“Estoy a punto de leer un capítulo de La 1-5/18″, dijo Adrián Suar en una entrevista radial, a poco más de una semana de haber estrenado la ficción de Polka, la primera luego de la pandemia, lo cual se celebra. El actor y productor, que pronto debutará también en el rol de director de cine, habló de la situación de las ficciones nacionales y expresó estar desilusionado con la diligencia política.
Todo comenzó luego de que dijera que muchas veces se cuida a la hora de decir públicamente lo que piensa. “A veces no tengo la profundidad del pensamiento fino, puedo decir algo sin tener toda la información o estar plagado en algunos hechos de una gran subjetividad”, explicó en diálogo con el ciclo Pasajera en Trance por AM750 y agregó: “Tengo temas con los opinólogos, el que se envalentona con seguridad sin decir ‘me parece, creo’, algunas cosas son certeza, pero primero la educación de decir ‘me parece, creo’ para arrancar la charla”.
En ese sentido dijo que muchas veces le ha pasado de pensar de una forma y con los años reflexionar y cambiar de opinión: “En la política, o algunas cosas, pensé algo y me comí el amague”. Además, dijo estar “peleado con la diligencia, desilusionado” y amplió: “No puedo creer hay políticas de Estado en las que nos tenemos que poner de acuerdo, hay pensamientos opuestos lo sé, pero hay doce políticas en las que se tienen que dejar de joder porque mientras peleamos por la grieta la gente la sigue pasado mal... los de abajo, la clase media, los de arriba no, siempre se la arreglan”.
“Deberían hacer un acuerdo y que Argentina se ponga no tan adolescente. Se mediatizó mucho hasta la política de un lado y del otro, me gustaría una Argentina mas unida, pensar a veinte años”, dijo y al ser consultado sobre a qué se refería cuando hablaba de “doce políticas de Estado”, dijo: “Seguridad, educación, salud, arreglar entre todos qué necesitamos, bajar la inflación”.
“La política nos toma algo tan emocional”, dijo y recordó: “Me ha gustado mucho el primer gobierno de Néstor Kirchner, siempre lo dije, después no me gusto lo que sigue, después cuando vino Macri dije que sí, después que no, constantemente voy a terapia conmigo y reflexiono, el progresismo me gusta, me gustan las políticas de Estado, hay cosas que sé que me gustan, que la opinión del otro sirve, me importa, no demagógicamente”.
Además, confesó que durante una época del kirchnerismo tuvo su “período de encabronamiento” ya que sentía que el “gremio estaba muy politizado”: “Siento que no le hace bien porque muchos (artistas) que conozco y quiero no piensan como yo, en otras cosas estoy de acuerdo, pero no en todo”. Se refería a “esa pelea constante de ‘me gusta tal’, ‘me gusta este’, y mi punto de encuentro con un artista es por otro lado”.
Hace poco más de una semana se estrenó La 1-5/18 con Agustina Cherri, Gonzalo Heredia, Estaban Lamothe, Lali González y Luciano Cáceres. Dijo que aunque la historia que se desarrolla en un barrio humilde coincide con un momento particular del país, la tenía pensada desde hacía años y que la idea inicial que se fue modificando era que fuera una película.
Hacer ficción no es fácil ya que se trata como él mismo definió de “productos caros”: “Hoy las audiencias se diversifican y es difícil por los costos y lo que puede rendir, pero siento que tendría que haber apoyo a la ficción para que cada canal pueda tener al menos una ficción. Los costos son tremendos y a veces ponés tanto que cuando perdés se pierde muchísimo, pero si no apostas un poco.. a veces hay programas de entretenimientos con mucha producción y es bueno, no son los actores los únicos que tienen que apoderarse del prime time”.
Este año Suar dirigirá por primera vez una película que lo tendrá como protagonista junto con la actriz Pilar Gamboa: “Su personaje es el mas fuerte y puedo descansar en estar en un doble rol”. Sobre cómo será mirarse, bromeó: “Lo voy a transitar por primera vez, no tengo tema en editarme medio asco mil veces, a veces me gusta y a veces no”.
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