“Yo tenía una figura envidiable, pero pasaron cosas en la vida... Se fue el papá de mi hija, un hombre que fue fundamental en mi vida. Si bien cuando partió estábamos divorciados, me hizo muy mal. Y empecé una carrera ilógica y durísima de la obesidad. Ahora creo haberme reinventado, volví al ruedo. Y lo hago por mí, por la gente que me quiere, mi familia y amigos”.
Del otro lado del teléfono se escucha a Marita Monteleone, la locutora reconocida por ser la voz de frases que quedaron inmortalizadas por su trabajo para la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (ENTel): “El número solicitado no corresponde a un abonado en servicio”; “La característica marcada se encuentra temporalmente congestionada. Por favor, corte e intente nuevamente dentro de unos minutos. Muchas gracias”.
Esta vez, la locutora le pone la voz a su propia historia de vida. Y cuenta que sufrió mucho en el 2004 cuando murió Roberto de los Ríos, ex marido y padre de su hija Malena. Llegó a pesar 164 kilos. En febrero 2020 se encontró sentada en su cama “sin poder dar cuatro pasos seguidos” y quiso empezar un cambio. “Estaba preocupada porque prácticamente no podía caminar”, dice Marita en diálogo con Teleshow.
Por ese entonces, la histórica locutora de radio El Mundo se acababa de jubilar de la emisora y había decidido reinventarse haciendo transmisiones a través de su cuenta de Instagram. Lo hacía desde su casa, con lo cual no necesitaba trasladarse hasta su trabajo. Sin embargo, ella quería ejercitarse, tenía miedo de que llegara un día en que no pudiera caminar más.
Habló con su kinesióloga y comenzó a caminar de a poco. Primero una cuadra, luego dos, tres, y así fue progresando. También cambió su alimentación: dejó las harinas y las gaseosas, e ingiere alimentos sin sal, lo que le mejoró la hipertensión que tenía antes. “Estaba entre 16 y 18, ahora, en 7 u 8″, celebra quien hoy va a pie “a todos lados”: “Camino 70, 80 cuadras por día. Hasta corro”.
En poco más de dos años, adelgazó más de 74 kilos y para ella fue un cambio de vida. Es que más allá de lo estético, la locutora prioriza su salud y todo lo que puede hacer ahora y que antes se lo impedía.
El cambio mayor lo notó cuando tomaba el colectivo para ir a Zárate a visitar a su hermano. “Me ayudaban a subir los conductores. Hoy lo hago sola y hasta cargando un bolso”, destaca quien aprovechó la oportunidad para poder realizar otro tipo de viajes que antes tampoco hacía.
“Voy al cine o al teatro, y me sobra espacio en la butaca”, continúa quien también dejó de ingerir alimentos con azúcar. Toma dos litros de agua por día y resalta que no se da “ni un gusto”. Por caso, cuando tiene una reunión o algún cumpleaños, se lleva su recipiente con verduras y frutas. “Antes comía papas fritas y tomaba gaseosa”, dice quien hoy hace las cuatro comidas, una colación, suma las frutas de estación y también toma caldos sin sal. “La gente se pone contenta por mi salud”, resalta y agrega: “El cutis que tengo hoy no lo tenía ni a los 16 años. ¡Es brillante! Soy feliz porque a los 64 años me dan 50″.
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Como parte de los cambios que hizo, la locutora comenzará a estudiar la carrera de periodismo en la Universidad de San Martín. Vive en Caballito y para ir a inscribirse decidió hacer un trayecto en colectivo pero luego siguió el recorrido caminando y hasta corrió porque estaba justa con los tiempos. También cuenta que comenzó a seguir un plan de alimentación con una nutricionista: “Para saber si estoy haciendo bien las cosas. Necesito que alguien me guíe porque a veces me paso”.
La locutora sostiene que el aislamiento por la pandemia del coronavirus la ayudó porque tuvo el tiempo necesario para reordenar su departamento, fundamentalmente su placard. Y aprovechó la oportunidad para enviar a refaccionar y achicar toda su ropa ya que cambió de talle: “No quiero comprarme nueva porque la que tengo es de muy buena calidad. Cuando lo necesite lo haré, hoy elijo transformarla”.
Marita celebra que hoy los estudios de rutina le dan “bárbaro” y que pudo cambiar los hábitos: “Mi mensaje es que se puede. Yo antes comía cinco porciones de pizza, hoy elijo las galletas de arroz, los jugos light”. Y agrega que hace ejercicio físico mientras limpia su casa. “Cuando barro, limpio los vidrios. Antes no podía”, dice con orgullo quien se destaca como locutora de Boca de Selección en Radio Colonia y quien conduce su propio programa, Marita Monteleone Presenta, en Radio Conectividad.
Hoy, lleva su botella de agua a todos lados, sigue el plan alimenticio que le armó su nutricionista y agrega que si tuviera que entrenar lo haría con el profesor Sergio Verón. Mientras tanto, sigue cantando -”es sanador”, sostiene-, disfruta de sus trabajos en la radio y adelanta que pronto tendrá novedades para un proyecto en televisión.
“Es una nueva Marita, la de antes”, concluye Monteleone hablando de ella en tercera persona y recordando el físico que tenía hace 16 años, pero destacando que su esencia es la misma, la que la caracterizó siempre.
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