Mientras Yanina Latorre continúa de vacaciones, su lugar en LAM es ocupado por diferentes panelistas. La semana pasada estuvo Lía Salgado y a partir de este lunes, la producción resolvió invitar a una columnista por día. La que abrió la semana fue Ernestina Pais, coincidiendo con el cumpleaños de Nazarena Vélez. Y luego de un video en el que los familiares le enviaban a la actriz los saludos de rigor, una pregunta del conductor Ángel de Brito disparó una situación incómoda e inesperada.
“¿Vos cómo andás con tu hermana, que siempre anduvieron medio a los tiros? ¿Bien?”, apuntó en dirección a Ernestina y en referencia a Federica. “Bien... ¡Qué pregunta de golpe!”, respondió la invitada visiblemente sorprendida. Y luego de ironizar por un momento, se puso seria: “Somos muy diferentes No es un punto de pelea o enfrentamiento, sino en la forma en que enfrentamos la vida”.
Luego de contar que se llevan tres años y medio de edad -Federica es la mayor-, se remontó a su infancia y a un hecho que las marcó para siempre. “Tenemos una historia muy dramática que cada una la vivió de manera diferente. Las tragedias son muy fuertes en una familia y no se pasan fácilmente. Cuando hay una tragedia de por medio no hay que subestimar la relación de hermanos”, agregó, en referencia a la desaparición de su padre, José Miguel Pais, durante la última dictadura miliar.
“¿Sentís que es la tragedia lo que las separó, o las consecuencias? Me acordé de cuando hicieron un programa juntas”, indagó De Brito en referencia a Sabés o sonás, el ciclo que compartieron en 2003. “Por eso para mí es raro que me pregunten ‘cómo te llevás’. Hicimos un programa juntas... Sí siento que una tragedia en una familia, como es la desaparición de un padre, claramente a veces te pone en diferentes lugares de cómo reaccionás ante esa tragedia”, contestó Ernestina.
En ese punto, Fernanda Iglesias, otra de las angelitas, hizo mención a un mito sobre una supuesta pelea entre las hermanas. “Vuelvo a preguntar lo mismo. ¿Cuántos de ustedes trabajaron con sus hermanos? Trabajé con mi hermana, lo que significa que no estábamos peleadas. Me divertí un montón, hicimos un gran programa. De golpe me tengo que fumar que opinen de una situación con ella. Cero tensión. No voy a opinar de mi hermana”, respondió ya más enojada y no volvió a tratarse el tema. En cambio, minutos después cuando debatían otras cuestiones, el conductor la notó conmovida. “¿Te quedaste mal, Ernestina?”. “No” alcanzó a responder, acompañando la negación con la cabeza y conmovida hasta las lágrimas.
El programa siguió con su rutina, con escasa participación de la invitada, que volvió a tomar la palabra hacia la despedida, cuando el conductor señaló que su participación era solo por un día. “Prometo no venir más”, expresó con humor, y Ángel estuvo de acuerdo: “Nunca más, es una promesa mutua que nos hacemos. Nos vamos a ver en los bares pero no en este programa”, cerró en buenos términos.
Horas después, y más tranquila con el paso del tiempo, la conductora habló en sus redes sociales sobre su participación en el ciclo de América. “Quedé súper conmocionada de ayer. Me levanté y me encontré con un montón de mensajes de amigos solidarizándose y de gente que sentía empatía por mi emoción de anoche en LAM y no quiero que se interpreten cosas que no son”, señaló en un video casero y relajado en el que dio su versión de los hechos.
“Yo creo que estaban más asombrados por descubrir que soy sensible finalmente, cosa que no se a ustedes pero a mí en pandemia me empezó a pasar mucho de cómo dejar salir los sentimientos, y estar un poco más libre, de mostrarme cómo soy. Soy una persona súper hipersensible y súper llorona”, admitió en su monólogo. Y continuó refiriéndose puntualmente a lo que ocurrió en el piso de LAM:
“Ayer cuando me preguntaron sobre mi familia, es cierto que me descolocó la pregunta porque yo no suelo hablar de esas cuestiones en general, cuando mi trabajo siempre paso por la actualidad o por el humor. Pero no es que yo me enojé o paso algo necesariamente malo, llorar no es necesariamente malo, yo me emocioné porque se me vino toda mi infancia a la cabeza”, aseguró.
Por último, se refirió al paso de comedia del cierre: “La broma de yo ‘no vengo más’, o lo que sea, fue una chicana con Ángel porque como lloré la mitad del programa, fue como ‘bueno la pasaste como el ojete’. Pero no, ya no me asusto de mostrar mis sentimientos, y no me asusta decir que con tal persona, o con tal otra, puedo tener una relación distinta”, concluyó, y agradeció al ciclo y al conductor por el apoyo que le brindó durante la pandemia por el cierre de su restaurante. Por su parte, De Brito también se refirió en las redes al incidente: “Se angustió y después se recompuso. Final feliz”, escribió ante la consulta de un seguidor. Y replicó las historias de Ernestina para demostrar que no había problemas entre ellos.
SEGUIR LEYENDO: