El juego es simple, pero dificultoso a la vez. Es que, para ganarse el auto eléctrico 0 Km que se promociona en La Noche del Domingo, es necesario embocar un avioncito de papel por la ventanilla entreabierta del vehículo. Y la realidad es que el desafío resulta mucho más complicado de lo que parece a simple vista. Sin embargo, en esta oportunidad fue una mujer, que casualmente trabaja como comisario de abordo, la que logró quedarse con el premio.
Al presentar a Romina Bonanno, que había llegado al estudio con su traje de azafata, Mariano Iúdica se sorprendió. “¿Usted es la que le salvó la vida a un pasajero haciéndole RCP arriba del avión?”, le preguntó el conductor haciendo referencia a la maniobra de reanimación cardiopulmonar. Y la participante, con una sonrisa plena, respondió: ”Exactamente”. En ese momento, todos los presentes en el estudio le brindaron un aplauso. Y, después, la mujer contó algunos detalles de ese episodio.
“Fue en un vuelo al exterior. Viajábamos a Miami y la persona se descompensó. Yo no lo dudé y le apliqué RCP arriba del avión. Y así lo pude salvar”, explicó Romina. Y luego contó que se trataba de un hombre de unos “cuarenta y algo” de años que, según le indicó después, había tenido ese problema de salud “por un cambio de pastillas que hizo”. Pero, por suerte, la historia terminó bien gracias a su rápido accionar.
Después de su relato, la participante oriunda de Vicente López se dispuso a hacer planear su avioncito para probar suerte en la competencia. “Usted lo mete y se lo lleva”, le dijo Iúdica para alentarla. Y preguntó si el auto no estaba un poco más lejos que la semana pasada, a lo que le respondieron en forma negativa. Antes y fuera de concurso, uno de los productores del ciclo, José Barrientos, había logrado el objetivo. Pero, hasta ahora, nadie había podido alzarse con el premio.
Sin embargo, después de observar la técnica del colaborador del programa que produce Gustavo Sofovich, Romina pudo embocar el avioncito en el primer intento. Y dejó a todos los presentes atónitos. “¡Se lo llevó!”, empezó a gritar el conductor mientras la participante festejaba a los saltos y el estudio se inundaba de papelitos plateados.
“Tenía razón Martita, mi psicóloga, hoy es una noche especial”, dijo entonces Mariano, recordando el vaticinio de su terapeuta. Enseguida, Romina se subió al vehículo emocionada. “Por favor, me vuelvo loco”, siguió el conductor mientras pedía la repetición del momento en el que el avioncito ingresaba por la ventanilla del coche. Y concluyó: “Esto es genial, porque hay un montón de juegos en la tele en los que vos podés sospechar, pero acá tenés que meter el avión y no tiene mayor misterio. ¡No lo puedo creer!”.
Cabe recordar que la semana pasada, había participado de este segmento Ramiro Bueno, el hijo del recordado Potro Rodrigo. Y, aunque no había tenido suerte en la competencia, había conmovido a todos al recordar a su padre y cantar algunas estrofas de sus hits más resonados. Aunque también aprovechó para hacer escuchar uno de sus temas de hip hop y señalar: “Siempre quise hacer la mía, hacer mis cosas. Muy autogestionado”,
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