Paulo (Londra) y Rocío (Moreno) se tenían de vista de los recreos, él un año más grande que ella, tenían amigos en común pero nunca habían hablado. Luego de que ella se cambiara de escuela, cuando Instagram casi no se usaba, pero sí Facebook, él se animó a agregarla como amiga y comenzó a escribirle. Chat va, chat viene, finalmente se encontraron pero fue en la segunda salida que tuvieron recién que el flechazo llegó. Aquello fue mucho más que un amor adolescente. Con nada más que 21 años cumplieron su sueño de formar una familia y hoy, ya “no hay nosotros”.
“El 1° de mayo de 2015 nos empezamos a hablar y para mi cumpleaños, en julio, nos cruzamos en la zona del Chateau, acá en Córdoba. En realidad, no fue amor a primera vista… La segunda vez que lo vi yo quedé encantada y enamorada. Ahí empezó nuestra aventura”, recordó ella en Secretos Verdaderos el año pasado.
Por aquella época, mientras comenzaban su noviazgo él soñaba con ser cantante y ya iba a las batallas en las plazas hasta que en el 2017 él comenzó a hacerse famoso y a realizar sus primeros shows. El año siguiente los encontró muy bien en cuanto a lo profesional, pero lejos el uno del otro. Ella comenzó a estudiar veterinaria en una ciudad en las afueras de Córdoba Capital donde se instaló por lo que se veían muy poco tiempo: de lunes a viernes Rocío cursaba y los fines de semana él trabajaba.
Decidido a querer estar con aquella joven que lo deslumbraba en los recreos, en el 2019 él compró una casa (un amplio terreno con dos inmuebles, uno para él y otro para sus padres) y le propuso, a pesar de su corta edad, irse a vivir juntos. Enamorada y convencida de querer acompañarlo en su carrera como cantante, ella tuvo que elegir, y apostó al amor: dejó la facultad y empezó la convivencia.
“Siempre tuvimos proyectos de familia grande, sobre todo él”, dijo ella en diálogo con Teleshow. Juntos formaron una gran dupla, ella comenzó a meterse en el mundo del trap, hasta antes inhóspito y se convirtió en influencer, lo acompañaba a los recitales, giras y hasta fue a Europa cuando él grabó con Ed Sheeran. Gran equipo en lo profesional y también en el amor, decidieron sellar su amor y así llegó su primera hija, Isabela.
La pequeña nació en julio del 2020, en plena pandemia. “Estábamos felices”, recordó Rocío. Aunque para ese entonces ya habían tenido algunas crisis, ella pensó que era algo normal y pasajero. “Se mostró arrepentido y me pidió disculpas, hizo muchas promesas, apostamos a la familia y proyectos”, dijo y fue entonces que se dieron una nueva oportunidad y decidieron agrandar la familia.
Pero no todo lo que brilla es oro y en este segundo embarazo, Rocío no la pasó nada bien. “Paulo empezó a salir más, a juntarse con amigos. No es que yo no quiera que se junte, el tema es que estaba ausente en la casa y cada vez volvía mas tarde o prácticamente no volvía a casa, y se quedaba en la casa de los padres para que yo no viera los horarios y cómo volvía”, contó la joven mamá que en febrero dará a luz a su segunda hija.
Así las cosas, según su relato, transitó prácticamente sola su embarazo, cuidando a su hija de poco más de un año. “Se despertaba a las 17 o las 19, y se cruzaba a tomar mate de los padres: estaba muy poco acá. Los primeros meses de embarazo estás muy cansada... y él, con los amigos. Recuerdo una madrugada que yo, descompuesta, le pedí que volviera para ayudarme (estaba con su hija de un año) y dijo que llamaba para fastidiarlo. Terminé jugando con Isabela descompuesta, y apareció a la mañana”, ejemplificó.
Para ella, lo último y lo que terminó de definir su distanciamiento -nunca tuvieron una charla para ponerle punto final a la relación- fue el viaje de él a Estados Unidos hace tres semanas, del cual ella se anotició a través de las redes sociales. “Un domingo me dijo: ‘Tengo pensado viajar’, pero ahí quedó. Ya se había ido a Mina Clavero con amigas y amigos sin avisar, un fin de semana. Pero cuando veo que estaba en Minnesota o no sé dónde... No le llegaban los mensajes que le mandaba y una semana después se contacta y me dice que no se podía comunicar por un problema en su teléfono. Pero para subir historias sí le andaba...”, dijo.
Aún no puede explicar qué le pasó al músico que por estos días ya pasó a ser su ex: “No creo que sea susto, tiene que ver las influencias, el entorno y él que no tiene madurez para saber dónde está y lo que debe hacer”. Lo que sí sabe, es que ya no hay “nosotros”. “No elijo vivir así, ni para mí, ni para mis hijas. Hoy tengo unas sensaciones de enojo y angustia... Soy una explosión de sentimientos. Nos une una relación de por vida, pero como papás”, cerró.
SEGUIR LEYENDO: