Amalia Granata contó que vivió una difícil situación dentro del quirófano, en donde le realizaron una intervención para removerle un granuloma. “Me dijeron que era fácil de sacar, pero bueno... Yo ya le conté ya le conté al médico que cuando me habían dado anestesia por una muela me había descompuesto, por lo que, por suerte, me dijo de hacerlo en un sanatorio y no en el consultorio”, contó en Polino Auténtico, el programa de Marcelo Polino por Radio Mitre en el que la periodista se destaca como columnista.
Si bien el procedimiento parecía simple, por lo que le habían dicho los profesionales, la diputada provincial por Santa Fe contó que tuvo una complicación y que vivió un momento angustiante cuando aún estaba bajo los efectos de la anestesia. “Me hice todos los análisis prequirurgicos y me salió todo bien”, aclaró e intentó resumir: “En síntesis, cuando terminó la intervención no me podían despertar”.
Ella, todavía anestesiada, aseguró que escuchaba todo lo que sucedía. “Y yo les digo que sí escuchaba todo lo que estaba pasando, sentía los cachetazos que me daban, las corridas, pero no me podía despertar y no podía respirar. Me ponían la máscara con oxígeno y yo les quería decir que era peor pero no podía...”, relató Granata.
Luego de varios intentos de los profesionales que la atendieron, la periodista se despertó y rompió en llanto, aún dentro del quirófano. “En un momento me sentí tan mal, tenía el cuerpo helado, no podía respirar así que le dije a Dios: ‘llevame o salvame’. De repente, pude empezar a balbucear y lloré mucho”, contó, visiblemente conmovida por la situación.
“Me dijeron que me pasó esto porque tengo mucho estrés”, continuó y contó las consecuencias y miedos que tuvo cuando regresó a su hogar. “Cuando me fui a mi casa no me quería dormir porque tenía miedo de no despertarme”, admitió.
Por su parte, Amalia Granata dijo que esa no había sido la primera vez que un cuadro de estrés le había hecho un efecto adverso, pero que no había querido revelarlo. “Lo qué pasa es que yo no lo quise contar antes, pero en el verano ya me había venido una semana antes de vacaciones porque un día sentí que no podía respirar, pensé que tenía covid pero no, me dieron un ansiolítico, así que es estrés”, reveló sobre el episodio que vivió hace unos meses y por el cual debió ser atendida por médicos.
En tanto, aprovechó la oportunidad para comunicar que se tomaría unos días de licencia para descansar. “Por lo que pido perdón porque se que tengo un compromiso con el pueblo pero me voy a tomar cuatro días para descansar por una cuestión de salud”, dijo el sábado en Polino Auténtico.
En mayo, Amalia Granata había contado que acompañó a su hija Uma -fruto de su relación anterior con Cristian El Ogro Fabbiani- en la operación a la que fue sometida luego de haberse quemado con caramelo mientras preparaba un postre, en agosto del año pasado.
“Uma se quemó durante la cuarentena. Fue con caramelo, pero se quemó desde el dedo gordo hasta el codo”, había contado por ese entonces y agregó además de la cicatriz que le quedó en su brazo, se le produjo un queloide “que le dolía muchísimo”. “Así que, a la larga, la tuvieron que operar. Es una operación simple, a la media hora tenía el alta, pero cuando ves a tu hija que entra al quirófano es tremendo”, se sinceró en ese entonces sobre la niña de 13 años.
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