El miércoles los catorce participantes que siguen en carrera en Bake Off Argentina (Telefe) se enfrentaron a un nuevo desafío creativo, que puso a prueba su dominio para la organización y su inventiva para idear un combo de cine con cuatro preparaciones. El objetivo propuesto por el jurado consistió en evaluar lacapacidad para trabajar en serie y resolver una propuesta de candy bar distinta al clásico balde de pochoclos dulces. Como todos los días, Paula Chaves recorrió las estaciones de cocina de cada concursante y mantuvo una charla a corazón abierto con Gino “El Gaucho” Minnucci, el joven de 22 años que estudia ingeniería eléctrica que también sueña con ser el gran pastelero amateur de nuestro país.
La consigna exigía que cada uno hiciera un snack dulce horneado, otra colación salada, una golosina y un balde de pochoclos saborizado de manera innovadora. En este sentido, hubo variadas elecciones en las distintas propuestas: desde maíz inflado sabor pizza hasta una combinación de panceta y chocolate. Este desafío contó con la presión extra de que se trata del comienzo de una nueva semana donde se irá un tercer participante de la carpa, tras la eliminación de Belén y Gabriel. Atenta a los movimientos de cada concursante, la conductora se detuvo en la isla de Gino para indagar sobre su vida sentimental.
Chaves aprovechó que la temática se prestaba para una conversación sobre el amor y se basó en la idea del cine como “cita romántica”. La modelo fue directa y le preguntó por una información que el joven había dejado entrever algunas semanas atrás: “¿Con la chica que el otro día dijiste, que se Fátima se llama, no?”. Sin ocultar su nerviosismo, el participante respondió dubitativo: “Puede ser, puede ser”. Detrás de cámara fue aún más sincero y advirtió: “Paula está pinchando, insistiendo todo el tiempo”.
“¿Y hace cuánto que están?”, le consultó la conductora. Mientras seguía batiendo sus preparaciones y trataba de esquivar las preguntas, Gino aclaró que no está en una relación de noviazgo, pero sí conoce a la joven desde la infancia. “Somos amigos de toda la vida, desde salita de 3 más o menos”, reveló. Chaves no pudo ocultar su asombro y comentó: “Ay no, me vuelvo loca, como Messi y Antonela”. Con la timidez a flor de piel y las mejillas coloradas, el participante asumió: “Sí, más o menos”. Cabe aclarar que el concursante le había dedicado una de sus tortas a una “amiga” de Pérez Millán, la localidad del partido de Ramallo de la que es oriundo, y como el pastel tenía corazones, la versión de romance no tardó en surgir desde ese entonces.
“¿Y cuándo fue que te diste cuenta que Fati ya no es más la amiguita del jardín?”, repreguntó Paula. “Hace como tres meses con un Gin demás”, respondió entre risas el joven, y luego trató de dar por finalizado el tema: “Ya me pongo nervioso, es que estas cosas no me gusta hablar a mí”. Sin embargo, agregó una fuerte confesión al final: “Sí, me considero romántico, pero nunca me había enamorado”. De todas maneras, insistió en que no existe un vínculo formal, pero sí un lazo que los une hace dos décadas.
“Uno puede ser libre y estar enamorado”, concluyó la conductora, luego de celebrar su declaración de amor. Después de la charla entre ambos el hashtag “#Gino” se posicionó como una de las tendencias de Twitter, y una vez más “el gaucho” de la competencia de convirtió en protagonista en el mundo virtual. La revelación del participante llega un día después de su cruce con Hernán “El Arquitecto” Canalini, quien avanza a paso firme en el ciclo y logró destacarse en varias de las pruebas culinarias.
La pica comenzó cuando Hernán lanzó un lapidario comentario sobre su compañero: “Si tiene tantas ideas y poder para el chamuyo, que se dedique a ser artista en vez de pastelero”. Cuando Gino escuchó esa frase le respondió con una advertencia detrás de cámara: “Conmigo no te metas porque el karma te ataca”. En el siguiente desafío el arquitecto tuvo dificultades inesperadas con el papel manteca de los bizcochuelos y el joven aprovechó para recordarle: “El karma pega fuerte, Hernán, ya te dije, y así se saca el papel manteca, te enseño cuando quieras”.
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