“No solo no hubiéramos sido nada sin ustedes sino con toda la gente que estuvo a nuestro alrededor, desde el comienzo. Algunos siguen hasta hoy. ¡Gracias... totales!”. Con esas palabras Gustavo Cerati le ponía fin al último concierto de Soda Stereo, que se retiró a lo grande: más de 60 mil personas colmaron el estadio de River la noche del 20 de septiembre de 1997.
Este lunes, Coldplay volvió a sorprender a miles de argentinos en cada una de sus fechas y la novena no fue la excepción. Lejos de sus shows de luces, las increíbles pulseras o la voz de Chris Martin, esta vez todas las miradas estuvieron en los invitados: Zeta Bosio y Charly Alberti.
Los ex Soda Stereo se subieron al escenario para interpretar Persiana Americana y de Música Ligera luego se sumaron a otro de los himnos de la banda británica, Yellow. Tal como se acostumbra, el tema estuvo cargado de emoción, ya que esta vez el cantante de Coldplay decidió dedicárselo a Gustavo Cerati.
“Para todos los amigos que perdimos, para todos aquellos que ya no están”, dijo Martin en inglés mientras señalaba al cielo, y agregó en castellano: “No sé la palabra en español”. Enseguida Zeta le susurró al oído cómo sería la frase y este le dio el micrófono. “Para los que ya no están”, afirmó el bajista.
Un día después de semejante performance que disfrutaron miles de espectadores en el estadio Monumental, este martes se viralizó una imagen de Chris Martin, líder de la banda británica, donde queda al descubierto el nuevo tatuaje que se hizo el cantante. El hombre que cautivo a todos los argentinos se tatuó la icónica frase de Gustavo Cerati y Soda Stereo en su brazo derecho.
Desde la cuenta Coldplay Argentina se replicó la foto publicada por el Instagram de Zina_Samoletova, la encargada de realizar el tatuaje. La misma tenía la siguiente descripción: “Was very speasial client today. In a very special place” (Fue un cliente muy especial hoy. En un lugar muy especial) y agregó: “He asked me to do all freehand” (Me pidió que hiciera todo a mano alzada).
A lo largo de su carrera, el cantante ha dejado grabados acontecimientos, emociones y pasiones en su piel en forma de tatuajes. Las muñecas de Chris Martin son la parte de su cuerpo reservada a sus dos hijos, Apple, de 18 años, y Moses, de 16. En el interior de la derecha tiene tatuada un M y en el de la izquierda, una A, las iniciales de sus nombres.
Hasta que se divorció de la actriz Gwyneth Paltrow, una pequeña G se podía descubrir en su tríceps derecho. Sin embargo, cuando la historia de amor se terminó, el músico decidió hacerla desaparecer dibujando un corazón sobre ella. Desde 2017 una relación sentimental con Dakota Johnson que formalizaron al año de empezar haciéndose el mismo tatuaje, el símbolo del infinito en color rojo. Ella lo lleva bajo el codo izquierdo y él, en el antebrazo derecho.
“Tengo un tatuaje en el brazo, porque esta persona es mi héroe... No puedo creer que lleguemos a decirlo, pero denle la bienvenida al señor Bruce Springsteen”. Así presentó Martin al mítico cantante estadounidense en un concierto celebrado el pasado mayo en Nueva York. El tatuaje del que habla está en su brazo izquierdo y son tres líneas de su canción Working on a Dream.
Seguir leyendo: