La entrevista que le concedió Wanda Nara a Susana Giménez todavía sigue dando que hablar. La palabra de la empresaria era la más esperada desde hace poco más de un mes, cuando estalló el escándalo en su matrimonio con Mauro Icardi, con Eugenia La China Suárez señalada como la tercera en discordia. Durante el día, se habló de lo que dijo y de lo que prefirió callar; de lo que preguntó y de lo que no preguntó la diva, de la puesta en escena en la imponente noche parisina y de la presencia final del futbolista.
Los programas de espectáculos abordaron estos y otros temas, y claro está, no fueron los únicos. Se sumaron los noticieros, que vienen cubriendo el caso desde su inicio; se aludió también en los deportivos, dada la profesión de una de las partes involucradas; las redes sociales brillaron con su habitual festival de memes y acaso como suma de todos estos debates, fue el gran tema del miércoles en Polémica en el bar.
El programa que conduce Mariano Iúdica abrió la edición vespertina con un estudio exhaustivo del especial que duró poco menos de una hora y que funcionó como adelanto de una emisión mucho más extensa que se verá por Paramount+. Con los habituales panelistas Chiche Gelblung, Marcela Tauro, Mercedes Ninci, Flavio Azzaro, Augusto Tartufoli y la presencia del especialista en comunicación no gestual Hugo Lescano, repasaron el diálogo entre las mujeres con la Torre Eiffel de fondo. Sin embargo, Iúdica puso el foco en la intervención de Icardi, y reveló la trastienda de su breve aparición en la pantalla.
“Él va vestido de gaucho a propósito para que Wanda no lo haga entrar. Cuando Wanda lo ve, lo mira como diciendo ‘con esa ropa no vas a entrar acá, andá a cambiarte’”, soltó el conductor, armando el primer debate en la mesa. “No fue vestido para la nota a propósito”, ratificó ante el cuestionamiento de Gelblung, que señaló que estaba pactado que fueran los dos. Según Iúdica, fue la diva la que decidió que el futbolista ingrese en el cuadro: “Cuando Susana lo ve, no lo deja que se vaya a cambiar”, amplió antes de analizar el semblante con el que la empresaria recibió el ingreso de su marido.
En este punto, Lescano analizó a postura del delantero del PSG y manifestó algunos elementos que le llamaron la atención. Según su lectura, no estaba preparado su ingreso y le acercaron una silla de menor rango, se sentó con las manos a la defensiva mientras recibía la mirada inquisidora de su esposa que no lo tocó ni cuando le dio un beso. “Está vestido y peinado como el nene que lo llevan retadito a ver a la abuela”, graficó Iúdica, una figura que avaló el especialista.
Sin embargo, en medio del debate, acercó una de las variables a la postura de Gelblung: “Yo estoy de acuerdo en que hay una preparación, como dijo Chiche, pero también es cierto que se salieron del libreto y no se hizo todo lo que se había pactado”, analizó Lescano. “Porque es una pareja que huele a cadáver y están haciendo una representación, un acting para un negocio”, replicó el periodista, y justificó su respuesta en el regalo de Wanda a Susana: una caja con productos de su empresa de cosmética. ¿Ustedes creen que lo pagó Telefe? Ese fue el negocio”, insistió Chiche, esgrimiendo una teoría que recibió el aval de Tauro
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