“Creo que la gente me sacó, más que nada, porque cuando entré a la casa sabía que corría el riesgo de que si jugaba totalmente con mi personaje, la gente mayor quizás no lo iba a entenderlo y me iba a jugar en contra. Pero no me arrepiento cómo jugué”, fue lo primero que dijo Tomás Holder en la gala de Gran Hermano 2022 (Telefe) después de su eliminación, la primera en este ciclo.
En un mano a mano con Santiago del Moro, el primer caído dejó en el camino algunas capas del personaje que montón para intentar ganar el reality show. “Siempre supe que era un juego la casa de Gran Hermano y entré a eso”, dijo una y otra vez en el diálogo. “¿Quién sos vos?”, quiso saber el conductor. “Sacando el personaje y las redes sociales, en mi vida personal soy un chico súper compañero, amiguero, me encanta la familia, soy noviero mal. Nada que ver lo que es el personaje”, se autodefinió Holder.
El rosarino aseguró que lo suyo “fue todo estrategia” y que se confió en que su personaje gustó. “Es un personaje lindo, querido, capaz que lo entienden. Pero no se dio así y pasó lo que pasó”, dijo sobre su prematura eliminación, la cual él se vio venir “cuando a Marcos lo sacaron de la placa”.
Por otro lado, Tomás consideró que la decisión de Martina para salvar a Alfa le pareció “una estrategia excelente, una jugada maravillosa. No creo que se haya equivocado y creo que fue lo mejor para el grupo”, dijo en relación a “los monitos”, el cuarteto que consolidó junto a la profesora de educación física, Juan y Nacho.
“Pienso en tu historia, un pibe de Rosario al que lo crió su mamá solita, muy humilde tu vieja. ¿Por qué no te agarraste de tu historia para el juego, con muchas carencias?”, le planteó del Moro. “Siempre estuve muy pegado a mamá, que me tuvo siendo muy chica, cuando tenía 19 años. Creció prácticamente conmigo. Pero no quería pegarme a mi historia para dar lástima, nunca fue mi intención: quería entrar, jugar y divertirme. Siento que mucha gente que entra con esta historia de dar lástima y todo, pero es un juego. Sentía que quería jugar fuerte”, se justificó Holder.
Luego, el conductor le mostró cómo fueron las nominaciones que lo llevaron a la placa y no pareció sorprenderse. “Quizás de Daniela no me lo esperaba, porque siempre me venía a hablar y todo. De los otros sí me lo esperaba. Era un juego”, dijo Tomás.
Luego, Holder se enfrentó al panel de analistas de GH, integrado por Laura Ubfal, Nancy Pazos, Ceferino Reato, Gastón Trezeguet, Nati Jota y Sol Pérez, y dejó algunas definiciones: “Me identifico con Nacho”; “Siento que Juan hablaba mucho pero jugaba poco”; “La persona más fuerte de la casa es Martina, le tengo mucha fe”; “Es un juego, en la vida real soy un buen pibe. Tienen que entender eso, Gran Hermano es un juego fuera de la vida real, distinto a lo que se ve en las redes”.
Trezeguet, sin embargo, lo contradijo al decir que fue eliminado porque “la gente piensa que sos soberbio, altanero”. Y la respuesta de Holder fue tajante: “La gente que votó en mi contra y me sacó de la casa no me influye en nada”.
Un rato después mostró su costado más vulnerable al hablar de sus padres. Primero sobre el vínculo con su papá. “Es una relación difícil. Mi viejo también es joven. Chocamos bastante, a veces pasan meses en los que no hablamos, a veces cuesta hablar con él. A mi viejo le hubiese gustado estar en este juego. Hizo varios castings y nunca quedó. Me llamó para darme consejos y le dije: ‘Papá, yo no necesito ningún consejo tuyo’. También me dijo: ‘Tratá de no pasar vergüenza’”, contó entre risas.
Y se le cayeron algunas lágrimas al recordar una internación que sufrió su madre en el 2020. “Eso me partió. Me acuerdo que la agarré de la mano, le dije que la amaba, y que no me falte nunca. Mi vieja es mi cable a tierra, en todo sentido”, contó quebrado. “Mis viejos me tuvieron de muy chicos y uno nunca aprende a ser padre, lo va viviendo a medida que pasan los años. No tengo ningún reproche, pero me hubiese gustado que sea diferente la familia”, cerró.
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