo 31 años.
En ese momento, su fiel compañía fue Sofía, quien junto a Carmen lo acompañó a los tratamientos de quimioterapia y lo ayudó a modificar sus hábitos de alimentación. Así, Fede adelgazó unos cuantos kilos, empezó a comer más sano y se lo veía feliz al lado de su pareja. Incluso fue ella quien lo instó a hacerse los chequeos correspondientes ante los primeros síntomas de la enfermedad.
Una vez que supieron el diagnóstico, el actor regresó a Buenos Aires y ella apostó a la convivencia. Puso en pausa sus compromisos laborales -es modelo y realiza tutoriales de maquillaje, además de pertenecer a una de las familias más emblemáticas y ricas de Mar del Plata- y se mudó junto al actor para acompañarlo en su tratamiento de radioterapia. “Admiro tu fortaleza ante todas las adversidades de la vida. Esta la vamos a pelear juntos. Te amo”, le escribió Sofía en un romántico posteo por esos días. Atravesaron juntos la enfermedad: él le puso el cuerpo y ella estuvo en todo momento a su lado.
Con el correr de los meses, Fede terminó el proceso de tratamiento contra el cáncer y llegó la primera crisis. El motivo fue una pool party a la que el actor invitó a su amigo El Polaco con uno comprometedores audios que se viralizaron. “Tengo la pileta calentita y hay mujeres”, se escuchaba en la voz de Bal. Esto generó escándalos por todos lados. Al Polaco en su relación con Barby Silenzi, y a él, con Sofía. Sin embargo, en ese momento, Fede rompió el silencio. “El tono del audio es algo que uno no quiere escuchar de su novio, como yo no quisiera escuchar audios de ella, con su amiga, hablando de un chico”, reconoció.
A pesar de la fuerte crisis, ellos siguieron unidos. “No somos una pareja que se permite estar con otras personas, somos sinceros el uno con el otro y felices con todo lo que hacemos. Esto que pasó no me generó ningún problema con ella. Es mi pareja y hablé todo con ella antes de hacer la celebración porque la palabra fiesta no suena bien, parece. Sofía siempre supo todo”, aseguró Fede por entonces, e hizo referencia a su enfermedad. “Pasé un montón de cosas fuertes este año, esto que sale en los medios no es nada que me sorprenda. Hablemos de otras cosas más importantes”, agregó.
Sin embargo, hace unos días se desató un escándalo sin precedentes a raíz de unos chats que difundió Yanina Latorre por LAM (América) en el que se descubrieron las infidelidades del protagonista de Kinky Boots con un sinfín de mujeres, algunas muy conocidas y otras no tanto. Lo cierto es que este hecho desencadenó que Sofía terminara su relación con el actor, no sin antes romperle su inmensa colección de juguetes.
“Ella lo descubrió porque tiene una aplicación en el celular desde el que puede manejar el lavarropas de su casa. Es uno de esos lavarropas modernos. Y entonces vio cómo Fede, cuando se iban las minas de la fiesta, a las 3 de la mañana, prendía el lavarropas y lavaba las sábanas”, contó Yanina. Ante este hecho, Fede se llamó a silencio, pero las que salieron a hablar fueron algunas de las involucradas en las conversaciones por Whatsapp.
Claudia Albertario, la primera señalada
El martes pasado, Yanina Latorre arrancó LAM con un teléfono en la mano. Cuando Ángel De Brito le dio la palabra, la esposa de Diego Latorre comenzó a leer una catarata de chats privados entre Fede Bal y supuestas amantes. La primera que llamó la atención por su grado de exposición fue Claudia Albertario.
“Él le pide una foto, ella le manda una de su cola. Y él le preguntó dónde estaba a lo que ella le respondió: ‘En el auto, en un parking. Me van a violar’. Si bien esta foto que le mandó es de ahora, la relación es de meses; Fede es de relaciones largas. Y todos los chats entre ellos son hot”, comenzó relatando Yanina. Y continuó: “Él le pide la foto y luego ella le manda otra imagen con la leyenda: ‘Ahí hay una mejor de orto’. Bueno, perdón, es el diálogo de ellos”, se disculpó Latorre por el exabrupto.
La actriz -que se hizo famosa por un reconocido comercial de telefonía celular y la frase “Uy ¡cómo estoy!”- está hace tiempo radicada en Miami y algo alejada de los medios. Sin embargo, al ver su nombre otra vez en las primeras planas, salió a dar su versión a través de las redes sociales.
“Desde hace un par de días me veo envuelta en un escándalo mediático, eso no me asusta, pertenezco a este mundo del entretenimiento desde muy chica y no es el primero. Lo que me asusta es la sobreexposición que lleva a sacar conclusiones desde el juzgar. De todas maneras, no tengo nada que ocultar, primero porque soy una mujer adulta, consciente de sus actos, de su vida y de su intimidad. Segundo, porque con Jerónimo, el padre de nuestros dos milagros, nuestros hijos, estamos separados desde hace muchos meses, una separación cordial, llena de amor y entendimiento, porque construimos una familia, que sigue sólida, aunque el amor se haya reinventado para nosotros en una amistad inquebrantable. Nos apoyamos mutuamente en nuestros proyectos, y somos padres presentes y unidos para nuestros hijos”, arrancó diciendo la modelo.
“Yendo al punto del ‘escándalo’, a Fede Bal lo conozco hace muchos años, todos lo saben, nos han visto, somos amigos y nos adoramos… Hay veces que la amistad traspasa esa línea de amor fraternal. Ambos estábamos solos emocionalmente”, continuó, admitiendo que sí pasaron cosas entre ellos.
La modelo justificó los intercambios por mensaje de texto entre ella y Fede Bal: “Lamentablemente se filtraron unos chats privados, que sacados de contexto pueden dar a entender otra cosa, no porque no haya existido una situación entre dos adultos que se conocen mucho, sino porque también en esos mismos chats hay consejos de dos amigos que le dice uno al otro que intente o que luche por sus relaciones terminadas si aún hay amor”, escribió.
Para concluir, Albertario cerró: “No hay nada más liberador y certero que contar mi verdad. La comparto por respeto a mis hijos, a mi exesposo, a mi amigo, y a mí: una mujer adulta, libre y dueña de sus actos y con la plena convicción de que juzgar nos hace esclavos de no conocer la verdad”.
Estefi Berardi, la involucrada que sorprendió a todos
Luego de que Yanina Latorre comenzara a leer algunos de los chats que hablaban de las infidelidades de Fede Bal, la periodista Marcela Tauro dejó trascender en Intrusos que Estefi Berardi sería otra de las mujeres en la vida sexual del actor. De inmediato, la panelista de LAM salió al cruce con un comunicado en su cuenta de Instagram, en el que dejaba en claro que iniciaría acciones legales a los que difundieran “supuestos chats” que ella habría mantenido con el actor, aduciendo que eran falsos.
Ante estas amenazas, ese mismo día en el programa de Ángel De Brito, Yanina Latorre la confrontó en vivo. “Vos con esto te autoincriminaste, porque amenazás con supuestos chats y si son supuestos, ¿a quién vas a demandar?”, le preguntó punzante. Y continuó: “El que nada hace, nada teme, si vos desde tu casa amenazás con un juicio a Marcela Tauro o a quien diga que habría supuestos chats entre vos y Fede Bal, te autoincriminás porque la que tengo los chats soy yo y yo nunca iba a mostrar un chat tuyo. Porque soy buena compañera y tengo códigos, yo no vendo a mis compañeras. Y mis chats no son truchos ni supuestos, ayer estabas muy nerviosa y la gente veía tu cara”.
Ante los argumentos de su compañera, Estefi aclaró que el gesto en su cara se debió a que le dolían mucho los brackets que se acababa de poner en la boca y en segundo lugar porque le incomodaba el tema que no sabía que se iba a tocar. “Me pareció incómodo por Carmen pero también por Fede”, reconoció.
Pero Yanina volvió a arremeter. “Actuás como una cagona, te atajás y quedás mal porque yo, que tengo los chats, nunca los hubiera mostrado, pero dejá de mentir, Estefi. Los chats tuyos los tengo y no los voy a mostrar”.
Sin embargo, al día siguiente, en Intrusos, el ciclo de América, la periodista Maite Peñoñori contó detalles de otro encuentro sexual que habrían tenido Estefi Berardi y Fede Bal. Así, la panelista sumó más información al escándalo mediático y contó que, al parecer, Estefi y Fede habrían tenido relaciones durante el último fin de semana en Carlos Paz en la casa de Carmen Barbieri. También mostró en cámara una captura de un supuesto chat entre ellos en el que se podía leer por parte de Fede: “En un momento te agarré del pelito y tu cara de placer, Estefi, me la quiero tatuar en el pecho”. A lo que ella responde con complicidad junto a un emoji de enamorada: “Jaja viste”.
Anahí Sánchez, la modelo paraguaya que puso en privado su cuenta de Instagram
De acuerdo a la información que brindaron en LAM, otra de las supuestas amantes de Fede Bal sería Anahí Sánchez, una joven oriunda de Paraguay y una celebridad en dicho país. Todo parece haber comenzado cuando la bailarina coincidió con el protagonista de Kinky Boots en un viaje a Brasil. De ese encuentro aparecieron los mensajes que Yanina Latorre leyó en el ciclo de espectáculos de América y que desataron el escándalo.
La panelista difundió un chat muy particular en el que el actor le hizo una promesa a la modelo: “Me pongo soltero y lo primero que hago es un tattoo en el pito que diga ‘Anahí Forever’”.
Sánchez es entrenadora de fitness, estuvo en una relación con el representante de futbolistas Regis Márquez, y entre la farándula de su país se la considera “la China Suárez guaraní”.
Apenas se difundió la conversación que la involucra con el actor, la modelo puso su cuenta de Instagram en función privada y limitó a sus seguidores, ya que ella está casada y tiene hijos.
Gina Casinelli, la periodista cordobesa que llevó a pasear en helicóptero a Fede Bal
Gina Casinelli es la modelo y conductora oriunda de la provincia de Córdoba que le realizó una nota fuera de lo común a Fede Bal: bajando de un helicóptero.
Según contó la panelista de LAM, en aquel momento, Sofía le había propuesto a su entonces novio acompañarlo a dicha nota pero él le había pedido que no fuera con una excusa de trabajo. “El verdadero motivo era que estaba coqueteando con la notera y prefería estar sin su pareja cerca”, reveló Latorre al aire.
Gina también es traductora de inglés y fue parte del elenco del programa Resto Del Mundo junto a Fede Bal en el episodio en el que mostraron Córdoba. De hecho, la joven tiene en su perfil de redes sociales un video de ellos de aquel día.
Sol Báez, la “segunda” novia de Fede Bal
Con Solange Báez, se conocieron un poco antes de la pandemia. Si bien nunca fueron novios formales, ella, que fue bailarina de El Polaco en Bailando por un sueño, se mantuvo muy cerca del actor aunque en ese momento no blanqueaban su relación. Cuando Fede se enfermó, ella también lo acompañó afectivamente y, en las primeras salidas permitidas que tuvo el actor durante la cuarentena, terminó reconociéndole a su novia que se había visto con la bailarina.
Sin embargo, Sol se enamoró. Y para poder poner distancia, porque él estaba de novio con Sofía, se fue a vivir a Estados Unidos. Desde Miami, continuaron el vínculo a la distancia. Hasta que el año pasado Federico viajó para su cumpleaños y pasó diez días con ella.
Sin embargo, Fede nunca dejó a Sofía, ni a las otras supuestas amantes. Cuando Sol se enteró que además de ser “la segunda” en la vida del actor, él también salía con otras mujeres, se angustió tanto que tuvo que empezar terapia psicológica.
“Lo que para muchos es solo un hombre mujeriego, a mí me significó años de terapia”, sostuvo la bailarina en sus historias de Instagram. “No me victimizo en absoluto –agregó-. Es lo que me tocó vivir y de lo que me haré cargo siempre”, enfatizó en la red social en la que tiene casi 200 mil seguidores.
El lunes pasado, la bailarina se levantó dispuesta a dejarlo. Y así lo hizo, por Whatsapp. Entonces, él le escribió por Instagram, un último mensaje: “Realmente lo que menos quiero es que vos te sientas mal, Siempre me demostraste lo mina hermosa que sos. No entiendo a qué te referis cuando decís que nunca tuviste nada conmigo. Estuve mucho en pareja, con dos novias. Créeme que las conversaciones que tuvimos solo las tuve con vos. Igual tranquila, este año voy a viajar mucho. Esto muy mal con Sofía y mañana viajo a Carlos Paz y seguramente me separe. Por eso, el timing que elegiste me sorprende. Te adoro Sol y siempre lo voy a hacer”.
Así están las cosas al cierre de esta nota. Porque los chats siguen apareciendo y el listado de nombres -de las que se hacen cargo y las que no- puede ampliarse en cualquier momento. Mientras tanto, el protagonista de esta historia permanece en Carlos Paz, dándole vida a Lola en Kinky Boots y sin hablar públicamente del asunto. ¿Tendrá algo para decir?
Seguir leyendo: