“Muy pero muy contento, feliz”, fue lo primero que le dijo Agustín Frodo Guardis a Santiago del Moro al presentarse en El Debate de Gran Hermano 2022 (Telefe) tras su eliminación del juego, concretada el último domingo. “Por mi parte, traté de jugar, plantear esa tercera etapa que le había contado a la gente, que la logré con creces. Y de eso estoy orgulloso y es lo que más me pone contento. Traté de jugar para llegar lo más lejos posible. Estuve un poco más de un mes más, que es un montonazo”, agregó después refiriéndose a su vuelta a la casa vía repechaje tras la primera eliminación.
“Si lo hubieras concretado, hubieras ganado”, le apuntó el conductor. “No, la concreté con creces. La tercera etapa no consistía en ganar o llegar a la final. Era marcar un antes y un después en la historia de Gran Hermano, hacer algo diferente, hacer algo nuevo, ampliar la biblia de Gran Hermano”, agregó sobre su juego, mientras en el estudio se escucharon unas risas por lo que estaba diciendo Frodo.
“Creo que hice algo y con la ayuda de la gente lo pudimos lograr juntos. Esto es algo que no se hizo en ningún momento y en ningún lugar en la historia de Gran Hermano a nivel mundial. Era plantar una salida y un reingreso, buscar información afuera, y usar las redes sociales, que son las nuevas tecnologías, para dejar mensajes encriptados a la gente y seguir comunicándonos desde afuera. Eso es algo que no se hizo nunca y se hizo realidad gracias a todo el apoyo que me dieron”, siguió explicando sobre su particular forma de juego.
En cuanto a unirse al juego de Lucila La Tora Villar y Daniela Celis, las otras reingresadas a través del repechaje, contó: “Yo empecé a tratar de jugar con ellas a ver si podíamos llegar lo más lejos posible. La Tora respondió y estábamos tratando de elucubrar cosas juntos y nos empezó a salir. Dani estaba un poco anárquica en su venganza y traté de convencerla de empezar a jugar juntos. Fue un poco tarde, porque no estaban convencidas ningunas de las dos para hacerlo”.
Respecto a que Marcos Ginocchio lloró luego de su eliminación, dijo: “Me emociona mucho, habla de la amistad que tenemos, del vínculo que generamos adentro. Quiero que se reponga. Le dije que lo amaba, que no se preocupe, que siga adelante. Tiene muchas chances de llegar a la final”.
Desde el panel, Gastón Trezeguet elogió un aspecto del juego de Agustín. “Lograste algo muy importante que no se había visto hasta el momento, que es salir y que te volviste a ganar al público. La Frodoneta creció un montón. Lo que sí, yo hubiera sido diferente en el juego, al ver que no era aceptado”, le dijo. Y el ex hermanito le respondió reiterando su idea: “Era un juego fuerte del que nos gusta a nosotros, pero quizás podría llegar a condenarme. Volví a jugar fuerte porque traté de llevar mi estrategia adelante de igual manera, de no traicionarme a mi mismo, y hacer algo nuevo en Gran Hermano, algo nunca visto. Mi meta era marcar un antes y un después”.
Esta respuesta sacó de quicio a Ceferino Reato. “No entiendo toda esa grandilocuencia de ‘un antes y un después’, de los mensajes encriptados... ¿Qué mensajes encriptados dejaste?”, le apuntó. “Abrir un vivo pensando que estaba adentro con un celular, dejando mensajes semana a semana con lo que iba pasando... Eran cosas que iban dirigidas a mi público, a quienes iban sumándose a mi juego o les iba a gustando. Me encantó llegar acá sabiendo que lo que hice, lo pude hacer. Me divertí muchísimo haciéndolo. Y sé que a mucha gente le gustó”, respondió con su sonrisa intocable.
“Quería ganar, pero venía por añadidura. Era algo que podía pasar o no. No entré a Gran Hermano para querer ganarlo: lo dije en el casting, era para tratar de hacer algo diferente, de entregarle algo nuevo”, repitió. “Hiciste algo nuevo, porque nunca vi una cosa igual”, cerró Del Moro y las risas volvieron a multiplicarse en el estudio.
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