El miércoles por la tarde Laurita Fernández inauguró una nueva puerta en Bienvenidos a bordo, destinada a elegir “la mejor drag queen”. Cuatro participantes desplegaron su talento y glamour con deslumbrantes outfits, además de crear algunas performances de baile. La conductora se mostró fascinada por los atuendos de cada artista, y luego de un juego de palabras con el apellido de Hernán Drago lo invitó a participar de un desfile improvisado con un look especial para la ocasión.
“Se viene pasarela total con brillos, sencillita nunca acá”, anunció Laurita antes de quedar atónita por el capsuit que lució Roma. “Se arma la fiesta, bajá las luces, porque mirá lo que es este maquillaje, cada una de las perlas y lentejuelas, esto lleva mucha dedicación”, expresó con admiración. Después llegó el turno de La tía Miguel, otra drag queen que apostó por un total pink, y más adelante arribó Sulú, quien mostró dos oufits en uno frente a las cámaras al ritmo de Lady Gaga.
Sobre el final hizo una enérgica coreografía Artemisa, y a pedido de la conductora explicó de qué se trata el mundo drag: “Es una expresión artística que depende de cada uno cómo lo quiere plasmar, que tiene su historia desde hace muchos años, en tiempos donde no estaba permitido que las mujeres actúen y los hombres interpretaban papeles femeninos”. Mientras tanto, el modelo miraba atento a cada participante desde el panel de los jurados, integrado también por Anamá Ferreira y Rodrigo Vagoneta.
“Y está Drago, que podría ser drago queen”, bromeó Laurita. Sin dudarlo, Hernán contó que ya había hecho desfiles junto a varios drag queens en varios eventos y aseguró que podía sumarse a la pasarela una vez más. “Vení entonces, vamos a lookearte un poco por favor”, le pidió la conductora. Rápidamente le prestaron una túnica bordada con lentejuelas rojas y detalles dorados, y un turbante a juego para que pudiera modelar.
Con la famosa canción “Todos me miran”, de Gloria Trevi, el show comenzó y Drago hizo algunas poses para la cámara, con el humor que lo caracteriza. Movimientos propios de música disco y algunas vueltas para lucir su flamante look generaron las carcajadas de los presentes en el estudio, que aplaudían y arengaban detrás de cámara. Después del divertido momento el ciclo que se emite por la pantalla de El Trece continuó con el resto de las puertas, y el mismo jurado tuvo la tarea de decidir quién se destacaría en el segmento de “los parecidos” y en la degustación de la mejor comida, donde cada emprendedor presenta platos de gastronomía de distintos países.
Sobre el final anunciaron quién se consagraría como la ganadora de la tarde, y todos volvieron a hacer una última pasada para demostrar su talento. “Estuvieron excelentes todas, un gran manejo del escenario, con estilo propio, glamour, y les voy a pedir si me prestan la capa y el turbante para el fin de semana”, expresó en tono de humorada el modelo cuando le tocó dar su devolución. Aunque aclaró que fue difícil elegir por la variedad de looks y las características de cada personaje, consideraron que la mejor drag en esta ocasión había sido La tía Miguel.
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