La segunda entrega de El Hotel de los Famosos llegó recargado. A la habitual dinámica del programa, con los quehaceres propios del hospedaje sumados a desafíos de destreza física, se le agregaron las historias personales que empiezan a generarse entre los participantes. Algunas cuestiones vienen de larga data, como la de la actriz Sabrina Carballo y el exfutbolista Maximiliano Chanchi Estévez, quienes fueron pareja y se reencontraron en el concurso de El Trece. Y otras empiezan a surgir al calor de la convivencia, como la el vínculo del músico Leo García por uno de sus compañeros.
Durante el envío de este martes, las primeras tensiones surgieron cuando la conductora Carolina Pampita Ardohain presentó la ruleta de la verdad, un juego con la excusa de que los participantes se empiecen a conocer y en el cual afloraron algunos sentimientos. Por caso, Carballo y Estévez se quebraron al recordar su relación. A la actriz le salió “deseo” en el azar y el que tomó la palabra fue José María Muscari en su faceta de coach. “¿Vos tenés pareja afuera?”, y ante la respuesta negativa, el creador de Sex redobló. “Porque tenés pareja acá adentro”, apuntó en referencia al ex futbolista.
En el backstage, la actriz recordó con mucho cariño al delantero. “Maxi fue, es y será una persona muy importante en mi vida”, señaló con los ojos vidriosos. De vuelta en el piso, el coreógrafo quiso saber qué había terminado con la pareja de cuatro años. “Se gastó. Yo me fui a jugar afuera...”, explicó el ex Racing. “No me gusta hablar de mi vida privada, pero el amor no se terminó, él es mi familia”, aseguró y lanzó una frase contundente: “Si mañana precisa un órgano, se lo doy”.
En ese punto, Pampita fue directo al hueso. “¿Alguno de los dos quedó con el corazón roto?”, indagó la conductora, provocando las emociones de todos. “No quiero hablar de esto, porque yo lo re quiero a él, y siento que le rompí el corazón. Los dos nos sentimos muy mal”, respondió la actriz entre lágrimas, que ahora eran compartidas. “Yo la quiero mucho y también soy un tipo que me emociono”, señaló el Chanchi.
Previamente, había pasado Leo García a quien el azar también se le había detenido en el “deseo”. “Mi deseo es pasarla bien todo el tiempo”, respondió genérico el músico, lo que motivó el contraataque de Pampita: “¿Y el deseo carnal?” . El artista entendió el juego y respondió sin rodeos: “Me gusta Martín. Él es muy sexual, se mete en la cama de todos, pero no en la mía, porque me tiene miedo”.
Pero la cosa no quedó allí y el ex colaborador de Gustavo Cerati fue más allá: “Me dijo que me quería hacer el amor una noche”. Ante el bullicio de los participantes, el locutor no se hizo cargo de la frase. “Me caés muy bien”, gambeteó. “Lo dije en chiste. Es más, no registro el momento puntual, lo dije muy a la ligera”, reconoció en el back. Para García no fue suficiente, aunque por el momento no mostró rencor: “No te voy a nominar. Por ahora pienso así”, aclaró.
Más tarde, volvieron a cruzarse durante el desayuno, cuando el locutor pescó un piropo que la bailarina Melody Paz le dijo a la periodista Majo Martino y se mostró interesado en el asunto: “¿Morochas o rubias?”, le preguntó, mientras de fondo el músico mostraba gestos de incomodidad. “¿Por qué la gente se hace tantas preguntas por la sexualidad?”, interrumpió visiblemente ofuscado. “Me incomoda mucho este tema y hoy me molestó durante todo el día”, continuó, ante el silencio de sus compañeros.
García rememoró lo ocurrido durante la rueda y siguió con su argumento. “Hay que superar esta temática, que quién le gusta a ella, que quién me gusta a mí, que si yo soy homosexual, que si él me tiene que c... o ese tipo de cosas”, continuó, dirigiéndose a Salwe todavía con la mirada. “Es muy poco evolutivo esto, son muy machistas ustedes”, continuó, para ahora sí dirigirse al ex locutor de ShowMatch. “Yo me senté ofendido cuando me dijiste que me querías c..., no fue un chiste “, señaló para recordar su historia personal.
“Mi homosexualidad me representa y esyo retomó un trauma que vengo acarreando de chico”, argumentó el músico, mientras que su compañero lo escuchaba atónito: “Te pido disculpas si es así”; atinó a esbozar extendiendo su mano en son de paz. “Sí, es necesario que pidas disculpas y que no hagas más chistes con los demás. Me parece que es algo que tenés que superarlo”.
En el backstage, el músico dio más detalles de la situación: “Trato de seguirle el juego, pero llega un punto donde me hiere. Tiene que ver con un asunto personal mío, pero ninguno de mis compañeros actúa así”, reconoció. Salwe volvió a ofrecer sus disculpas. “Fue sin querer, no voy a hacer algo para dañarte. Lo último que haría acá es molestarte a vos”, expresó el locutor, y se preocupó por el estado de su compañero. “Sacando eso, ¿estás bien?”. “Sí, respondió, lacónico, el autor de “Morrisey”, y eligió la palabra “tensión” para describir la situación y dar por finalizado el tema. Al menos, por ahora.
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