“Grave accidente de El Pepo: volcó con su camioneta, murieron dos acompañantes y quedó imputado por doble homicidio”, titulaban los sitios de noticias el sábado 20 de julio del 2019. El músico chocó cuando se dirigía a Villa Gesell para un recital y fallecieron Nicolás Carabajal, trompetista de la banda, e Ignacio Abosaleh, asistente de Rubén Castiñeiras, como se llama en realidad al cantante. A tres años del incidente, la familia de las víctimas aún espera Justicia.
A mediados de mayo en una nueva audiencia la jueza Correccional 3 de Dolores, Analía Pepi rechazó la solicitud para que le se revocara el pedido de salidas laborales que realizó el músico acusado de “doble homicidio culposo”, hecho por el cual se encuentra cumpliendo prisión domiciliaria, por lo que actualmente él sale de su casa lunes, miércoles y viernes durante tres horas por trabajo. Mientras tanto, la causa se encuentra a la espera del juicio oral. “Estamos reclamando que se fije fecha”, dijo Marcelo Biondi a Teleshow, abogado de las víctimas.
Consultado sobre cuál es el argumento por el cual aún no se fijó el inicio del juicio, dijo que no lo hay y contundente, agregó: “La jueza ahora pidió a la oficina de sorteos de la Cámara que fije fecha de juicio. Es una incompetente que no le interesa el caso”.
“Sigue con domiciliaria. Pero esta cantando y sale de la casa, con los controles y no sabemos cuándo tenemos fecha de juicio. Si sigue así va a cumplir la condena con la domicilia y se ríen de nosotros, él y toda la Justicia. Nosotros seguimos con todos los abogados en lo penal, civil y laboral, pero queremos que vaya a la cárcel. Es muy duro y muy injusto”, dijo Patricia Achu, mamá de Nacho quien desde hacía tres años y medio trabajaba como chofer y asistente para Castiñeiras, pero que esa noche no manejaba.
Ignacio, que había sido bombero voluntario, era papá de Ian, hoy de 10. “Él es hermoso, el vivo retrato de su papá. Le mostré fotos de su papá chiquitio y me dijo que eran iguales, va creciendo y se parece cada vez más. Tiene la personalidad fuerte que tenía mi hijo, se enoja como él, come las mismas cosas, dejó de comer cosas que comía con su papá, lo dejó guardado en su corazón”, había contado su mamá el año pasado a este sitio.
Nicolás era uno de los músicos de la banda Peposa. El trompetista era papá de Alma, de un año y medio en ese entonces y estaba esperando a Mateo, que nació dos meses después de su partida. Romina, su esposa se mostró desilusionada: “El pedido de Justicia sigue ahí en la nada, yo ya perdí las esperanzas, en este país la seguridad vial es una vergüenza no está en ninguna agenda política. Seguimos sin fecha de juicio, nada avanzo, el homicida vial goza de salidas laborales, además de todas las salidas por médicos que tiene, que son muchísimas, todo dudoso nadie controla nada”.
“A Nico lo extraño todos los días”, agregó a tres años de haber recibido la peor noticias y siguió: “Duele como el primer día, Alma pregunta mucho por el, recuerda todo lo que hacían juntos, le cuenta muchas anécdotas a su hermano y Mateo es muy igual a Nico físicamente y en muchas otras cosas. Ellos dos obviamente son mi motor. Son muy unidos entre ellos”.
El 9 de abril pasado las familias de Nacho y Nico pintaron dos estrellas amarillas en su honor en el lugar onde ocurrió el choque. La idea surgió de Viviam Perrone, representante de Madres del Dolor, quien hace 19 años perdió a su hijo Kevin en un incidente vial. “Cuando ella hizo la propuesta aún era muy pronto, no nos sentíamos bien para hacerlo y hoy que pasó el tiempo, nos gustó la idea. Capaz mueve un poco el tema del juicio”, había contado la esposa del trompetista.
A mediados de mayo se le volvió a otorgar a Casiñeiras el permiso para salidas laborales. Días antes la solicitud se le había revocado y entre las pruebas que Marcelo Biondi presentó en ese momento para el rechazo, había un informe detallado en el que mostraba con fecha y horario los momentos en los que el acusado no habría contestado las llamadas de monitoreo luego de que saltara el “alerta fuera de rango”.
Aunque la mayoría eran fechas sueltas, en la lista detallada hay un período de una semana (desde el 7 al 13 de enero del 2021) en el que esto habría ocurrido. El documento presentado a la Justicia realizado por el Servicio Penitenciario e incorporado a la causa hacía alusión también a tres momentos en los que se registró “corte o apertura de tobillera”: en junio y octubre del 2020 y abril del 2021, los tres episodios se normalizaron el mismo día.
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