En la mañana de este miércoles el mundo supo de la muerte de la enorme cantante brasileña Gal Costa. Tenía 77 años de edad y en los últimos meses debió cancelar presentaciones por su estado de salud luego de ser sometida a una cirugía para retirar un nódulo en la fosa nasal derecha. Información demasiado dura para la sensibilidad de Maria da Graça Costa Penna Burgos -tal su verdadero nombre- que había nacido en Salvador de Bahía en septiembre de 1945 y fue una de las máximas estrellas de la llamada Música Popular Brasileña (MPB),
De inmediato, las redes sociales se inundaron para transmitir las condolencia de un país. Desde el flamante presidente electo Luiz Lula Da Silva, hasta colegas de hoy y de siempre como Gilberto Gil o Marisa Monte y miles de anónimos de su tierra y de todo el mundo que disfrutaron en su voz de gemas como “Aquarela do Brasil”, “Nada mais”, “Sorte” y “Lua de mel”.
Sin embargo, lo que se destacó en el universo virtual fue el posteo oficial de la cuenta de la artista, publicado a las 8.59, horas antes de conocerse su muerte. “Mi amor, me traes suerte”, se puede leer, entre dos tréboles de cuatro hojas, en la publicación realizada desde el perfil de Gal en alusión a Caetano Veloso. Al pie, como elemento informativo, se presentaba un video de un concierto como tantos: “Gal Costa y Caetano Veloso cantan ‘Sorte’, de Ronaldo Bastos y Celso Fonseca, en Programa Chico e Caetano, en 1986″.
A continuación, como habían anunciado las palabras, llegaron las imágenes. Los dos bahianos interpretan un fragmento de la canción con admiración mutua, con esa química que transmitían en escena. Esa que se cimentaba en las bases sólidas del tropicalismo de los alocados ‘60 y que se mantuvo inalterable hasta las últimas horas, aunque más no sea en el universo virtual.
Acaso sin palabras, embargado por la emoción, incrédulo ante lo inesperado, el autor de “Sampa” reaccionó con dos emojis: un dedo señalando a un corazón. Es que desde Bahía hicieron su camino desde muy pequeños. Junto a él debutó en 1964, en el espectáculo Nós, Por Exemplo, del que formaban parte también Maria Bethânia, Tom Zé, Gilberto Gil
Su primer álbum se publicó en 1967, Domingo, también con Caetano, incluyendo uno de sus mayores éxitos “Coração Vagabundo”. Y al año siguiente participó en el álbum Tropicália ou Panis et Circencis, uno de los más importantes de la historia de la música brasileña. Su primer álbum en solitario fue en 1969, con el mismo nombre, con éxitos como “Não Identificado” y “Que Pena”. Ese mismo año grabó su segundo álbum en solitario, Gal, con éxitos como “Meu nome é Gal” y “Cinema Olympia” iniciando un camino en paralelo con innumerables reencuentros, arriba y abajo de el escenario.
Uno de ellos, en este caso televisado, volvió a circular al conocerse su fallecimiento. Ocurrió hace unos años en Altas horas, cuando Veloso, en el rol de invitado, reconoció todo lo que amaba escuchar a Gal. Sus elogios fueron interrumpidos fue la presencia de la artista, que de sorpresa ingresa al estudio para interpretar “Força estranha”, con su inconfundible estilo y probado profesionalismo hasta que lo mira y la emoción puede más. Toda una pintura de una relación que no necesitó palabras ni gestos ampuloso, cimentada en esas fuerzas que de tan extrañas se vuelven inexplicables.
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